Si hubiera que definirlo con una palabra, esa sería “vergüenza”. En un gesto que mancha —una vez más— la imagen de Mauricio Macri, el partido que hoy debían disputar San Lorenzo y Tigre, por la decimoséptima fecha del Torneo Apertura, fue suspendido, luego de que la Agencia Gubernamental de Control del Gobierno de la Ciudad clausurara el estadio del elenco "azulgrana".
Según cuenta Noticias Argentinas, la medida de ese ente porteño se dispuso en forma preventiva, por lo cual a la AFA no le quedó otra opción que acatarla y dar marcha atrás lo que había programado para las 17:00 de este sábado y finalmente reprogramarlo para el lunes a las 20:30. De otra forma sería un delito abrir el Nuevo Gasómetro con la disposición emitida por la Ciudad.
De hecho, Facundo Mamone, inspector del Gobierno de la Ciudad, le puso faja de clausura a cada uno de los accesos del Nuevo Gasómetro durante esta tarde y allí la AFA acató la orden y decidió suspenderlo de manera oficial.
"No estaban dadas las condiciones para que se juegue el encuentro. Nosotros no permitimos el partido para el día de hoy", comunicó Javier Ibañez, titular del organismo porteño, quien además sostuvo que "ya fueron notificadas" las autoridades de San Lorenzo, la AFA y el Comité de Seguridad deportiva.
De esta manera, el Gobierno Nacional volvió a enfrentarse con el de la Ciudad, pero ahora la contienda la llevaron al terreno futbolístico con las elecciones que este domingo se harán en Boca y como efecto colateral de las mismas el cotejo San Lorenzo-Tigre.
Durante toda la semana hubo tironeos, cambios de día, marchas y contramarchas de ambos sectores, que derivaron en esta suspensión oficial.
Desde la Ciudad aseguraron que recién autorizaban a que se jugara el domingo o directamente el lunes, mientras que la AFA y el Gobierno Nacional, por intermedio del Ministerio de Seguridad habían decidido a que fuera hoy a las 17:00.
En ese sentido, desde el Ministerio de Seguridad de la Nación advirtieron que el domingo no podían dan las garantías necesarias para montar el operativo policial debido a que ese día estaban los comicios en Boca, el partido del "xeneize" y una posible consagración con una recorrida desde La Boca hacia el Obelisco porteño.
Los cruces entre ambos gobiernos se trasladaron al fútbol y el disparador fueron las elecciones que este domingo se llevarán a cabo en Boca.
Allí se disputan la presidencia del club "xeneize" Jorge Amor Ameal, el actual mandatario de la institución y hombre alineado al kirchnerismo, y Daniel Angelici, dirigente avalado por el jefe comunal de la Ciudad, Mauricio Macri, y quien diera un paso al costado en la comisión directiva auriazul por negarse a aprobar el contrato de Juan Román Riquelme.
En ese sentido, Tigre es el único que le pelea el título del Apertura a Boca, aunque está a nueve puntos cuando quedan la misma cantidad de unidades por jugarse.
Entonces, si el partido entre San Lorenzo y el "Matador" se jugaba este sábado y el elenco de Victoria no lograba un triunfo Boca se consagraría automáticamente campeón y por ende los comicios en la entidad de la Ribera se iban a desarrollar con el título ya consumado.
Desde el seno del macrismo, consideraron que esa jugada era peligrosa para las aspiraciones de Angelici, ya que entendían que la consagración puede allanarle el camino a Ameal a un nuevo mandato —más allá que el primero fue interino al reemplazar al fallecido dirigente Pedro Pompilio—. Por lo tanto, le convenía más que el encuentro se disputara el domingo o el lunes ya con la elección finalizada.
Por eso y para evitar incidentes, ya sea en los festejos o con la interna generada en la Barra Brava entre los hermanos Di Zeo y Mauro Martín, el actual jefe de "la Doce", se abocaron a estos tres puntos y decidieron pasar San Lorenzo-Tigre para el sábado.
El viernes, en la reunión del Comité de Seguridad hubo un principio de acuerdo para llevarlo al lunes, pero como el martes arranca la decimoctava fecha, la AFA mandó el comunicado para llevarlo a cabo este sábado por la tarde.
Fue así que hubo modificaciones de urgencia a la hora de pautar el entrenamiento y de armar la lista de concentrados, al tiempo que ambos entrenadores, Leonardo Madelón ("Ciclón") y Rodolfo Arruabarrena (Tigre) les dieron a sus dirigidos el jueves: "Muchachos, por las dudas vengan con los bolsos".
Por lo tanto, ambos equipos quedaron "guardados" a la espera de un partido que finalmente no se pudo jugar por un nuevo cruce entre Nación y Ciudad.
José María González
Son NEGOCIOS,solo NEGOCIOS, licitos o ilicitos,pero NEGOCIOS AL FIN.
FUTBOL, SINDICALISMO Y POLÍTICA.LOS TRES GRUPOS VIVEN APOLLADOS CON LOS MISMOS BARRABRAVAS.
El mismo Macri que por intermedio del Procurador General intentó desistir de una acción legal en perjuicio de los intereses de la Ciudad Autónoma continuando con una situación anómala en favor del Casino de Puerto Madero; el mismo Macri que aumentó en forma desmedida el ABL al tiempo que ha disminuyó el presupuesto de los hospitales y ha renegociado en forma poco clara los contratos de recolección de basura; el mismo Macri que no se inmutó cuando una patota de barras bravas agredió en las cercanías del Palacio Legislativo (a propósito, ¿quién las envió? ¿a quién respondían?) a los maestros que solicitaban ser escuchados ante una medida propugnada por el Gobierno de la CABA y a la que se señalaba como negativa para la educación pública. El mismo Macri que, según relato del cronista, utiliza a la Administración de la CABA para con una resolución oficial impedir la realización de un encuentro de fútbol con la finalidad de beneficiar a un candidato dado en las elecciones a celebrarse en otro club. El uso de patotas como herramienta para conseguir sus logros y acallar reclamos o voces disidentes, conocido recurso de otros sectores políticos y medios sindicales, por lo que se ha podido apreciar tampoco resultan extraños al macrismo. Igual que la cercanía con empresarios del juego. Parece que, en definitiva, no son tan distintos los M de los K. Son lo mismo. Una misma cosa con distintos envoltorios (aunque últimamente no tan distintos). ¿O no?…
Seria una buena medida a tomar por los Consorcios que integran la enorme cantidad de edificos de la Capital Federal, ante el aumento desmesurado del ABL, ante la creacion de nuevos impuestos como el de los sellos (2.5 %), ante el impuesto a la transferencia de inmuebles ITI (1,5 %), etc y la quita de los subsidios en el consumo de energia (gas y luz) y agua. Ademas de los aumentos a los porteros y los aportes a las obras sociales, a espaldas de los consorcistas: Hacer una presentacion pidiendo la propia quiebra de todos los consorcios, (cada uno por si mismo) y pedir la suspension por el tiempo que dure la misma, de todos los impuestos y tasas y consumos y aportes que se devenguen. Por favor que alguien especializado o alguna organizacion de las tantas que se auto proclaman representativas de los propietarios, estudien esta posibilidad, porque hay mucha gente (casi todos los jubilados incluso) que no podra hacer frente a esta situacion, provocada por esos individuos salvadores de la patria. Me gustaria ver que hacen estos señores, viven estirando la cuerda, hasta que la misma se rompe, seria una buena medida ?