Conocí a Eduardo Prestofelippo, por apócope del apellido El Presto, en la presentación del libro “Cartas de los ‘70” (de Nahuel Sotelo), con la promesa de vernos en otra oportunidad para una entrevista periodística. Sus editoriales lo definen como un gran orador y polemista, provocador e irreverente de la comunicación moderna. Asume en su torbellino de talento, el poder de repentización y el dominio del espacio informativo: Informa, forma, sensibiliza y entretiene ¡Touché! Este Winston Churchill argentino, atiende el portero eléctrico de un departamento del barrio de Palermo (CABA). El cronista de Tribuna de Periodistas pregunta: “¿Hola, hablo con el mejor periodista e influencer argentino?”.

Respuesta: “(Risas) ¡ahí bajo maestro…! Se escucha su acento campechano que lo delata como oriundo de la ciudad de Paraná, Entre Ríos. Si lo tengo que definir en pocas palabras, en buen romance, es un tipazo.

–¿Cómo fueron sus inicios en la comunicación social?

–Gobernaba Entre Ríos Sergio Urribari (del PJ), y se me hizo complicada mi subsistencia. Sufrí mucho la censura del kirchnerismo. Comencé en el humor gráfico para pelear contra las injusticias sociales. Recuerdo la censura y mi despido: hacía imitaciones y no me olvido más, era la imagen de un nene comiendo de la basura y mi voz en off: “gracias a la excelentísima Presidencia de la Nación, este nene podrá recibir fútbol gratis para todos”, y el nene estaba comiendo de la basura. Me echaron. Copa de leche para todos (risas). Luego pasé al humor político, me interesaban las imitaciones. Trabajé para El Diario de Paraná, Revista Análisis, Rumbos, colaboré para La Voz del Interior, etc. Mis referentes en el humor gráfico son, El Negro Roberto Fontanarrosa (en el humor) y Andrés Cascioli (en el trazo), el director de la revista Humor. Fue una cuna de talentos. No veo una generación nueva de estos artistas. En Córdoba la revista Hortensia cambió la manera de hablar de los cordobeses. Se ha perdido eso. Hablamos del año 1973. Somos un país que no valora lo propio.

–¿Qué ha ocurrido en los últimos años en Argentina con el periodismo y la cultura nacional?

–Todo eso se está perdiendo por ser políticamente correctos. Amamos el humor negro. Rescato el periodismo de Julio Blanck, fue un maestro, es un referente. Nelson Castro, Joaquín Morales Solá. El periodismo que dice somos periodistas, pero también defendemos las instituciones. Hoy por más que no concuerdo muchas cosas de Clarín, que le está haciendo el juego al lobby LGBT, al progresismo berreta, no puedo negar que, más allá de todo, las instituciones funcionan más o menos bien, gracias al Grupo. Vos me vas a decir ¿estás desbarrancando? Yo creo que si no hubiese sido por Clarín, el kirchnerismo hubiese seguido ganando. Julio Blanck se puso una guerra al hombro, lo dijo, “esto es una guerra”. En cuanto a la demonización del empresario Héctor Magnetto es injusta. En términos de medios de comunicación es brillante. Señalamos a Magnetto para no vernos nuestras pobrezas. Hay que señalar a los diferentes gobiernos que pasaron. Por eso el mito que Clarín pone presidentes, de Papel Prensa, es falso. Vayan a los archivos: en el ‘83 apoyaron a Ítalo Luder, y ganó Alfonsín; en el ‘89 apoyaron a Eduardo Angeloz y ganó Carlos Menem; en el ‘99 apoyaron a Eduardo Duhalde y ganó Fernando de la Rúa.

–¿Cómo nace la idea de tener un Canal You Tube?

–Al llegar a Córdoba, sigo estudiando la carrera de Periodismo. Gran error que cometí (risas). Cuando veo a un joven le digo: estudiá medicina, abogacía, ciencia política y luego dedicate al periodismo. Estudié periodismo porque aborrezco a la mayoría de los periodistas (risas). Al enemigo hay que conocerlo de cerca (carcajadas). Siempre tomo el humor en mis intervenciones, es una gran herramienta para pegarle al poder. “Porque un buen chiste puede pegar más que cualquier editorial”, decía Tato Bores. Abro en 2015 una página de Facebook: “Presto Humor”. Demostrando las contradicciones del kirchnerismo, empiezo a tener relevancia. Yo creía que había que hacer un parate con la realidad de la gente, porque en Córdoba es “La Docta”, y tenés múltiples realidades. Y empecé a hacer los videos. Siempre usaba el formato del humorista Quino. Del tiempo de la facultad me reía, las mentiras que enseñaban. La locura de llenar espacios, rápido todo. La información no pasa por una oficina. Está en la calle y las fuentes. En el 2015 si ganaba Daniel Scioli me iba del país. Juan Schiaretti fue un gran zurdo repulsivo en los setenta. Él es de la época de Agustín Tosco. Córdoba le puso el freno al kirchnerismo merced a José de la Sota que se le reía del relato, aunque fue un tránsfuga de primera línea, pero le doy la mano en eso. Fue un peronismo más conservador, mientras que Schiaretti, une toda la mierda setentista supuestamente revolucionaria.

–Soy un obsesivo por la edición. La idea de hacer el programa televisivo PNP de Raúl Portal, en realidad fue un formato de Gerardo Sofóvich. Habría que reconocerles eso algún día a Hugo y a Gerardo. El “ruso” lo inventó. No se los reconoce a los hermanos Sofóvich. Me gustaba ese formato. Soy perceptivo, hablo mucho con la gente. No voy a los supermercados, le compro a mi kiosquera de abajo; a Víctor, el de la verdulería de en frente, y a la panadería. Es una pelea interna que tengo con las grandes cadenas (risas). Cuando no tengo para comer porque me demoran la plata, la kiosquera me anota hasta 5 lucas. Yo tengo ese tipo de códigos. ¡Andá a Carrefour a decirle después te pago!... La chota, ¿qué vas a traer? vení “p’a cá” y dejame a tu hijo si querés llevarte la costilla (risas).

–¿Cómo fue la repercusión de sus editoriales en otros países? ¿Qué aporta su mirada a la realidad social desde el interior de la República?

El primero que hice fue con la música de “la marcha de la bronca” (de Pedro y Pablo), y luego contra esa infamia, que si gana Mauricio Macri, hacían llorar a los nenes. Estoy contra el adoctrinamiento político de los niños. Me parecía vergonzoso. En un principio eran largos y espantosos y luego dije vamos a tomarlo en serio. A presentarme bien vestido, cambié el vestuario, la edición, las respiraciones. Estudio mucho a las redes sociales. Tengo mis propias teorías del por qué un video gusta más y otros menos. El tocar temas de agenda mediática hace que tenga más éxito. Si lo vieron en la Provincia de Formosa 400 mil reproducciones, me sirve. Lo vio toda Formosa. Sumás You Tube, Facebook, otras páginas, WhatsApp. Es incontrolable. Hay videos que tienen 7 millones, es una locura. El video famoso sobre “Diego Maradona” (que primero, pasó sin pena ni gloria), pero luego Maradona fue a Venezuela y bailó con la bandera por las elecciones, y ese video explotó y me escribía gente de Miami, de China, venezolanos en Europa; un hijo de empresario de PDVSA me dijo: “hey pana, cuando pase todo esto, estarás invitado a Venezuela y comeremos y beberemos y nos vamos a reír de esta malaria, pana,”. Así cientos de mensajes, en la comunidad latina en Miami se pasa muchos los videos es impresionante. Me junté con Cristina Furri, la expareja de Adrián “Facha” Martel, me confesó: “mi hijo te conocía acá en Miami”. Me ha hecho una entrevista la periodista Mercedes Martí, etc. Un amiga mía en Ecuador me dijo: “Che Edu, ¿qué carajo hiciste, estaba en restaurante y empecé a escuchar una voz de pito y dije esa es la tuya y miro el celular y sos vos hablando de Maradona?

–No armé un personaje, soy yo. Ese fue un error. Me arrepiento. Tendría que haber creado un personaje. Y eso a veces me cuesta. Yo con el verdulero Víctor, hablo como lo hago en los videos: soy vehemente, grito, puteo, encima soy tano, entrerriano, grito con toda la jeta y me chupa un huevo (sic). Los que me insultan son cagones. Si alguien me habla bien, lo charlamos. La otra vuelta me pasó con un tipo de un delivery. Se me quedó mirando a ver si era yo, y esperé que pase y me gritó: ¡fascista! No hay nada más fascista, que gritarle a alguien por la calle ¡fascista! No hay acto más cobarde que insultarte y salir corriendo. No se animan a enfrentarte y dialogar. Yo camino la ciudad. Este reconocimiento que estoy teniendo no me altera mi forma de vivir. El periodismo es un trabajo social. No me cambió para nada a mí y a mis amigos. En la almohada estás vos y tu conciencia.

–Ud. es un crítico de la realidad política, social y cultural. ¿En qué plano se siente más cómodo y con llegada a la ciudadanía?

–Me siento más cómodo hablando de los temas sociales, más que políticos. Lo que hablamos de la agenda: una cosa es lo que se vive en CABA y otra en el interior. Hay que pensar a preocuparse mucho por eso. La mirada de la provincia es muy diferente. Por la falta de educación, de valores, ética. La gente tiene derecho a hacer lo que le parece con su vida. En lo económico soy desarrollista, políticamente un liberal desarrollista, un demócrata liberal.

–¿Qué país toma como referencia por su desarrollo, cultura e ideas?

–Yo quisiera vivir en la Argentina de los años ‘50 / ‘60. No estaba todavía destruida. Yo puedo criticarle muchas cosas al peronismo, hizo cosas bien otras mal. El peronismo fue un gobierno autoritario. El golpe del Gral. José Uriburo fue determinante, abrió las puertas a gobiernos fascistas. Frondizi no me convenció tanto (los contratos petroleros...mmmm), tengo más respeto por Frigerio (abuelo) que Frondizi. Soy más de la línea de Arturo Illia: me representa en valores, en ética, en cómo moverse en la vida. Su firmeza, su autodeterminación, sus ideales. ¿Por qué Illia y no otro? (se entusiasma y pega con su puño en el escritorio)... Porque todos los que vinieron después fueron cartones mal pintados de una democracia blanda. Illia estuvo más allá de todo. Respetó las instituciones. Estuvo adelantado 200 años. La solución de un país no es la Reserva del Banco Central, es la reserva de las neuronas de la gente. Si vos tenés chicos con grados de desnutrición, no vas a ser ninguna potencia. Punto, y se termina la discusión. Luego discutimos si querés a Antonio Gramsci, a Juan Domingo, al viejo pelotudo de Raúl Alfonsín.

–Discutamos lo que quieras (y redobla la apuesta con su puño golpeando en el escritorio). Acá tenemos desnutrición, la educación es mediocre, ¿nadie sabe dónde y cuándo nació el Gral. San Martín? Y un chico que no recibe amor por sus próceres, por su patria, no tiene amor. El pibe termina sus estudios y dice ¡me voy de aquí! Tengo una visión de país como decía el Gral. Perón: “dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”. Si algo sabía era armar frases. Como país me gusta Alemania, socialmente. Le hicieron sentir la culpa de la guerra. A pesar de todo, salieron adelante. El pueblo japonés, por el respeto que les tienen a los viejos, al mayor lo veneran. A los niños se los cuida. Son culturas que nos llevan miles de años. La debacle social completa empieza con la Guerra de Malvinas. Hasta los ‘80 podríamos armar un futuro.

–¿Pensó en sintetizar sus editoriales en un formato distinto, Ej.: documental, libro, video, etc.? (Así resguarda sus “memorias”).

–Soy... muy vago para escribir. A los guiones los armo con el programa Word, anoto las líneas básicas, las fechas y números, las leyes. Ahí entra el tema de la edición. Sí, tengo un gran archivo fílmico, político, de la historia de la televisión, desde VHS, hasta revistas, diarios, desde los ‘50. La revista Hortensia, tapas de Clarín. Tengo la colección completa de la revista Humor. Eso sí, porque escaneo las portadas de las revistas y me sirve.

– ¿Ud. expresó en una conferencia que prefiere el formato de internet por sobre el de la TV. de aire; que no lo seduce estar en programas de televisión tradicional; que así, tiene más llegada a la sociedad con sus envíos?

–La TV. se está muriendo. ¿Para qué voy a ir a ese lugar? Celia Sofóvich (la ex de Hugo Sofóvich), ve mis videos; la mujer de unos de los inventó parte de la TV. Argentina ve mis videos. Ayer estuve reunido con Felipe Noble Herrera, el dueño del Grupo Clarín, él ve mis videos. Un periodista de INFOBAE me dijo ¿cómo puede ser que no estás acá? A ver: si uno de los dueños de Clarín ve mis videos y me dice: “loco no sabés, te sigo, me encanta”. Si lo puedo hacer desde Córdoba, ¿por qué lo voy a hacer desde acá (CABA)? Dios está en todos lados, pero atiende en Bs. As. Sí, porque antes no había WhatsApp, ahora Dios tiene WhatsApp y no necesita moverse mucho (risas). Estoy viajando constantemente. Estoy bien en Córdoba. Me cerraría la óptica como a la mayoría de los periodistas. Me levanto temprano y acuesto tarde. Cada momento que pasa, es un minuto más que le están destruyendo la cabeza a un pibe. Por eso me vuelvo loco. Dirijo un medio de comunicación, soy jefe de Redacción. En el Grupo Clarín, hay 10 editores. Eso lo hago yo, con las notas de mi portal. Hoy la gente ya no lee. Las noticias tienen que ser cortas. Es así.

–Le propongo una conducta de marketing estratégico: asociarse a otros profesionales de la comunicación social para lograr mayor fuerza discursiva, Ej.: Emmanuel Danann, Agustín Laje, Nicolás Márquez, Nahuel Sotelo, etc.

–A ver, a Laje y a Danann, les tengo mucho respeto. Ellos son más intelectuales, y yo, soy más barro. Cada uno desde su trinchera debe pelearla como puede. La metáfora de uno con el FAL y otro con un cuchillo entre los dientes. Destaco siempre el tema de la trinchera: para mí esto es una guerra. No de balas, sino intelectual. Mantengo contacto con todos. No nos podemos juntar por el tema de los tiempos personales. Cada uno desde su nicho está bien. Ahora, si a Laje no le dejan presentar su libro (en La Feria del Libro), yo voy expresar mi solidaridad y apoyo. Si me tengo que bancar que Verbitsky (Horacio) presenta el suyo, qué lo presente. Acá hay libertad para todos, o no hay para nadie.

–Los llamados posmodernos (posestructuralistas) invaden, infectan y falsifican la cultura. Imagino que aportan material jugoso para sus explosivos editoriales. ¿De todas las aberraciones conceptuales, cuál es el tema que más le preocupa?

–Me preocupa como deforman la Historia Argentina. Uno de los encargados de hacerlo es el hijo de pu... de Felipe Pigna. Durante el kirchnerismo hizo mucho daño. Con el Canal Pakapaka han hecho mucho daño. Destruir la figura de Sarmiento, de Rosas, de Urquiza, ponerlo a San Martín con Perón, con Néstor Kirchner. Es una vergüenza. ¡Vergonzoso!

– Incluso, los ideólogos de Carta Abierta, querían declarar una segunda Independencia. ¡Juro que no es broma!

–Bueno, estamos hablando del mismo tipo que le dijo metrosexual a Manuel Belgrano. Se basa en una carta de Bernardo O’Higgins para decir que Belgrano tenía voz de pito, voz aflautada. Vos sabés a dónde va... ¿y qué querés decir?...Metrosexual, aflautado... ¿Qué Belgrano era homosexual? Decilo de una vez y listo. El tipo quiere pinchar y decir que tuvimos un prócer homosexual. Como sabés por que usaba calzas (la vestimenta de época) y tenía voz aflautada, está apuntando en cada puta nota –Felipe Pigna– sobre la sexualidad de Belgrano. En cada puta nota, defenestra a Domingo F. Sarmiento. Pero no te cuenta todo lo que Sarmiento hizo y cómo murió en Paraguay pobre en la casa de su hija Faustina. Mi gran problema es ese, con la Historia Argentina falsificada. El no revisionismo científico. Es poco serio. Cada vez que hablo de un tema político le pongo algo de historia. Esto lo trabajan los grupos políticos y económicos fuertes. Juzgan a los próceres con la visión actual. No ven el contexto. Si yo voy a criticar a Sarmiento por una frase que dijo allá lejos (Ej.: sobre la esclavitud), ¡Ah bueno...! Explicale a la gente eso. Caso contrario, queda Sarmiento como mala persona. La mala información junto a la ignorancia, es una bomba de tiempo. El daño ya está hecho.

–Una observación: desde nuestra perspectiva, el manejo político que hace la izquierda con sus intelectuales orgánicos (¿?), es más peligroso que las pseudociencias o supersticiones populares. EJ: Paul Feyerabend (alumno aventajado de Michel Foucault) sostenía el “Todo vale”, que legitima su anarquismo para entender la realidad. ¿Macaneo como control social?

–Va más allá de los países y de la verdad. Apunta a una dominación mundial. La falta de valores, ética, de arraigo a un lugar. El no tener sentimiento de patria. La mentira del mundo, es mi hogar. Cuando sabemos que no es así: cruzás la frontera y los bolivianos te pegan en el culo. Los medios de comunicación repitiendo noticias basuras dominan los hilos de arriba. La sociedad más agresiva y encerrada en su casa. En los ‘70 lo quisieron hacer con las armas, y acá les salió mal. ¿Por qué cada vez a tu chico tenés que dejarlo en una sala de edad más pequeña? ¿Por qué no se puede quedar tu hijo con vos hasta los 6 años? El desarraigo, sacártelo de encima. Desde el ‘83 en adelante, con Raúl Alfonsín, dio la mano derecha para la apertura de este pensamiento. La gente creía en él como un salvador, el demócrata. Alfonsín le prestó plata a Cuba (vayan a ver si la devolvieron). La Coordinadora de Alfonsín, fue peor que La Cámpora. Antes, la información y los medios, eran casi todos públicos. ¿No se acuerdan? Yo, sí. Si lo destacable es que no robó, es un líder de poco prestigio.

–¿Cómo salimos de esta mishiadura antisistema, donde los hechos científicos son reemplazados por la mitología del relativismo y el pensamiento mágico? Las minorías marginales construyen una Historia desde la posverdad (Ej.: caso “Maldonado”; esconden los muertos del terrorismo de los ‘70; no aceptan el revisionismo y desprecian al a ciencia).

–Primero necesitamos gobiernos fuertes, con testículos. Líderes fuertes, con un mínimo de amor por su país. Y la parte de la sociedad que no quiera ser cooptada, que no se quede callada. EJ: si escuchás a un pelotudo que dice: ¡A Maldonado lo mató a Gendarmería! Que la gente se dé vuelta y diga: ¡cállate, porque no es así! Vengo de viaje, cansado de trabajar y no quiero escuchar tu mierda. Hacé política en tu unidad básica. Acá en el tren estamos todos: está el de derecha, el de centro, el de izquierda y el que no le gusta la política, ¡así, que no rompás las pelotas! Mientras nos quedamos callados va a pasar lo mismo. Con miedo no se sale. No te quejes luego si fuiste responsable de no hablar, y de agachar la cabeza por estos parásitos sociales. No les voy a agachar la cabeza nunca. Ej.: nunca lo llamaron ni en privado a dos personas, a Felipe Herrera de Noble y hermana, para pedirle perdón por el escarnio público de Estela de Carlotto. ¿Por qué iban a pedir disculpas por Maldonado, un flaco que encima que estaba defendiendo intereses foráneos (con sedes en Inglaterra) si le salió bien? El hermano cobra un subsidio. Jones Wallace está en Chile y lo están haciendo declarar. Acá, el disparo de un chorro es justicia y el de un policía es represión. Cuando un chorro mata, es un desclasado, un pobre pibe que lo afectó la sociedad, pero cuando un policía dispara para salvar a una persona, eso es represión policial y están los putos de Garganta Poderosa (revista marginal populista de estética villera), esos son unos hijos de pu... (poniendo rictus de amargura).

–¿En qué está trabajando ahora y cómo ve su futuro?

–Estoy trabajando en videos, que hablan de la decadencia en las fuerzas policiales, de algunos temas provinciales y preparando el nuevo formato de Data (http://www.data24.com.ar/), con más tecnología y más cosas en el sitio de noticias. Más innovador y que ande mejor en los celulares.

Videos: editoriales de El Presto

El Presto: un editorialista sui géneris que seduce a multitudes. Algunos de sus videos tienen más de 7 millones de reproducciones. Solidez narrativa, frontal e irreverente, que asocia voluntades. Un influencer de ley.

Fotografías: gentileza Eduardo Prestofelippo

Gustavo Contarelli