¡Recién Publicado!
cerrar [X]

Fundaciones sospechosas

0
LOS LÍMITES DE LA TZEDAKÁ ¿UMBRALES QUEBRADOS?
LOS LÍMITES DE LA TZEDAKÁ ¿UMBRALES QUEBRADOS?

    El matutino Clarín publicaba hace días la noticia del fallecimiento de uno de los miembros del clan Werthein. Decía la historia oficial, con un breve artículo para la importancia que tiene este grupo, que “Ayer murió a los 69 años el empresario Leo Werthein, luego de una larga enfermedad. Junto a sus hermanos Daniel y Adrián y a su primo Gerardo formó parte de la segunda generación de una dinastía en el mundo de los negocios. El grupo conocido como los W, se hizo fuerte en el ex Banco Mercantil. En los tiempos de las privatizaciones se quedaron con la Caja de Ahorros. Y el año pasado compraron la mitad que poseían los franceses en Telecom. Leo tenía una vocación especial por el manejo de los establecimientos agropecuarios. Y era el criador más importante de la raza de vacunos Aberdeen angus, además de ejercer como presidente de la Asociación Argentina de Angus y como director de la Sociedad Rural Argentina. También fue un reconocido filántropo, sobre todo cuando se desempeñó al frente de la Fundación Tzedaká. Su abuelo había llegado al país en 1904, procedente de Besarabia, Rumania, para instalarse en Bahía Blanca. Leo Werthein deja tres hijos y tres nietos”.

 

    ¿Qué significa la palabra tzedaká para los judíos? Como dice la página web de una conocida fundación de la colectividad, “una orden afirmativa (el) dar Tzedaká al pobre de Israel, pues está dicho: `indispensablemente le abrirás tu mano´ (Deut.15.8) y está dicho `que pueda vivir tu hermano junto a ti´ (Deut.8). `No endurecerás tu corazón al menesteroso´ (Deut.15.7)

    `Bien que no debe haber en medio de ti, menesteroso alguno´. Ese es el mandato divino. La pobreza debe ser erradicada. (Deut. 15.4)

    `Porque no dejará de haber menesteroso en la tierra, por lo mismo yo te mando diciendo: Ampliamente has de abrir tu mano a tu hermano, es decir a tu pobre y tu menesteroso en tu tierra´ (Deut. 15.11)”.

   Para entender este artículo, es necesario hacer una breve introspección histórica que aquí en la Argentina se manifestó como menemismo. La tendencia mundial a la que no escapó nuestro país, era la de la proliferación de Organizaciones No Gubernamentales (ONG) las cuales venían a suplir el descalabro social de las políticas macroeconómicas y por la teoría política en boga que pregonaba una desregulación de la crisis, un traslado hacia unidades menores: de la Nación a las Provincias, de las Provincias a los Municipios, etc. Estas ONG que eran legitimadas por teorías del “tercer sector”, también vinieron a subsanar un mal endémico que nuestro país desconocía: el hambre.


La llamada

   Durante este Pesaj recibí un llamado muy curioso, que seguramente Usted también habrá recibido.
   -Buenos días, ¿el Señor Daniel Blinder?
    -Sí, él habla
    -Que tal, le estoy llamando de la Fundación Tzedaká, y quería saber si usted recibió una tarjeta que le enviamos con motivo de Pesaj.
    -No la recibí. ¿Cuál es el motivo de su llamado?
    -Le cuento que estamos haciendo una campaña desde la Fundación, que consiste en recaudar fondos para poder ayudar a quienes más lo necesitan dentro de la Colectividad
.

   Cuando le dije que no quería colaborar, le pregunté a la “señorita de la Fundación Tzedaká” sí me estaba llamando de Clienting, a lo que me respondió que sí. Inmediatamente pasó a preguntarme sobre mis posiblidades económicas para colaborar, debido a que los subsidios internacionales que recibe Tzedaká están mermando considerablemente, puesto que aquellos que subsidian consideran que la crisis Argentina ya pasó, y de a poco se puede comenzar a apelar a toda la colectividad para que colaboren con sus hermanos más necesitados.

   Pero nos quedó en el tintero que es Clienting: Clienting Group es una empresa que terciariza los servicios de Tzedaká, así como también de la automotriz Peugeot, las telefonías celulares Movicom Bellsouth y Unifón (hoy Movistar), la gastronómica Danone, y la cervecería Quilmes, entre otras. Y es que las personas que se encargan del “marketing directo” para conseguir las donaciones no son en realidad de la Fundación Tzedaká, sino que tienen contratos temporales (o no) con la empresa Clienting.

   Cada campaña requiere de una capacitación específica que ayuda a pulir el diálogo entre los operadores telefónicos (telemarketers) y el cliente que donará. Es así que una vez seleccionado el grupo que realizará la campaña, se da entrenamiento en cuestiones sobre qué decir, cómo decir las cosas y cómo hacer que el que está del otro lado del teléfono sienta la necesidad de donar plata.

   Particularmente este periodista conoce un sólo caso, que es el de la campaña de Pesaj de 2004: en aquella ocasión, todos los seleccionados fueron trasladados desde el Call Center de Clienting, hasta las oficinas de la Fundación. Allí, fueron recibidos por Edgardo Att, quien se encarga de las campañas institucionales. Ya en las oficinas de la Fundación, en la Avenida Santa Fe, se mostraron videos institucionales para conocer lo más posible la función de la Fundación, su obra y las vivencias de asistidos por Tzedaká. Att lo dijo más o menos con estas palabras: "es para sensibilizar y que los telemarketers se compenetren con la campaña para recolectar fondos". Luego, una conocida Rabina dio una charla acerca del Pesaj, de su significado como festividad, y por último, las posibles alocuciones al Pesaj para que los llamados tengan la efectividad deseada.

   Una vez realizada la capacitación, en varios boxes con teléfonos frente a una base de datos en la computadora, comenzaban los llamados. Las bases eran verdaderamente completas y, muchas veces, los que recibían las llamadas no podían evitar preguntar al operador telefónico de dónde había sacado los datos. La respuesta era: “seguramente usted alguna vez fue a un club o a un templo y dejó sus datos”. ¿Será cierto? Mucha de la gente a la que se le llamaba no era de la colectividad judía, por lo que ayuda a dudar de esa tesis. Otra de las objeciones recibidas era acerca de los que llevan adelante la institución (muchos de los llamados recibían respuestas como: “Yo sé cuanto ganan los directivos de la fundación”). Así y todo, muchos aportaban sumas generosas.

   Es importante que quede claro que no estamos cuestionando en este artículo el destino de los fondos ni los métodos utilizados para conseguir dinero; estamos poniendo a disposición del público la información para que éste sepa dónde se desenvuelve. Si después de leer estas páginas, sigue apoyando la obra de Tzedaká es libre de hacerlo.


Los directivos

  
Continuando con el planteo que venimos desarrollando, vemos que el tema de las fundaciones es funcional a una época precisa. Que sean los ricos los que dan a los pobres no está mal moralmente. El problema es cuando algunos tienen que ver con un contexto social en que se aplicaron las políticas neoliberales a nuestro país. Ahí ingresamos en lo coyuntural y también en lo moral…

   Con toda la sinceridad, se nombran en la web la lista de empresas que trabajan con Tzedaká. Ellos son empresas en relación a centros comerciales, sociedades de la bolsa, bancos y laboratorios importantes: Abasto Plaza, Aeromar, Amirante Galitis Sociedad de Bolsa SA, Banco Hipotecario, Bank Hapoalim, Banco Industrial, Bank Leumi, Banque Safdie, Biotenk S.A., Cadbury, Clariden Bank, Cohen Financial Service Group, Columbus S.A., Credit Suisse, Diagramas, Dolphin Fund Management, HSBC Private Bank, Industrias Sica SAIC, Israel Discount Bank, Kempinski, La Caja de Ahorro y Seguro, Laboratorios Phoenix, Lehman Brothers, Le Jardin Residence, Miguel Rosental y Asoc., Multicommercial Bank, Novartis Argentina S.A., Safra National Bank of New York, Tradition Argentina SA, U.B.S., Vendels S.A.

   Arnoldo Stanislavsky el Presidente de la Fundación, es quien pertenece a la familia que vendió en 1994 a Cadbury -según un informe de Ana Gabriela Castellani- su empresa Stani por 93 millones de dólares. Adrián Werthein, a quien ya aludimos en otro artículo, se desempeñó como Contador Gral. de la Nación, es Presidente del Directorio de La Caja de Ahorro y Seguro S.A., director y miembro del Comité Ejecutivo del Banco Mercantil S.A., y uno de los directores de Visa Argentina

    La Caja auspicia a la Fundación y no es un dato menor dada la importancia del Grupo Werthein en la economía de nuestro país y la cantidad de veces en que son nombrados en el informe del lavado de dinero de Elisa Carrió.

    Justamente Leo Werthein, quien figura en el Informe referido y es accionista del Banco Mercantil Argentino S.A., Presidente de Finca Flichman S.A., Vicepresidente de Gregorio, Numo y Noel Werthein S.A. y director de Los W S.A., Cointel y Telefónica, supo ser el Presidente de Tzedaká. ¿Qué le dice esto a Usted, lector?

   Una página oficial de nuestro gobierno reza: Los inspectores del BCRA detectaron que el Banco República (Moneta) realizaba operaciones cruzadas con los bancos de Werthein (Banco Mercantil y La Caja) y con el Banco Macro para eludir ilícitamente las normas de ese organismo que limitan los préstamos a sus vinculadas, no obstante ello el directorio del BCRA no abrió sumario alguno por dichas irregularidades ni aplicó sanciones”. ¿Existirían tantos pobres si todas estas irregularidades no se hubieran permitido? Repetimos, hablamos del ex presidente de la una Fundación que tiene por misión restituir un derecho perdido.

   Pero hay mucho más. El Banco HSBC, famoso por iniciarse hace más de 200 años en delitos como el de lavado de dinero proveniente del tráfico de drogas y reincidente en los megacanjes de la Deuda Externa de los argentinos -donde entre otras consecuencias, se llegó hasta instancias como el tristemente célebre “corralito”- es uno de las entidades que aportan su Tzedaká. Otra es el Credit Suisse First Boston, ¿No le suena?

    Si la palabra paraísos fiscales le hace ruido, es porque justamente, 650 millones de dólares de la Provincia de Santa Cruz, que tras once años debieran haber aumentado a más de u$s 1.100 millones, Kirchner transformó en u$s 507.500.000 colocados entre otros Bancos, en el Credit Suisse, una de las plazas favoritas del lavado de narcodólares. Esto le contó Christian Sanz a quien escribe estas líneas sobre dicha entidad: “Es un banco que lava dinero, que está investigado por Servini de Cubría junto al Banco General de Negocios –vinculado a la muerte de María Marta García Belsunce- por fuga de capitales y lavado de dinero. Es de los hermanos Rohm. En la investigación aparece David Mulford, y toda la lacra”.

   Una de las hipótesis de Sanz es justamente, la vinculación del Atentado a la AMIA con el tráfico de armas y el lavado de dinero, y aunque estas empresas no tengan que ver con este hecho, están imbricadas en la rueda de dicho sistema. Dicho sea de paso, cuando Menem reconoció la titularidad de su cuenta en Suiza se abrieron muchas presentaciones judiciales, entre ellas, la realizada por la Oficina Anticorrupción y la Unidad de Investigaciones Especiales de las AMIA, liderada, por Alejandro Rúa, quien solicitó ante el Juez Galeano para que se indague sobre las cuentas que tendría el ex secretario general de la presidencia Alberto Kohan en el Credit Suisse de Ginebra.
  

Los otros

  
Algunas de las personas vinculadas con la Fundación Tzedaká -como por ejemplo Sergio Grosskopf (ex Alto Palermo), Gregorio Chodos, o Roberto Goldfarb- aparecen relacionadas a frondosos negocios inmobiliarios.

    Goldfarb, según explica el periodista Daniel Schnitman, fue socio de Rubén Beraja y partícipe de las maniobras fraudulentas del saqueado Banco Mayo. Asimismo, estaría vinculado con maniobras asociadas al Citi (gran lavador de dinero) que es uno de los principales clientes del estudio Zang, Bergel & Viñes

    Supuestamente gracias a Goldfarb, el Citi se habría beneficiado. Súmese la sospecha de que el Juez comercial que adoptó la decisión, tuvo como secretario de su tribunal durante años, al Dr. Viñes, socio del estudio de abogados de Goldfarb. Si uno mira la web del Estudio, se encontrará con interesantes clientes de la historia económica reciente.

   Otro dato que valdría la pena investigar es si los Señores Héctor Mochon y Jorge Fainzaig, quienes son parte de Tzedaká, tienen o no que ver con los señores mencionados en un documento desclasificado del Departamento de Estado de los Estados Unidos. Ese documento informa que los recién mencionados estaban “detenidos por crímenes económicos, bajo el decreto del Poder Ejecutivo Número 2127 que data del 21 de julio de 1977”. ¿Serán los mismos?

   Sumamos a estos personajes, a Natalio Garber, quien debido a que las ventas de la industria discográfica cayeron, habría vendido al Exxel Group su empresa Musimundo y habría recibido por aquella venta 235 millones de dólares. Y hay más: muchos colaboradores se reúnen en el Hotel Sheraton para la cena anual de Tzedaká, donde concurren grandes y medianos donantes, empresarios y profesionales. 

    En medio de todo lo dicho, hay algunos de los que nadie se acuerda. y gente a la que le queda chica la conciencia a pesar de todo. 


Daniel Blinder

 

0 comentarios Dejá tu comentario

Dejá tu comentario

El comentario no se pudo enviar:
Haga click aquí para intentar nuevamente
El comentario se ha enviado con éxito
Tu Comentario
(*) Nombre:

Seguinos también en

Facebook
Twitter
Youtube
Instagram
LinkedIn
Pinterest
Whatsapp
Telegram
Tik-Tok
Cómo funciona el servicio de RSS en Tribuna

Recibí diariamente un resumen de noticias en tu email. Lo más destacado de TDP, aquello que tenés que saber sí o sí

Suscribirme Desuscribirme

¿Valorás el periodismo independiente?
Municipio de Moron. Corazón del Oeste
Mokka Coffee Store
Cynthia Gentilezza. Analista en seguros