“No, no, más adelante”, dijo Cristina Kirchner cuando los periodistas le pidieron alguna declaración sobre la reciente muerte de 11 personas en el trágico accidente de Flores, ocurrido el martes 13 de septiembre último. Se encontraba en París y acababa de inaugurar una exposición fotográfica sobre el Rally Dakar en la Argentina.
Un día después de la tragedia, el Papa Benedicto XVI hizo llegar sus condolencias a los familiares de las víctimas y a todo el país.
En febrero pasado un suceso parecido, pero entre dos trenes, dejó un saldo de cuatro muertos y 120 heridos. Cristina no emitió declaración alguna.
"¿A quién se le ocurrió la brillante idea?", aseguran que dijo la mandataria a sus colaboradores mientras intentaba recordar quién le había sugerido recibir a la madre de Candela en la Casa Rosada, el 25 de agosto último, luego de que se enterara de que Carola Labrador militaba en el Movimiento Evita del distrito de Hurlingham.
Cristina había recibido la noticia de la aparición sin vida de Candela apenas finalizó un acto que encabezaba en la Casa Rosada, donde inauguraba obras por teleconferencia, pero evitó pronunciarse sobre el hecho.
A través de la página de Facebook de los familiares de las 22 víctimas fallecidas del accidente del avión de Sol, en Prahuaniyeu, Río Negro, el 18 de mayo de 2011, se sorprendieron al ver la actitud que tomó el presidente de Chile, Sebastián Piñera, al decretar dos días de duelo nacional ante la caída del avión con 21 ocupantes en la Isla Robinson Crusoe. Cristina jamás expresó palabra alguna al respecto de ese incidente.
Entonces, ¿qué puede explicar el haber recibido a la madre de Candela previo a la muerte de la niña, pero no emitir declaración luego de que todo un país se conmocionó y lloró la noticia de haberla encontrado sin vida a la vera de una ruta? ¿Qué motiva que Cristina se reúna en París con los padres de las turistas francesas asesinadas brutalmente en Salta, pero no con Carola Labrador o con los familiares de las víctimas de la tragedia de Sol?
¿Cómo es posible que ante este historial de cómodo silencio la presidenta sí haga un lugar en su discurso para referirse al reciente fallecimiento de Steve Jobs, co- fundador de Apple y sus ganas de conocerlo?
“Hoy leí una cosa que me impresionó mucho de este hombre, Steve Jobs, que dijo, creo que en Standford, que la muerte es el mejor invento porque siempre permite que lo viejo sea sustituido por lo nuevo. Muy fuerte”, dijo hoy Cristina en marco de la inauguración del Polo Tecnológico en Palermo.
Es evidente la manera en que la presidenta deja intencionalmente de lado los temas más sensibles que acaparan la atención pública, máxime si incluyen víctimas fatales y si ocurrieron en la Argentina. La estrategia es reducirlo a la zona geográfica donde ocurrió y hacer llegar a la agencia estatal de noticias Telam, que la mandataria “se mantiene informada a todo momento sobre el acontecimiento.”
Pero volvamos a Steve Jobs. ¿Sobre qué podría haber hablado Cristina con el CEO de Apple si la muerte no lo hubiese encontrado? No mucho, de hecho ni siquiera lo hubiese recibido.
El 26 de agosto pasado, Ezequiel Lollini, gerente de ventas de IRBIT —empresa que comercializa productos de Apple la Argentina— se mostró preocupado por la traba en el ingreso de sus productos en el país, que fueron alcanzados por el régimen de licencias no automáticas, y por las maniobras desleales a raíz del contrabando. “Lo que a mí me preocupa dentro de lo que es Apple en Argentina hoy, es si va a seguir habiendo restricciones a las importaciones de la misma manera o más profundas que antes”.
“Están todos tratando de cerrar acuerdos para encontrar partners en Tierra del Fuego para ensamblar alguna línea de productos, porque todas las líneas, obviamente, no se pueden ensamblar localmente. Esta política impacta negativamente en los negocios: los equipos de Apple no se pueden fabricar en Argentina, es otro hardware, es otro sistema operativo. Esta escasez afecta el poder de decisión de la gente y fomenta el contrabando”, dijo Lollini.
En la semana Apple develó el lanzamiento del IPhone 4S, un modelo actualizado, más barato y rápido que los anteriores, pero nada indica que estará disponible en el país.
Cristina no recibe a los Qom ni a los docentes santacruceños, recibe a Ricky Martin. Cristina no se refiere en sus discursos a las víctimas de accidentes ferroviarios, Cristina se refiere al fallecimiento del CEO de una empresa multinacional estadounidense.
En fin, triste esnobismo hasta decir basta.
Eliana Toro
Twitter: @toroeliana