Luego de que trascendió que la firma Andreani cobrará un monto de 437 millones de pesos por distribuir la vacuna Sputnik V en el país —muy superior al que había ofrecido el Correo Argentino por el mismo trabajo—, en las últimas horas la misma empresa ofreció formalmente la donación completa de la distribución de 30 millones de dosis correspondiente a la partida de AstraZeneca.
El dato es que el Estado Nacional finalmente aceptó la donación a través de la resolución Número 2020-2710-APN-MS.
Hay que recordar que Andreani aseguró desde un principio que haría la distribución de la vacuna rusa de manera “no onerosa”. Es decir gratuita.
Ahora, para justificar que finalmente cobrará por el servicio, la empresa asegura que ese beneficio solo se había prometido para la primera entrega de vacunas. No la segunda.
Por otro lado, para explicar la enorme diferencia de precio entre Andreani y el Correo Argentino, el gobierno aseguró que los valores cotizados por la firma “tienen relación con servicios de altos estándares de seguridad y calidad que brinda la compañía desde hace más de 4 décadas a todos sus clientes de la industria farmacéutica. Eso supone, entre otras cosas, equipos profesionales altamente capacitados, normas certificadas (ISO 9001-2015, ISO 14001:2015), habilitaciones de autoridades competentes a nivel nacional y provincial, sistemas tecnológicos puestos al servicio de trazabilidad y rastreabilidad e infraestructura de 5 plantas que funcionan como extensiones farmacéuticas de los laboratorios”.
Puro palabrerío para tapar el escándalo que ya no puede taparse.