La frase que surge espontánea frente a la información es "chocolate por la noticia". Es que, según cuenta agencia DyN en el día de la fecha, el ministro de la Corte Suprema, Eugenio Raúl Zaffaroni señaló que "no hay distribución de tóxicos sin connivencia oficial", aseguró que "lo que nos interesa es agarrar a los que trafican" y pidió reorientar "los cañones del poder punitivo sobre los traficantes".
    También criticó las políticas estatales en materia de prevención: "son publicidades que muchas veces ocultan parte del problema", ya que la sospecha que surge "es si eso no tendrá algo de nuevo".
    Zaffaroni fue entrevistado por estudiantes de colegios secundarios de Moreno, La Plata y Avellaneda en el marco del cierre del programa "Manejá lo que Tomás"’, destinado a proporcionar herramientas para la acción preventiva sobre el consumo abusivo de alcohol en jóvenes.
    El magistrado habló de una eventual despenalización del consumo de tóxicos y diferenció "advertencia" de "prohibición".
Al respecto, explicó que "la tenencia para propio consumo es una cuestión moral; es un agredirse a sí mismo y está fuera del poder del Estado".
    Zaffaroni alertó a los jóvenes sobre los efectos nocivos del paco: "Hoy circula un tóxico barato que es el paco, que no tiene parangón con los otros tóxicos. Estamos hablando de una porquería que reciclan de la producción de cocaína, una basura cuyo uso produce a cortísimo plazo lesión neurológica y lesión pulmonar".
    El juez aconsejó: "tengan cuidado con eso; es un tóxico mortal y los efectos que causan son irreversibles. Paren. Ni siquiera lo consuman. Engancha y produce un deterioro neurológico y pulmonar que es irreversible", advirtió. Para Zaffaroni, "el problema frente a promesas falsas de bienestar y estado placentero es que el tóxico de eso no tiene nada. El que se intoxica goza menos. Eso muchas veces no se dice", agregó.
    La actividad fue organizada por la asociación civil "Las otras Voces", coordinada por la ex diputada nacional Irma Parentella y se llevó a cabo en el Galpón de la Reforma del Ministerio de Educación de la Nación.
    No sólo uno sabe que las palabras son certeras y reales, sino que imagina quiénes son los funcionarios que tienen connivencia con el narcotráfico. No casualmente uno de ellos ha querellado a este medio por señalar esa realidad.

Ana Grillo
Fuente DyN