La última vez que el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, pudo obtener una recaudación fiscal positiva en términos reales fue en junio del 2018, cuando subió 1,4%. Luego de ello, el desplome de la economía generó la debacle de los ingresos del fisco.
Los datos son oficiales. Corresponden a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). Los funcionarios del organismo admiten que se trata del perverso juego de la actividad económica lo que generó el desplome de los recursos tributarios en el último año.
No se salva casi nada. Todos los impuestos vinculados la actividad interna cayeron en términos reales. Tan solo el comercio exterior tuvo en los últimos 12 meses un comportamiento positivo en términos reales, es decir, sin tomar en cuenta el efecto de la inflación.
Y eso no es porque haya crecido demasiado la exportación, sino más bien por la aplicación de retenciones adicionales extendidas a todos los sectores de la economía. Esas nuevas retenciones explican casi la mitad de la recaudación de ese único rubro. De 30.000 millones de pesos al mes, 15.000 son por los nuevos impuestos. Las retenciones a los servicios aportaron en junio unos 1.357 millones de pesos.
La debilidad de la recaudación fiscal es tema de preocupación del Fondo Monetario Internacional (FMI). Se supone que el paquetazo que aprobó el año pasado el gobierno para poder ampliar el crédito stand by de u$s50.000 a u$s57.000 millones, tendría que haber dado resultados.
En lo que va del 2019 la recaudación total en términos reales baja 5,8%, de ello lo que es puramente impuestos cae 6,5%. El IVA se desploma 10,8%, Ganancias 0,6% y Seguridad Social, 15,1%. Tan solo los impuestos al comercio exterior (retenciones y aranceles) sube 48,1%.
Se estima que para haber conseguido una recaudación fiscal en línea con la inflación anual de junio el gobierno hubiera requerido ingresos adicionales por $2.670 millones de pesos. Hay que tener en cuenta que la recaudación fiscal de junio del 2018 fue de $298.853,8 millones. Un punto porcentual $2.988,5 millones. Si se toman en cuenta las estimaciones del IPC del Centro de Estudios Orlando Ferreres, los precios subieron en ese período el 53%, contra el 52,!% que crecieron los ingresos, faltaron 0,9 puntos. Carlos Lamiral
Cuando hay recesión cae la recaudación impositiva.