Este miércoles, Leonardo Fariña negó que su declaración en la causa por la "ruta del dinero K" haya sido armada y adjudicó esta versión a una intención de favorecer al detenido Lázaro Báez.
En el mismo sentido, aseguró que se reunió con el ministro de Justicia de la Nación, Germán Garavano, el 28 de junio de 2016, para quejarse por situaciones que se daban con el Programa de Testigos e Imputados protegidos, en el que está incluido, y no para hablar de sus declaraciones en el caso.
"La reunión con Garavano se dio solamente en el marco de la competencia de quien es la máxima autoridad de un ministerio que tiene a su cargo el programa de protección de testigos", aseguró Fariña al declarar ante el Tribunal Oral Federal 4 que lo juzga por supuesto lavado de dinero junto al detenido Lázaro Báez y sus cuatro hijos, entre otros.
El “arrepentido” sostuvo que el encuentro con Garavano fue en el Ministerio de Justicia de la Nación, y que el contacto se lo hizo un periodista.
"Miren como se da la posibilidad de que a mí me guionaran, que la reunión se la tuve que pedir por favor a un periodista", dijo.
Fariña sí dijo que sus ex abogados, Giselle Robles y Franco Bindi, presentaron una declaración sin consultarle, y que por eso los separó de su defensa.
El imputado colaborador de la causa por la ruta del dinero K salió al cruce de información que comenzó a difundirse a raíz de la investigación que se realiza en el juzgado federal de Dolores por presunto espionaje ilegal en causas judiciales.
En esa pesquisa, a cargo del juez federal Alejo Ramos Padilla, la ex abogada Robles aludió a un presunto armado de las declaraciones de Fariña en la "ruta del dinero K".
Al término de la audiencia, el abogado de Lázaro Báez, Victor Hortel, pidió que se cite a la abogada como testigo.
"Todas son acciones tendientes a defender a Lázaro Báez", sostuvo Fariña.
El arrepentido respondió preguntas del fiscal de juicio Abel Córdoba y de las querellas, pero se negó a contestar a las defensas de los demás acusados.
Ante el Tribunal aludió a una "banda" que tiene "una estrategia de defensa".
Hay guiones y guiones... una cosa es adornar la verdad, que es muy facil, y otra cosa es sanata incomprobable. Lo de Fariño, SUPONGO, que en buena parte se puede confirmar con evidencia fisica.
Sí y a Maldonado lo chupó gendarmería y Vidal llevó en helicóptero a sus hijas al loolapalooza, y ganó Scioli por amplio margen!!! Jajaja que berretas son los bananeros K
Son varias las evidencias que contradicen el relato de Fariña, entre otras que el arrepentido declaró varias veces antes de esas fechas y nunca habló de la obra pública, lo que demuestra que no sabía nada del tema y que pactó con la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) que lo entrenaran para involucrar a Cristina Fernández de Kirchner hablando de la obra pública. Respecto de la cita con Garavano, la versión de Fariña y del ministro parece insostenible: el titular de un ministerio no recibe a un preso que se queja porque quiere mejoras en el departamento que le dieron en el programa de protección de testigos.Su versión aparece como poco creíble por muchos puntos:Antes de las declaraciones guionadas, Fariña habló en la causa del lavado de dinero varias veces sin nombrar nunca la cuestión de la obra pública en Santa Cruz, tema sobre el que no tenía la menor idea. O sea que esa cuestión surge claramente de un pacto con la Casa Rosada y la AFI porque necesitaban involucrar a CFK en la causa de las rutas de Santa Cruz. Fariña repitió el libreto no sólo en su declaración como arrepentido sino también en apariciones públicas en la televisión. Recitó en forma calcada lo que le habían dictado, es decir que no puede argumentar que no leyó lo que firmó. El primer mail, supuestamente desde la AFI, lo enviaron a fines de marzo de 2016 y el rastro de ese texto ya apareció en la declaración del 8 de abril de 2016. Ahí ya estaba guionado. El juez Ramos Padilla tiene los originales de los correos electrónicos. Se supone que puede establecer fehacientemente el origen y la fecha de cada mail. después de sus declaraciones le dieron una vivienda de 1.500 dólares mensuales, más de 60.000 pesos de hoy. No es creíble que un ministro reciba a un preso porque éste se queja de su lugar de alojamiento o porque reclama más libertad de movimientos, cosa que logró tras su declaración de agosto de 2016. Eso le permitió volver a su vida nocturna de antaño.
Mas armada que pelea de payasos.