Una extraordinaria investigación del diario Río Negro, desnuda uno de los sistemas de corrupción política, quizás, más desembozados del país, dado que existe una estructura de gobierno afectada en su totalidad al cobro de sobresueldos desde hace 7 años, en la provincia de Río Negro, donde las necesidades básicas de la población están muy lejos de ser satisfechas.
Se consideran dos ejes fundamentales para entender este desvergonzado mecanismo que el importante medio patagónico ha sacado a la luz: roban para sí mismos en virtud de una “Omertá” de funcionarios ligados a la corrupción estatal y amparo bajo la impunidad judicial, o de común acuerdo y por orden superior, “roban para la corona. De cualquier manera si esto se profundiza, las consecuencias de este tsunami podría arrastrar políticamente al Radicalismo a perder ampliamente las elecciones en el
Mes a mes y desde hace siete años, el secretario General de
Desde que se instrumentó la maniobra en 2004, los ministros llevan repartidos más de 24 millones de pesos de dineros públicos. Sólo en 2010 se asignaron $ 5.678.800.
Hay notables diferencias entre las percepciones de cada funcionario, más allá de que sus sueldos y su dedicación son idénticos.
Francisco “Ringo” González -mano derecha del gobernador-, es el que determina el monto de los sobresueldos. Se fijó a sí mismo 30 veces más de lo que percibe por su cargo: tiene que cobrar 7.448 pesos pero a ese monto le suma 219.500.
Sólo durante el año 2010, González se llevó 2.201.700 pesos en sobresueldos.
Ese plus es de una diferencia sideral respecto del resto de los altos miembros del gobierno, fijados también por González.
El ministro de Gobierno, Diego Larreguy, está entre los más beneficiados con 81.550 pesos de plus, además de su sueldo de $ 7.448. En todo 2010, Larreguy percibió 736.800 en sobresueldos. Anoche se contradijo ante “Río Negro”. Primero señaló que sólo percibía el sueldo, luego que el plus no lo cobraba él, después que sí, y evitó responder más preguntas: derivó todo en González .
El ministro de
Los menos beneficiados obtienen cuatro veces más de lo que les corresponde por su haber. Es el caso de Barbeito, Uría y Contreras.
Los sobresueldos son pagados por Tesorería vía cheques, a nombre de cada ministro y su CUIT personal. Sus valores varían todos los meses, pero los montos globales asignados se mantenían más o menos constantes hasta que drásticamente se duplicaron a partir de 2008.
Aún cuando el plus es nominal, se detectó sin embargo una excepción: hay un solo destinatario de la orden de pago que no es un ministro (ni un ministerio) sino un área del Estado: “Tesorería General de
Todos estos pagos se realizan de forma subrepticia, bajo una fachada legal: están fijados por resoluciones mensuales del secretario General de
No obstante el aparente paraguas reglamentario, se trata de una maniobra claramente ilegal e inconstitucional. La carta magna rionegrina, en su artículo 189, es concreta en prescribir que “los ministros perciben un sueldo establecido por ley, que no puede ser alterado en su valor económico durante el ejercicio de su función”.
Por otra parte, de ningún modo está en las atribuciones del secretario General sustituir a
Precisamente, la intención de encubrir estos sobresueldos se advierte en la denominación ambigua que se le ha dado a la partida del Presupuesto donde están incluidos estos pagos: “Gastos de función sin discriminar” (definición que alude a gastos y no a salarios). Esto fue así durante seis años hasta que, en 2010, se optó por una calificación más genérica aún: “Otras asignaciones al personal”.
Se advierte en las normas que dan sostenimiento a este sobresueldo una evidente intención de confundir. Dan la apariencia de haber sido creadas con el fin de suministrar una herramienta para los gastos de funcionamiento de las mayores autoridades del Estado. Pero el objetivo salarial se revela y declama con conceptos inequívocos (ver aparte).
En este punto, resulta llamativo que en todas las resoluciones mensuales figura la aseveración de que “se aprueba la rendición correspondiente al mes anterior” para habilitar cada nuevo plus. Es decir, el concepto es: rendimos cuenta de lo que nosotros mismos nos repartimos, sin ningún control externo. Sin embargo, se desconoce si existen tales rendiciones cada mes, desde
De no existir estos comprobantes, la configuración del delito es palmaria.
Toda esta maniobra que involucra a la máxima jerarquía del gobierno sale a la luz tras una investigación realizada por el legislador del Partido Justicialista, Martín Soria, quien presentó el viernes una denuncia penal ante la jefa de los fiscales de Río Negro,
Los primeros datos y algunas de las resoluciones que permanecían ocultas les llegaron al diputado por informantes. Luego, la investigación de sus técnicos y consultas al sistema nacional de informática jurídica (de fácil acceso para cualquier ciudadano), a los presupuestos anuales y al digesto provincial permitieron la corroboración de cifras, nombres y procedimientos, tal como hizo “Río Negro”.
Un intruso: el Banco Patagonia
Hay un agujero negro en estos sobresueldos: ¿qué hace el Banco Patagonia cobrando el “suplemento”? No es que la resolución que fija las asignaciones incluya a la institución en la lista de los beneficiarios. No la incluye. Pero ésta aparece en las órdenes de pago percibiendo una buena porción del plus de determinado funcionario.
La cuestión es así: se le fija por resolución al secretario General de
Se ha detectado que esta maniobra de desdoblamiento se repitió en marzo, cuando a
Prácticamente todos los meses de 2010 aparece el Banco Patagonia en las órdenes de pago. Suele llevarse unos 50.000 promedio.
Rubén Lasagno
OPI Santa Cruz