A pesar de haber acercado posiciones con los gobernadores Juan Manzur y Gerardo Zamora, el Gobierno todavía no tiene los votos para aprobar el Presupuesto 2019 y la negociación no sólo continúa, sino que hasta puede complicarse, lo que lo obliga a abrir un canal de diálogo nuevo con legisladores independientes.
La Casa Rosada consiguió finalmente que el santiagueño Zamora y el tucumano Manzur firmaran la adenda al Consenso Fiscal de 2018, pero los caudillos del NOA le aclararon al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, que eso no significa un apoyo cerrado al proyecto de presupuesto y que seguirán discutiendo.
Entre los dos mandatarios articulan nueve votos en la Cámara de Diputados y posiblemente cinco en el Senado y los están haciendo valer: ambos organizan un nuevo encuentro de gobernadores para el próximo martes para seguir haciendo un punteo de los reclamos al presidente Mauricio Macri.
Fuentes del entorno de Zamora señalaron a la agencia Noticias Argentinas que el santiagueño -mientras mantiene la presión con la demanda que inició contra la Nación en la Corte Suprema de Justicia por la eliminación del Fondo Sojero- afirma que la aprobación del Presupuesto podría destrabarse si suben al doble las retenciones a la soja.
Esta condición contaría con un significativo consenso entre los gobernadores de la oposición porque “evitaría subir el boleto de transporte” y les permitiría “mantener la tarifa social de la luz”, según los allegados al mandatario santiagueño.
La idea de que las retenciones no sean de cuatro pesos por dólar sino de ocho no le agrada al Gobierno pero paradójicamente surgió de uno de los suyos: el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, vecino regional de Manzur y Zamora. ¿Es una chicana de los caudillos a la Nación o se convertirá en un pedido concreto después del martes próximo?
A esto se le suma que los diputados del kirchnerismo, el massismo y los justicialistas federales ya advirtieron que unirán fuerzas para trabar algunos artículos del Presupuesto, como el que flexibilizaría las condiciones para renegociar la deuda externa.
El Gobierno sabe que el camino no está allanado y por eso Frigerio comienza a explorar otros canales de diálogo con el Congreso, como el senador Adolfo Rodríguez Saá y la diputada Ivana Bianchi, ambos de San Luis.
Según supo Noticias Argentinas, el ministro desayunará con ellos la semana próxima para sondear su posición frente al Presupuesto 2018, tal vez aprovechando que el influyente senador puntano no responde a su hermano, el gobernador Alberto Rodríguez Saá, a quien sueña con suceder el año próximo.
Distracción y ¿complot?
El único episodio que distrajo al Congreso de la omnipresente discusión económica fue el fallido nombramiento de Elisa Carrió como presidenta de la Comisión Bicameral que controla las actuaciones del Ministerio Público Fiscal.
No fue algo raro que todas las caras de la vasta oposición peronista vaciara la comisión para impedirle asumir a su antagonista predilecta, pero sí fue raro que el oficialismo expusiera a su aliada a ese momento y la misma Carrió sospecha de sus propios colegas de Cambiemos.
Y es que el argumento oficial de la oposición para quitarle quórum a esa bicameral fue que había una ruptura del acuerdo parlamentario según el cual la presidencia le corresponde un año a cada Cámara y en esta ocasión era para el Senado.
Por ello, Cambiemos le había reservado el lugar al senador correntino Pedro Braillard Poccard pero por alguna razón alguien le pidió que diera un paso al costado y allí entró la propuesta de Carrió.
Si el lugar ya estaba reservado por el oficialismo a un senador, lo que sugiere que estaba claro el acuerdo parlamentario, ¿por qué propusieron finalmente a una diputada? ¿Desconocían que el peronismo utilizaría esto como excusa para impedirle a Carrió asumir? Difícil.
Sin embargo, en Cambiemos nadie responde estas preguntas y se tiran la pelota unos a otros como una forma de evitar dar respuestas concretas sobre la situación que molestó e hizo sospechar a la cofundadora de la alianza oficialista de un posible “complot” que no excluye a sus aliados.
El presupuesto, a esta altura es solo un objeto de extorsión de la oposición. No lo dicen pero pretenden acelerar la caida del gobierno con la no aprobaciòn, sobre todo ahora que se debe rendir cuentas al FMI. En Argentina, NO HAY CONTROL DE GESTION, por lo que eso de "LA LEY DE LEYES", es decir el presupuesto, es mas una expresión de deseos, a veces, mas que un PLAN DE ACCION. En el gobierno anterior, se caracterizaba por preparar presupuestos por debajo de la recaudaciòn estimada. Sabía que la INFLACION jugarìa a favor del Estado, por lo que había una buena cantidad de fondos superavitarios, de los cuales, el GOBIERNO se habìa RESERVADO, a travès de la figura del Jefe de Ministros, para DERIVARLO COMO SE LE OCURRIERA. De allí a CFK, beneficiaba a la Provincia o Intendencia que el conviniera a sus fines.Así vimos como en el caso de Còrdoba, EXCEPCCIONALMENTE, los municipios de Villa María y Villa Dolores, supieron de la "generosidad" de Cristina, no asì en la mayoría de la Pcia de Còrdoba y con mayor razòn en Còrdoba Capital. ESO no se olvida, incluso HASTA HOY. En el futuro quizás no se vote a Macri, pero mucho menos a Cristina, si se presentara,....excepto maría.