Pablo Moyano: “Que Larreta no le toque un peso al gremio de los Camiones porque va a haber una reacción”. Otra vez “no le toque un peso al gremio de los Camiones porque va a haber una reacción”, una vez más: “no le toque un peso al gremio de los Camiones”.
El hijo primogénito de Hugo Moyano, aquel que sabe acompañarlo en cada uno de sus negocios, lo dejó en claro: no quiere que le toquen un peso al sindicato. El secretario adjunto de Camioneros lo mencionó en el marco de la reducción de horario laborable para los recolectores de basura.
Pero, no le importa el trabajador, le importa el gremio y la plata que de allí se puede llevar directo para su casa, de la misma manera que hace con el club de Independiente, el cual vicepreside.
El oportunismo es el slogan de los Moyano, los afiliados sus soldados, o peor, el escudo. Son las personas que ponen por delante ante cualquier discusión política ¿O acaso no fue el propio Hugo quien, ante la imposición de una multa, dijo que iba a llevar a los enfermos del gremio ante el Ministerio de Trabajo mientras este era dirigido por Jorge Triaca?
Es demasiado obvio, ya no puede el clan Moyano ocultar que “las batallas” son personales y no en pos de mejorar las condiciones de trabajo de los camioneros. ¿O acaso se pronunciaron Hugo o Pablo cuando un camionero cordobés fue detenido en Salta confundiendo un accidente cerebrovascular con una borrachera y luego falleciendo por negligencia de la policía?
¿O hicieron alguna mención cuando un chofer, de nombre Martín Samia, sufrió un preinfarto en el límite entre Mendoza y San Luis y le negaron asistencia en sendas provincias?
No, nadie de Camioneros salió a respaldarlo, y los Moyano, obviamente, no fueron la excepción.
“Yo tengo trabajo para poner más gente, pero qué querés, ¿que ponga más gente para tener más problemas? Esta gente en vez de fomentar el trabajo lo ahuyenta” le dijo un empresario del rubro del transporte a quien escribe estas líneas hace un tiempo, en referencia a los Moyano.
Pero es la lógica que maneja esta mafia sindical ¿O no taparon la salida de los camiones de los depósitos que tiene contratado Mercado Libre sólo para adquirir a un grupo de trabajadores que se encuentran afiliados al gremio de Carga y Descarga?
Con esa lógica, es obvio que los empresarios no van a querer invertir en el país, por algo Marcos Galperin, CEO de la firma de venta online se despegó de la sede argentina de la empresa y dejó a cargo a un cercano suyo.
Mercado libre, en regla con el fisco y dando trabajo a unas 6 mil personas, sólo de forma directa, es vilipendiado por el sindicalismo vernáculo al mando de Moyano y por el oficialismo.
Esto último no sorprende, ya que el líder camionero fue dignificado por el presidente Alberto Fernández.
Pero no se trata sólo de gremialistas poderosos y nefastos, se trata de personas vinculadas al narcotráfico, que han sabido defraudar al Estado y al socio del Club Independiente, es gente que ha utilizado los métodos de extorsión más asquerosos que existen.
De hecho, hay quienes mencionan que la barra de Independiente, con Pablo Alejandro “Bebote” Álvarez a la cabeza, que no se manejaba sin orden de los Moyano, llegó a presionar a jugadores y socios con que algo le podía pasar a sus hijos. Es lo más repugnante que cualquier persona puede hacer, también lo más bajo que cualquiera puede caer.
Pero, al margen de ello, los Moyano jamás estuvieron –ni estarán- con el trabajador, todo lo contrario, cualquier disputa es meramente para conseguir beneficios propios. Son la lacra de este mundo y una de las más importantes mafias del país.
La realidad cambiará cuando estos personajes sucumban ante la justicia y terminen presos por la interminable lista de delitos cometidos. Cuando la delincuencia deje de ser avalada por el poder político.
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