Ciertamente, el Gobierno nunca creyó que, si podía organizar el Superclásico con visitantes, la final de la Copa Libertadores entre River y Boca iba a suspenderse días antes del inicio del G20.
Por tal motivo, el partido siguió incluido dentro de la guía que les entregan a los participantes del evento, un verdadero papelón si se toma en cuenta la magnitud que generó la noticia a nivel mundial.
“El denominado Superclásico entre Boca y River, los equipos más populares del país, es un espectáculo deportivo de relevancia global“, indica el documento oficial que habla sobre el mayor espectáculo deportivo que puede verse en nuestro país y destaca la relevancia que le dan algunos medios internacionales:.
“Según el periódico británico The Observer, el partido ocupa el primer lugar entre 50 eventos que cualquier fanático del deporte debe ver antes de morir, mientras que la revista británica Four Four Two llegó a catalogarlo como el derby más grande del planeta“, insiste.
Aquí entonces llega la parte que nunca llegó a ser eliminada de la guía y la cual nunca creyeron que iba a terminar en escándalo. Incluso explican por qué no incluyeron el resultado, aunque obviamente esperaban que el encuentro estuviera definido una vez iniciada la cumbre.
“Este año, por primera vez en la historia, River y Boca disputaron la final de la Copa Libertadores, el torneo de clubes más importante a nivel continental. El resultado, no llegamos a incluirlo por tiempos de impresión“, explica la impresión que recibieron los participantes del G20.
Finalmente la final de vuelta se disputará en el estadio Santiago Bernabéu, la cancha donde juega Real Madrid, el día 9 de diciembre a las 16:30 horas de nuestro país. La decisión la tomó Conmebol, que se negó a que el partido se dispute en la Argentina por cuestiones de seguridad luego de que el micro de Boca fuera apedreado en las inmediaciones del Monumental.