Grafeno o no grafeno, los datos confirman que las variantes delta y omicron fueron consecuencia de las campañas de vacunación. Todavía nadie nota ni mucho menos denuncia que decir que la vacuna "inmuniza" o decir que la tercera dosis es un "refuerzos" de inmunidad es pura desinformación. Paso el limk con el estudio que muestra que el contagio de omicron entre los que tienen la tercera dosis es mayor que entre los que solo tienen dos dosis, y duplica las cifras de contagio de los no vacunados. Solo se necesita ver los datos. https://www.youtube.com/watch?v=D0gWB9M8538&t=1226s

"La reacción de los gobiernos es mucho peor que el virus." https://www.youtube.com/watch?v=PsWR7YHXKlM

¡Otro fraude! Siempre tienen un nuevo fraude bajo la manga. Pero queda claro que todos los casos que se dijeron había desde 2020 hasta ahora nunca fueron casos. El PCR no detecta SARS-CoV-2 (que tampoco hay prueba científica que exista). Mientras tanto China y Rusia intentan dividir al mundo en dos. Solo los gobiernos liberales pueden terminar con esta fraudemia. Basta de socialismo y totalitarismo. El futuro es liberal. La vacunación debe ser voluntaria, libre elección ciudadana y el estado proveer vacunas aprobadas porque para eso el contribuyente paga impuestos. Políticos casta inmunda. ¡Basta de dictadura sanitaria!

"que esta sustancia entraba a las células del organismo y que a partir de allí se emitía una señal de Bluetooth" No puedo creer que haya gente que crea en este delirio... aunque si hay quienes creen que la Tierra es plana, todas estupidez es posible

Javier Balmas, hay que tener cuidado con la búsquedas de simetrías. Que haya algunos delirantes no justifica las equivocaciones masivas en campañas que llevan a la muerte a miles de personas. Hay unas pocas decenas que pueden creer lo del BT o el 5G, pero hay millones que toman decisiones equivocadas porque quieren creer que una vacuna protege o inmuniza o refuerza. Toda vacuna ataca al organismo, la gracia es que ese ataque sea leve y que los efectos indirectos y colaterales no sean peores que la enfermedad. En este caso son peores, porque un plan agresivo de vacunación en medio de un brote asegura una respuesta insuficiente a nivel comunitario y favorece mutaciones y más contagios. No se puede comparar un delirio con otro porque el primero no hace ningún daño mientras que con planes de salud equivocados y por la fuerza el daño es catastrófico.