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Haciendo leña del Galeano caído

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DIARIO CLARIN , SANTORO Y LAS OPERACIONES DE SIEMPRE
DIARIO CLARIN , SANTORO Y LAS OPERACIONES DE SIEMPRE

“En el Corán está escrito: 'Mientras no tengas indicios, no acuses”. (Jeque Shobi Tufaili a la periodista María Laura Avignolo, 1994).

 

“Con la destitución, la semana pasada, del juez Juan José Galeano se cayó la última columna que respaldaba la hipótesis según la cual un grupo de ex policías bonaerenses eran la conexión local del atentado contra la AMIA.

El jury encontró culpable a Galeano de tres cargos. Los principales fueron el pago de la SIDE de 400 mil dólares al doblador de autos robados Carlos Telleldín para que testificara en contra del ex comisario Juan José Ribelli y su grupo. Y haber sostenido irregulares y filmadas entrevistas con Telleldín en 1996”, puntualiza Daniel Santoro en la edición de Clarín del domingo 7 de agosto. Leido de corrido, no significa nada pero adentrándose en la compleja trama es interesante verificar como cambian las tornas. Pues quien escribe esa nota, durante 9 años y medio siguió a rajatabla la línea del diario que apuntaló durante ese período al hoy ex juez federal.

“Ahora, el fiscal Alberto Nisman, quien quedó a cargo de la investigación, prioriza su trabajo sobre la denominada pista siria para intentar dar con los autores materiales e intelectuales del atentado terrorista del 18 de julio de 1994 que mató a 85 personas.

Despojado Galeano de sus fueros, el caso tiene dos vertientes. Por un lado, el Gobierno —a través de la Unidad Especial AMIA del Ministerio de Justicia que dirige Alejandro Rúa— se constituirá en los próximos días en querellante en la causa abierta contra el ex juez, el ex jefe de la SIDE Hugo Anzorreguy, el ex ministro del Interior, Carlos Corach, y el ex presidente Carlos Menem, entre otros, para determinar si "encubrieron" a los verdaderos culpables y desviaron la causa sobre los policías.

Por otro lado, se replantea el curso de la investigación del atentado que estuvo y está cruzada por internas judiciales, de los servicios de inteligencia y de la comunidad judía. A la luz de esas peleas, algunas voces denunciaron que las irregularidades de Galeano contaminaron toda su investigación. Sin embargo, otras como el secretario general de la AMIA, Eduardo Gorenberg, afirmaron que "deben evaluarse las partes de la instrucción de Galeano que conservan validez”. Es muy difícil que Canicoba Corral avance demasiado en la pista siria, puesto que como compete a la alianza Washington-Tel Aviv muera de forma prematura. Y el fiscal Nisman sólo sondee este complejo entramado, no ahondando en las relaciones de Kanoore Edul con dos notorios apellidos sirios: Monzer Al Kassar y Alfredo Yabrán.

“Más lejos de las pasiones políticas y más cerca de las pruebas, Nismam y su segundo Marcelo Martínez Burgos tienen en la mira unas 40 pistas. Las principales que —con distinto grado y distinta profundidad habían sido iniciadas por Galeano y que se desarrollan más adelante— son:

· Identificar la carrocería en que Telleldín puso el motor encontrado entre los escombros de la AMIA. Se comprobó el número del motor, pero no la matrícula de la carrocería.

· Definir si un colombiano de ascendencia siria y miembro del partido libanés pro iraní Hezbollah llamado Samuel Salman El Reda fue el jefe del grupo de operaciones que ejecutó el ataque.

· Localizar a un brasileño llamado André Marquez que figura como dueño de un celular usado para hacer misteriosas llamadas desde Foz de Iguazú (Brasil) a Buenos Aires y El Líbano.

· Decidir si el argentino de origen sirio Kanoore Edul —desde cuyo celular se llamó a Telleldín el día en que se puso en venta la Trafic— colaboró con el atentado. Edul es la base de la llamada "pista siria"

· Lograr que finalmente el ex espía iraní Abolghasem Mesbahi, conocido como el "Testigo C", viaje a Ginebra a identificar el banco donde estaba la cuenta "madre" desde la cual afirmó que Irán financiaba operativos terroristas internacionales”. Este párrafo es más de lo mismo, puesto que sigue la línea Toma-Stuisso de octubre de 2001, cuando a un mes del episodio del World Trade Center se llegó a afirmar que la masacre de la calle Pasteur fue perpetrada por el mismísimo Bin Laden. Y hasta se llegó a inferir que el supuesto prófugo estaba afincado en la Triple Frontera, dando pie a una historia fantástica que empalidecería de terror al propio Ian Fleming. En cuanto a la famosa base de Hezbollah en dicho territorio, caballito de batalla de muchos impresentables, es otro invento de agencias internacionales de recontraespionaje que buscan controlar esa mina de oro ilegal afincada en Ciudad del Este. Como también, instalar una base permanente estadounidense con el fin de partir en dos al continente. 


Cómo se construye un suicida virtual

“A seis meses de que el juez federal Rodolfo Canicoba Corral —quien reemplazó a Galeano— le delegara la investigación, el equipo del fiscal Nisman está terminando de verificar una causa integrada por 525 cuerpos, 1.648 carpetas de pinchaduras telefónicas y 160 cajas con documentación. Además, se está finalizando la desclasificación de 1.700 carpetas de la SIDE.

En ese laberinto de papel, Nisman contó a Clarín que ordenó tomar declaración testimonial a "la totalidad" de los titulares de camionetas Renault Trafic que habían sido robadas entre 1993 y 1994. A su criterio, Galeano lo había hecho "parcial y defectuosamente". También compulsan otras 5 mil sobre un total de 50 mil unidades de este tipo que había en 1994 en el país.

Mientras tanto, intentan determinar a quién le entregó Telleldín la Trafic. En el informe de la SIDE de 2003 elaborado en base a datos propios, de la CIA y el Mossad, se nombró al colombiano El Reda como jefe del grupo operacional que le dio la Trafic armada con la bomba al conductor suicida que voló la AMIA y que —según Israel— fue el libanés Ibrahim Hussein Berro”. Muy interesante dato, pues Tel Aviv no sólo planta un motor cuya numeración no coincide con el del chasis, sino que además elabora un terrorista suicida virtual que para colmo, es libanés y militante de Hezbollah. Y acá, como una esponja idiota, se compra todo el paquetito para elaborar el cuento persa.

“Por eso, el equipo de Nisman está haciendo un gigantesco cruce de llamadas telefónicas en base al programa informático Excalibur sobre los teléfonos que tenía El Reda cuando estuvo en Buenos Aires. También sobre los de su mujer Silvina Sain, quien era secretaria del agregado cultural de Irán, Moshe Rabbani, el principal sospechoso de haber hecho inteligencia sobre la AMIA. El Reda y Sain, se cree, están en el Líbano. Para eso se pidió a la Policía Federal y a las empresas telefónicas que completen las llamadas telefónicas de 1994 de todos los sospechosos. Y la SIDE, de la mano de su hombre fuerte, Jaime Stiusso, está actualizando informes sobre el clan El Reda y otros que viven en Ciudad del Este.

Paralelamente, en base a un trabajo iniciado por Galeano sobre el celular 7572-1440 del brasileño Márquez se está ampliando la búsqueda de llamadas hechas desde la Argentina a ese teléfono. Este celular está siendo investigado por haber recibido llamadas desde locutorios cercanos a la AMIA, unos días antes del ataque. INTERPOL Brasil envió un informe de un André Márquez que tiene antecedentes por drogas. Ahora se quiere confirmar si es la misma persona dueña del celular citado y si ayudó en el ataque.

Rúa, de la Unidad Especial, reveló que "se detectaron muchas llamadas" a la Triple Frontera un mes antes del atentado desde un teléfono público ubicado en Corrientes y Maipú y que de otro ubicado allí mismo, días antes del atentado, "alguien se comunicó con la esposa de El Reda”. Francamente no se comprende que, a pesar de anunciar la pista siria, el artículo en cuestión sea más de lo mismo. Esto es siempre haciendo hincapié en la investigación digitada por la CIA y el MOSSAD que inevitablemente culpan de la voladura a Irán, con el necesario aditamento de la famosa Trafic que nadie vio. Si Galeano fracasó porque su indagatoria fue digitada por el menemismo y por estos servicios, ni hablar de lo que ocurrirá de seguir con esta tesitura.

“Otra de las líneas que se profundiza son las "extrañas coincidencias", según dijo Martínez Burgos, sin dar más detalles, entre el vendedor de autos Alejandro Monjo —ex socio de Telleldín— y empleados de la playa de estacionamiento Jet Parking, donde se estacionó la Trafic antes del ataque.

Hace dos semanas, Nisman se reunió en Buenos Aires con el juez suizo, Jaques Antenen, quien investiga el asesinato del disidente iraní Kazem Radjavi. Nismam señaló que "no descarto que Antenen logre que el "testigo C" viaje de Alemania a Ginebra para identificar el banco en el que afirma estaba la cuenta "madre" iraní para financiar ataques terroristas. El "Testigo C" fue el mismo que dijo, en el 2001, que un colaborador de Menem habría pedido dinero a Irán para evitar que se lo acusara por la AMIA”. ¿No se había comprobado que este iraní era tan trucho como el supuesto arrepentido Moatamer?

“Nismam y Martínez Burgos cuentan con el apoyo del presidente Néstor Kirchner y de Memoria Activa. Mientras que la querella unificada de la AMIA, DAIA y Familiares de las Víctimas están más cautelosos y esperan que la Cámara de Casación Penal decida si acepta su apelación contra el fallo del tribunal oral que el año pasado absolvió a Telleldín, Ribelli y los otros acusados. No obstante, Nisman y Martínez Burgos tienen en sus manos la última oportunidad para que el atentado, tras la caída de Galeano, no quede definitivamente en la impunidad”. Definitivamente, si se sigue esta línea concordante con los requerimientos externos, el caso AMIA nuevamente entrará en un cono de sombra.

 

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