La policía investiga si la menor Candela Rodríguez, de 11 años, desaparecida desde hace una semana, fue víctima de una red de pedofilia, tras realizar tres allanamientos en diferentes barrios porteños, según indica Noticias Argentinas.
Uno de los procedimientos se concretó en un comercio ubicado en la avenida Gaona 3026, en el barrio porteño de Flores, donde la policía secuestró computadoras y si bien no se encontraron personas en el lugar, se investiga si los responsables serían integrantes de una red de pedofilia.
El dueño del comercio es un hombre identificado como Enzo Luque, que según la denuncia de una mujer ante el juez federal porteño Sergio Torres ofrecía books de fotos de niños y niñas. Según las fuentes, el sospechoso ya estaba bajo investigación como presunto integrante de una red de pedofilia. Hoy el fiscal de Morón le tomó declaración, pero solo como testigo.
Según informó hoy La Nación, las fuentes consultadas explicaron que lo que motivó la detención el hecho de que, en su muro de Facebook, Luque escribiera que había mantenido contactos con Candela antes de su desaparición. Abundaron los voceros: cuando otro usuario le preguntó si sabía qué había sido de ella después del lunes pasado, el sospechoso respondió vaguedades que, no obstante, están siendo corroboradas por la Justicia.
De los allanamientos tomaron parte efectivos de la división Delitos Complejos de la Policía, DDI de Morón, como así también de la Policía Metropolitana.
Las órdenes de allanamientos las libró el fiscal Marcelo Tabolaro, quien dispuso que los allanamientos tengan lugar en tres domicilios de los barrios de Flores, dos, y Almagro.
Lo que se investiga es si la niña desaparecida en Hurlingham fue víctima de una red de pedofilia, ya que si bien se tiene certeza de que fue secuestrada, a familia no recibió ningún pedido de rescate.
A una semana exacta de la desaparición de Candela unos 1.600 policías siguen estando detrás de diferentes pistas.
El instructor aseguró que se sigue con la esperanza de que la nena "esté con vida" e inclusive deslizó la posibilidad de que su ausencia se motive en "una travesura".
"La única certeza que tenemos es que no sabemos dónde está. Mientras no aparezca nada firme, sigo teniendo la esperanza de que esto, incluso, sea una travesura", expresó el fiscal general de Morón, Federico Nieva Woodgate.
"Lo que estoy segura es que está secuestrada", aseguró Nancy Labrador, la madre de Candela ante la prensa en la puerta de su casa.
El punto, según trascendió, es el lugar al que se dirigió la niña, luego de salir de su domicilio, el lunes pasado, según su madre, para encontrarse con un grupo de amigas.
"Chicos no pueden hacer más nada, devuélvanmela", le dijo la madre de la niña desaparecida a los supuestos captores.
Al parecer Luque forma parte de una red de pedofilia a la caza de menores a través de la red social Facebook. Una foto que para cualquiera puede resultar inocente, para este tipo de delincuentes puede parecer sugestiva.
Según el blog Glitters, que pudo obtener las capturas de pantalla entre Luque y otra persona que al parecer formaría parte de la red, este mantuvo contacto con Candela, y la habría ido a buscar porque “lo dejó caliente”.
Los comentarios de ese propio blog son aún más polémicos, ya que hablan de que Luque sería policía, hasta de que le habrían creado un falso perfil para incriminarlo, o auto incriminarse como una estrategia.
Hay que recordar que según estudios la mayoría de los menores de edad con presencia en esa red social tiene su perfil abierto, es decir a la vista de todos. Direcciones, teléfonos, fotos y datos pueden ser visualizados por cualquier persona que no forme parte de Facebook.
La creación de perfiles de menores de 13 años está restringida, pero muchas veces mentir en la fecha de nacimiento es algo común para poder sortear la prohibición y abrir una cuenta en esa red social, la mayoría son creadas por los propios padres.
Desde el suplemento infantil de Tribuna, TribunaKids, hemos elaborado una guía útil para evitar el acoso infantil en Facebook, a la que tal vez sea hora de prestarle atención.
Es momento de aceptar que los chicos están creando un escenario ideal para quienes utilizan Facebook para poder acceder a la intimidad de menores de edad.
Aunque no sea común para muchos niños, hay que pensar en los riesgos o amenazas contra la privacidad, y las consecuencias en su propia seguridad que puede ocasionar la exposición deliberada de sus datos personales.
No basta el slogan de “no hables con extraños” ya que los chicos desde la seguridad de su propia habitación suelen aspirar a tener la mayor cantidad de amigos en Facebook hasta el punto de aceptar solicitudes de amistad de personas que no conocen, esto es absolutamente innecesario y muy riesgoso.
Muchos pedófilos se hacen pasar por personas de su edad con el solo objetivo de entablar un amistad, presentarlos a un grupo abusador de menores, o solo acceder a sus fotos personales para comercializarlas.
Eliana Toro
Twitter: @toroeliana