Como si no hicieran falta antagonismos en el país, ahora renegociar la deuda con los acreedores ha generado dos bandos, los que quieren hacerlo “cuanto antes” y los que hablaban de tomarse “un tiempo”.

El pasado jueves, el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, afirmó que hay reservas oficiales para pagar deuda “por los próximos cinco o seis meses”, lo cual otorga “tiempo más que suficiente” a Alberto Fernández para renegociar los compromisos con el Fondo Monetario Internacional y los acreedores privados.

El presidente Mauricio Macri deja el Gobierno “con reservas más que suficientes para tener un espacio de negociación suficientemente alto”, dijo Lacunza en declaraciones con “La Rosca” que se emite por el canal Todo Noticias.

Entre los que hablan de cierta premura por arreglar se encuentra Rodolfo Santángelo quien apuntó que “la reestructuracion de la deuda va a ser en lo económico la prioridad número uno: se ponen la banda presidencial y el 11 de diciembre hay que mandar alguien a Nueva York”.

El socio de Carlos Melconían consideró que “es un tema delicado porque las solucionas fáciles que se pregonaban hace un par de meses no van a estar disponibles, va a haber que encontrar un equilibrio muy angosto que es entre llegar a un acuerdo de algo que sea pagable por Argentina pero que al mismo tiempo sea aceptable por los tenedores, sobre todo por los tenedores de bonos internacionales.”

Para Santángelo, la negociación debe ser “amistosa en el sentido de que no haya un default unilateral pero va a ser agresiva en el sentido de que Argentina va a necesitar un alivio. Estoy convencido que Argentina se ha excedido de endeudamiento (pero) hay una co-irresponsabilidad de los inversores de haber facilitado ese financiamiento”.

En esta misma línea, Miguel Ángel Broda consideró que “Argentina tiene que reestructurar la deuda urgentemente con quita, sino hay quitas, en un año estamos de nuevo de esto y tenemos que salir del lugar de país inconfiable”.

Broda, en declaraciones al programa “Salvemos Kamchatka” por FM La Patriada, destacó que “todas las reestructuraciones (de deuda) necesitan una reforma fiscal y cualquier ajuste del próximo gobierno va a ser a través de nuevos impuestos y tasas porque no tenemos muchas reservas para seguir pagando”.

En esa línea, también se enrola el economista Gabriel Zelpo quien aseguró que “el principal desafío es resolver la crisis de la deuda; si el nuevo gobierno no hace nada para resolverlo pronto, en marzo el Banco Central se quedaría sin reservas”.

En la vereda de enfrente, se ubicó el economista Javier Alvaredo discrepó con sus colegas que hablan de “una urgencia” y recordó que “desde las PASO, han visitado el país un gran número de fondos de inversión y han tenido reuniones con los economistas más cercanos al presidente electo, lo que puede dar algún tipo de idea respecto al modo más factible de encarar el tema”

“Francamente discrepo con algunos colegas que plantean una urgencia. No está mal que se tomen un tiempo como para ir al Fondo con una idea más clara de lo que se pretende hacer”, explicó Alvaredo en declaraciones al programa “Es por acá” que se transmite por Radio Milenium.

Consideró “un error” del gobierno de Macri en la negociación con el Fondo, “es que fue medio en bolas. El último programa vigente pareciera hecho por los técnicos del Fondo Monetario, sin incorporar algunas particularidades que caractericen al funcionamiento de la economía argentina”.

También el propio Lacunza había dicho a finales de octubre, que “no hay que ir corriendo a renegociar la deuda en dos meses, pero tampoco hay tiempo que perder” y que Argentina tiene “un problema de liquidez, pero no de solvencia” para enfrentar ese pago.

El economista Daniel Artana incorporó otra mirada al advertir que si se profundiza la caída de los precios de los títulos de argentina, podría generar el ingreso de los “fondos buitres” y complicar la restructuración de la deuda.

“La caída del precio de los bonos se debe a que primero (A Fernández) hablaba de una reestructuración ‘a la Uruguaya’, amistosa. Pero luego lo dejaste de hablar, tuviste cortocircuitos con los Estados Unidos, que es quien te tiene que refinanciar, y además no se ve consistencia entre lo que se dice como programa monetario y fiscal”, explicó Artana en declaraciones al programa “Cada Mañana” por Radio Mitre.

Ante ese panorama, el economista advirtió que “si caen mucho los bonos, se te pueden meter los fondos buitre” que compran esos títulos a bajo precio “y complicar más la reestructuración de la deuda” porque querrán más dinero que los tenedores habituales.

Estos fondos “no tienen problema de no acordar e ir a juicio, y nosotros sabemos cuál es el resultado de esos juicios en Nueva York,… terminamos pagando. Cuanto antes tengamos un programa monetario y fiscal, y cuanto antes tengamos renegociada la deuda, mejor será”, dijo Artana. Fabián Quintá