El Gobierno nacional rechazó hoy las
denuncias surgidas desde la oposición sobre el posible fraude en las últimas
elecciones presidenciales, y pidió "responsabilidad" para "tratar una reforma
integral" del sistema político.
El viernes pasado, la Coalición Cívica, el radicalismo, el
socialismo, PRO, MIJD, Partido Nuevo de Córdoba y el Movimiento Socialista de
los Trabajadores (MST) presentaron un proyecto de reforma política para
implementar el método de votación de boleta única.
En las elecciones de 2007, la oposición realizó denuncias
de robo de boletas en varios distritos, en especial en el conurbano bonaerense.
A raíz de estas advertencias, el gobierno salió hoy a
cuestionar tales acusaciones.
El ministro del Interior, Florencio Randazzo, pidió a la
oposición "responsabilidad para tratar una reforma integral del sistema político
argentino" y calificó de "disparate las acusaciones sobre posibles fraudes".
En declaraciones radiales, Randazzo dijo que "cuando se habla
de institucionalidad lo primero que se debe hacer es respetar la voluntad
popular y en eso el pueblo fue contundente", y agregó que "hay que recordar que
este sistema ha permitido que (Raúl) Alfonsín sea presidente, (Carlos) Menem,
(Fernando) De la Rúa, Cristina Fernández".
"Me alarma tener una oposición con tanta liviandad. Se acusa
al Ministerio del Interior por responsabilidades que no tiene. El control,
capacitación y control del resultado es responsabilidad de la Justicia Electoral
y en ese sentido siempre fue un ejemplo de transparencia", afirmó el
funcionario.
Asimismo, el ministro de Justicia, Aníbal Fernández, aseguró
que es "impracticable" el proyecto de la oposición para establecer una boleta
única en las próximas elecciones legislativas.
"Inventan la boleta 'colcha', que tapa la 'sábana'", ironizó
el ministro, quien opinó que "es una mentira atroz la que han hecho con el robo
de boletas" y el "voto cadena".
En declaraciones a radio Millenium, sostuvo que la
propuesta de presentar una boleta con todas las listas "es impracticable" por
las dimensiones que debería tener la papeleta, "un poco más grande que una
bandera de ceremonias".
Para Fernández, la iniciativa se basa en que "no pueden
fiscalizar y quieren que en el medio de una boleta se mezcle el peronismo, al
que no le pueden ganar una elección de ninguna manera".
"Que me digan cuáles son los argumentos de peso que quieren
hacer a siete meses de la elección. Dan como verdades reveladas algo que nadie
puede demostrar que así sea. ¿Cuántas veces se puede entrar a robar boletas a un
cuarto oscuro? Una", indicó.
En tanto el titular del PJ bonaerense, Alberto Balestrini,
consideró que la denuncia de la oposición "es una chicana descalificable en todo
sentido, máxime cuando está alentada por los mismos que fueron electos mediante
el sistema tradicional en el 2007, algunos de los cuáles integraban la lista del
Frente para la Victoria-Partido Justicialista".
"Invito a todos los que quieren sembrar dudas en el Pueblo,
que ha dado claras muestras de civismo desde la reinstauración de la Democracia
en 1983, a que demuestren con hechos concretos lo que hoy pretende mostrarse
como un avance en el sistema electoral, para luego seguramente transformarlo en
denuncia", desafió Balestrini en un comunicado.
En esa misma línea, el jefe de Gabinete, Sergio Massa,
sostuvo que los que tienen la "responsabilidad de gestión, por ahora no deben
tener en la cabeza la cuestión electoral", ya que hay que "trabajar en la agenda
de la gente".
"Nuestra prioridad es mantener el empleo, el mercado y las
empresas. Lo demás es sanata, porque a la gente saber si Juan, Pedro o José van
a ser candidatos, no le sirve para nada", expresó.
Massa, en diálogo con FM Blue, apuntó que "para las
elecciones de octubre falta mucho", por lo que dijo que "lo primero que tenemos
que hacer es trabajar en la agenda de la gente".
Por último, recordó que el gobierno de Cristina Fernández de
Kirchner tiene "la responsabilidad de gestionar".
Walter Schmidt