Todos los presidentes de América latina debieran demostrar la avidez del
mandatario argentino, Ernesto Kirchner por conocer
Praga y la casa de Kafka. Debiera ser una romería obligada, la hermosa
y legendaria Praga, donde laboraba el abogado Franz Kafka, quien nos alertara
de este mundo de pesadillas.
Afortunadamente
el Tango O1 aterrizó en Praga, normalmente con su propio vuelo. Un acierto
del tiempo y del piloto.
Me imagino que hablarían de K a K, y el K argentino le
habría contado en la tarde kafkiana sus cuitas, las pesadillas del Plata, que
viajan en su propio carrusel y no requieren de patrocinador alguno.
El abogado, autor de
La Metamorfosis, que tradujo el primer kafkiano de Argentina, Jorge Luis
Borges, le hubiese escuchado mudo, absorto, por el fiel cumplimiento del
manual kafkiano del pueblo argentino. Che, llegaron más lejos que nosotros y
nuestras pesadillas- Lo habría pensado, pero no le
hubiese dicho eso. Franz Kafka era irónico, pero tímido, se
enfrentaba más a un papel que a las personas.
Pero habría
escuchado embobado las anécdotas
de un presidente que se encontró con un laberinto que conduce a un museo de
cera y sigue por un pasillo que conduce a una Casa Rosada, donde
se vende una poema para calmar el cuerpo de un tuberculoso.
Y el excepcional narrador checo, sabe que de eso se muere,
como le ocurrió a él, que no tiene cura, una enfermedad tan avanzada.
Si la hazaña del tango O1 ya fue un milagro con su autonomía
de vuelo restringida. Nuestros países, Franz son un milagro, una presunción,
un mar de deudas, un manojo de llaves sin cerraduras.
¿Qué
le habrías dicho a Cristina Franz?. Se ve bien la primera dama y no es
“nada de tonta”. Seguramente los habrías montado en bicicleta y pasear
por Praga, ahorrando combustible señor K. Una lección de autonomía y
seguridad. Sin duda. En medio del viaje, le habrías advertido quizá que si
las cosas no mejorar, la nación puede amanecer llena de escarabajos, porque
una metamorfosis siempre es posible, sobre todo en tiempos de crisis
recurrentes.
Con el tema del corralito, la deuda externa, el caso Menen,
las negociaciones con el FMI, con otros acreedores, el K argentino tendría
para semanas de entretenimiento con su homólogo kafkiano, que no dejaría de
reírse sin duda. Le recomendaría que volviera a la maravillosa Patagonia a
escribir sus inmortales memorias. Un ejemplo de realismo mágico, pero con
propiedades propias, netamente platenses,
incubadas en el magín de la tierra del tango. ¿Me entendés Franz? Un aso
aquí, otro allá, y nos morfamos lo que sea. Y después contamos nuestra película,
ponemos al pueblo frente a la pantalla cinemascope a todo color y con sonido.
Le pedimos ayuda a Carlitos Chaplin y la pasamos flor de banana. El otro
Carlitos, nada de kafkiano en sus manejos, está al otro lado de la cordillera
con una tal Bolocco. ¿La conocés?. Una mina del Coño Sur.
Estamos llenos de anécdotas, Pibe Franz. ¿No te molesta,
imagino si te llamo así? Vamos codo a codo con los gallegos y no sabemos
quien llegará primero. Kirchner seguramente
se comprometerá a hacer
un lanzamiento masivo de la obra de Kafka en Argentina, por haberle dado un
contenido anticipado a la nación. El homenaje que se realiza en estos
momentos en Praga a Kafka y a Borges, no es un mero saludo a la bandera, sino
un compromiso de afinidades múltiples. No seamos ilusos y menos ciegos.
Una nota periodística
relata que apenas pusieron los pies en Praga K y su esposa,
desaparecieron, se esfumaron por las callejuelas medievales de la enigmática
ciudad. Y en esos laberintos kafkianos deambularon. K propuso conocer
el Ayuntamiento de la ciudad, desde donde, en la Edad Media, lanzaban a los
gobernantes corruptos por una ventana."k dijo:: "Eso demuestra que
no sólo los aymará de Bolivia lo hacen".
Claro que la
Argentina y otros países de América latina se quedaría sin
personal para hacer funcionar el gobierno.
De
Praga, la delegación argentina viajará a China, país que un mandatario
rioplatense no visita desde hace medio siglo. Algo realmente kafkiano, porque
se trata de un país continente, destinado a ser unos de los tres líderes
mundiales en este siglo XXI. Posteriormente K, seguirá su periplo a Rusia,
otro país importante en la geopolítica global. Allí llegará el Tango 0l si
no hay problemas de combustible. Van con la bendición de Kafka, de todas
maneras.
Rolando Gabrielli