En las últimas horas, la Municipalidad de la ciudad de Mendoza presentó un proyecto para erradicar los "trapitos", mediante la capacitación de quienes trabajan cuidando autos para que sean incluidos en puestos de trabajo formales en el sector privado.
Según publica la agencia Noticias Argentinas, la propuesta, presentada por el intendente Rodolfo Suárez, tiene un doble fin: por un lado, modificar el Código de Convivencia de Capital para tipificar esa conducta considerada indebida de cobrar o exigir dinero a cambio de cuidar los autos que los vecinos estacionan en las calles donde el municipio no cobra y, por otro, acompañar la iniciativa con un plan de reinserción laboral.
"Yo les pedí a los concejales una pronta sanción de esta ordenanza para empezar de inmediato estas acciones. Nadie podrá cobrar en aquellos lugares en los que el Estado no cobra, porque la vía pública no es de nadie, sino que es de todos, nadie puede apropiarse y mucho menos de manera extorsiva", expresó Suarez.
Para evitar que los trapitos sigan trabajando en distintas zonas del municipio se instruyó a los preventores para solicitar el apoyo de la policía y realizar la denuncia penal, en el caso de una cohersión, o contravencional, si es una falta.
Además, según Diario UNO de Mendoza, el intendente volvió a pedirles a los ciudadanos que ante una situación así ellos también realicen la denuncia.
"Muchas personas dejan su auto estacionado, un vehículo que a lo mejor compraron con mucho sacrificio, y no pueden dejarlo tranquilos porque sufren amenazas de que se los dañarán", enfatizó.
Dentro de la modificación del Código de Convivencia se establecerán las sanciones para las personas que sigan trabajando de trapito, y las mismas son el decomiso para los que usen vestimenta similar a los tarjeteros que trabajan dentro del sistema municipal, la multa, que en primera instancia ronda las 1.000 unidades tributarias (es decir, unos 600 pesos) y el desalojo de la vía pública.
Además, para controlar la situación se incrementarán los controles en la calle, sobre todo en la zona de Arístides Villanueva, Juan B. Justo y en el barrio Bombal, sectores donde también se ampliará el estacionamiento medido.
Un estudio hecho por la Ciudad arrojó que los trapitos son aproximadamente unos 300 jóvenes, muy pocos de ellos radicados en la Capital, y que el número se modifica solamente cuando hay eventos importantes.
Por ese motivo, Suarez aseguró que están trabajando junto con el resto de las comunas del área metropolitana para extender la medida y con el Gobierno provincial, que prevé modificar el Código de Faltas.
Una vez sancionada la nueva ordenanza, se empezarán a buscar las conexiones con las empresas privadas que puedan brindarles trabajo a los trapitos.
"Aún no cerramos acuerdos, pero estoy gratamente sorprendido porque muchos empresarios se comunicaron conmigo, sobre todo los de la construcción, que me dijeron que no encuentran personas calificadas con las condiciones mínimas. Por ese motivo, junto con la UNCuyo les daremos la capacitación y las instrucciones para cumplir con esos requerimientos básicos", dijo el jefe comunal.
¡Los trapitos! Es una forma de MENDICIDAD, no de trabajo. Está bien que se les ofrezcan OPORTUNIDADES. En una mano LA LEY y en otra la OFERTA DE CAPACITACION. Si no acceden a la segunda, pues deberán ser detenidos, agravandose la cantidad de días de estadía en prisión segun la reincidencia. ¡QUIEN AVISA NO TRAICIONA! ¡Basta del verso de "no hay oportunidades". "la sociedad es la culpable de todo", mientras tanto los que SI se hacen cargo de sus PROPIAS vidas, deben solventar a aquellos que se ponen en victimas, sin realizar un minimo esfuerzo por superarse. Trabajo hay para estos sujetos. En las grandes urbes, hay espacios públicos que necesitan mantenimiento permanente, incluida la vigilancia. Tranquilamente con todos estos mendicantes, capacitación previa, podrían ser jardineros, parquizadores,mantenimiento electrico incluidas las fuentes si las hay, reparadores de juegos y mecanismos para el fitness, soldadores de rejas y VIGILADORES durante las 24 hs, para evitar que esos espacios sean aprovechados para el tráfico y el delito. Con ellos podrían armar cooperativas de servicios y el municipio, abonarles un canon mensual por cada rubro de prestación, con la condición de que el servicio sea EFICIENTE Y CONSTANTE.
Cirrecto Piratón, trabajo no falta, faltan ganas de trabajas; aplicarles el Código Contravencional y en su defecto el Penal y se acaba el problema. Pero los políticos siempre estan pensando en la próxima elección y como estos marginales votan, los necesitan (a veces para trabajos sucios, no nos hagamos los distraidos, muchso son regenteados por barras bravas, sindicatos, etc. todos "gente de trabajo, pero de confianza".
Antes o junto a la Ley hay que acondicionar / crear los lugares de capacitación Además se les debe hacer entender / firmar un contrato. Ya que esa "capacitación" la paga el ciudadano con sus impuestos.
Goyolin:Donde hay universidades públicas, tranquilamente podría imitarse el programa de la Universidad Nacional de Córdoba, que con gran exito ha creado la escuela de oficios.https://www.unc.edu.ar/extensi%C3%B3n/escuela-de-oficios-unc-inscripciones-abiertas-primer-cuatrimestre, Por otra parte recuerde que el INTA desde hace décadas imparte cursos de todo aquello vinculado a la actividad rural, desde granjas orgánicas hasta cria de animales, pasando por cultivos de aromáticas. El mismo INTI y CONICET, podrían desarrollar programas de incentivo laboral. Para los ESTADOS (Nacional, Provincial y Municipal) es mejor INVERTIR en centros de capacitación que entregar subsidios. Hasta la AFIP debería ayudar a financiar estos emprendimientos con el fin de tener personal registrado y mas actividad productiva comercial, que en el fondo para ellos redundará en MAS RECAUDACCION.