Ni la Policía bonaerense ni la Justicia de Quilmes, pudieron encontrar al actual intendente entre 1993 y 2003. Durante este lapso de tiempo fue “buscado” pero no se lo pudo hallar, pese a que Sergio Omar Villordo siempre ocupó cargos públicos. Estaba imputado en una causa por al tenencia de automóvil “trucho”, un Fiat 147 que era de su propiedad y que les vendió a sus padres. Cuando el juez Rubén Darío Sánchez, titular del juzgado en lo Criminal 2 de Quilmes, ordenó que se lo volviera a citar en su calidad de imputado para que prestara declaración indagatoria, la Policía no lo encontró porque “se había mudado”. Pasada una década, Villordo fue sobreseído por el juzgado de Garantías a cargo del juez Mario Caputo y de la secretaria, Julia Andrea Rutigliano.

Este increíble hecho que demuestra por lo menos ineficiencia de los organismos estatales, fue revelado por el semanario Nuevo Horizonte, en su última edición.

Sin duda se trata de otro hecho escandaloso que pone en evidencia las fallas en el sistema judicial y policial. Todo comenzó el 11 de mayo de 1991, cuando la madre de Sergio Omar Villordo fue requerida por efectivos policiales de la seccional primera de Berazategui. A los policías les llama la atención las chapas del vehículo. Cuando revisan el rodado, un Fiat 147, color blanco, chapa B 2.173.932, advierten que no tenía los números de identificación del motor ni de la carrocería.

La mujer y el rodado fueron trasladados a la comisaría de Berazategui y se dio intervención al juzgado en lo Criminal 2, a cargo del doctor Rubén Darío Sánchez. Horas después llegaron a la comisaría, el esposo de la mujer, Carlos Villordo y su hijo Sergio Omar.

De sus declaraciones surge que el rodado lo adquirió Sergio Omar Villordo. En ese momento dice que lo compró el 22 de marzo de 1989. En su primera declaración testimonial y luego en declaración indagatoria, Villordo manifiesta que lo compró después de la última semana de abril. En el recibo que presenta figura la fecha 1º de marzo de 1989.

Sergio Villordo señala que lo compró en la calle, frente al Senado de la provincia de Buenos Aires, organismo en el cual trabajaba. Dice también que al comprador, nunca más lo vio. También dice que lo compró de buena fe. Desde la fecha de compra y el problema con la policía, habían pasado dos años.

Prima facie

Luego de analizar los informes y las declaraciones, el juez Sánchez considera que Sergio Villordo es prima-facie responsable de la infracción al artículo 33 del decreto ley 6582-58 y ordena que se lo vuelva a citar a declaración indagatoria para el 18 de mayo de 1993.

Pero la Policía nunca más lo encontró. Se había mudado. Fue el portero del edificio donde vivía, quien deice que ya no vivía más en el departametyo que alquilaba en Videla 126 de Quilmes Centro, pero a los responsables de la comisaría primera les dice que tiene conocimiento que “trabaja o trabajó”, en la municipalidad de Quilmes.

A pesar de ese dato, la Policía nunca lo va a buscar a la municipalidad ni tampoco pide informes. Efectivamente Villordo trabajaba en la Comuna quilmeña; era una especia de secretario personal del intendente Aníbal Fernández.

Al no encontrárselo, el juez Sánchez determinó que se lo busque y que se lo incluya en el listado de personas con averiguación de paradero del Departamento Central de la Policía bonaerense.

La causa prescribió

Entre fines de noviembre de 1993 y setiembre de 2003, La Policía “no encontró” a Sergio Omar Villordo. La causa prescribió por decisión del juzgado de Garantías, a cargo del doctor Mario Caputo y de la secretaria Julia Andrea Rutigliano. El motivo principal es que a Villordo no se lo encontró.

Mientras la Policía no pudo hallarlo, Villordo era funcionario. Entre 1993 y el 2003, fue funcionario municipal de Quilmes; trabajó en el Senado Bonaernese, en los ministerios de Producción y de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, y luego en la Casa Rosada, durante las presidencias de Eduardo Duhalde y de Néstor Kirchner, siempre bajo la tutela políticda del actual ministro del Interior, Aníbal Fernández. Pedro Navarro