Mientras diversas organizaciones de
defensa al consumidor y ciudadanos de todo tipo de lugares geográficos se unen
para protestar contra el abusivo aumento en las tarifas de luz y gas, un grupo
de asociaciones de dudosa credibilidad salieron a respaldar la medida del
gobierno kirchnerista por
supuestamente entender que "se trata de un régimen más justo, equilibrado y redistributivo que
favorece a los sectores más vulnerables".
Así lo manifestaron la Asociación de
Defensa de Consumidores y Usuarios (ADECUA), Consumidores Argentinos,
Proconsumer, Procurar y Cruzada Cívica, que remarcaron que "el nuevo régimen de
tarifas de luz y gas propone un escenario solidario, equitativo y redistributivo
que privilegia a los sectores sociales más vulnerables".
"Las asociaciones hemos siempre encabezado los reclamos por
una tarifa social y un nuevo régimen tarifario más justo, equilibrado y
redistributivo", indicaron las defensoras de consumidores.
No está de más saber quiénes están detrás de esas corrompidas
asociaciones. Por caso, Adecua está presidida por Sandra González, una
mediática mujer que oportunamente se "vendió" a los laboratorios farmacéuticos
por "cinco millones de razones" a cambio de no apoyar la aplicación de la ley de
medicamentos genéricos, una medida que terminó por beneficiar a millones de
personas por la disminución de los costos de los remedios.
Adecua fue en ese momento la única organización que estuvo en
contra de la ley. Todas las otras organizaciones de defensa al consumidor
estuvieron a favor de la ley y la mayoría de ellas denunciaron que habían
querido ser cooptadas a cambio de dinero por parte de laboratorios medicinales.
No está mal que haya personas que apoyen el discurso
oficial, el problema es cuando lo hacen asociaciones que supuestamente apoyan a
los consumidores. Peor aún, es terrible cuando esto se hace a cambio de dinero.
Ana Grillo