Finalmente, el Gobierno decidió dar marcha
atrás con los tarifazos a la electricidad y el gas. Sólo en las últimas,
la Defensoría del Pueblo había asegurado estar recibiendo más de 100 quejas
diarias por parte de los usuarios de ambos servicios, los cuales se encontraron
en las últimas facturas con aumentos que oscilan entre 300 y 700%. Además,
catalogó de "arbitrarias e ilegales" las subas implementadas por el Gobierno, al
tiempo que subrayó que "las excepciones otorgadas durante el período
preelectoral no resultaron efectivas".
El organismo informó sobre la recepción de las quejas en un
duro comunicado, en el que señaló que "desprolijidad, improvisación y falta de
criterio aparecen aunados en el tratamiento de los usuarios de los servicios de
gas y electricidad".
"El actual escenario en ambos servicios es crítico. Nos
encontramos frente al peligro de inminentes cortes ante una eventual
modificación de la situación judicial y existe una situación de desconcierto e
incertidumbre, que provoca reclamos permanentes por parte de los usuarios",
señaló en el informe que estuvo a cargo del Area de Usuarios, Obras y
Servicios Públicos de la Dirección de Derechos Económicos de la Defensoría.
"La aplicación de las normas derivó en desmesurados aumentos
en los valores de las facturas" de aquellos servicios, "arrojando montos
irrazonables desde el punto de vista económico, constituyéndose, en
consecuencia, en arbitrarios y manifiestamente ilegales por contrariar los
principios elementales de justicia contenidos en nuestra Constitucional
Nacional", agregó.
Los aumentos de la electricidad quedaron definidos en las
resoluciones 1169/08 y 628/08 de la Secretaría de Energía y el Ente Nacional
Regulador de la Electricidad (ENRE), respectivamente. Estas avalaron el
traslado de los nuevos precios de la energía a los usuarios con consumos mayores
que 1000 Kw.
A su vez, la suba del gas está vinculada con el cargo
tarifario definido en la resolución 536/08 del Enargas, que tiene por
objetivo la capitalización de un fondo fiduciario creado para hacer frente a
eventuales necesidades de importación del fluido.
Una buena noticia que suma un poroto para el Gobierno K.
Ana Grillo