¿Cuánta distancia existe entre la Casa Rosada y el mini estadio de Ferrocarril Oeste? No mucha, por cierto, pero al presidente de la Nación le pareció demasiada y por ello recurrió al helicóptero para subsanar ese trayecto. Aconteció el jueves, cuando decidió concurrir al acto para respaldar al candidato porteño Rafael Bielsa. Pero esto no debería sorprender, puesto que todos los días utiliza el mismo y oneroso método de traslado cuando concurre a Olivos para echarse una siestita. ¿Cuánto le sale al Estado Nacional esta costumbre? Por supuesto, este dato no se encontrará en el Boletín Oficial, como tampoco en algún medio oficialista de esos que pululan por ahí. Sería interesante que algún político opositor interesado realmente por el bienestar general, y no en mirarse el ombligo, o algún juez independiente (si queda alguno) se hagan eco de esto y efectúe la investigación pertinente.
   Otro que durante esta semana ostentó su cararrotismo fue el jefe de Gobierno porteño Aníbal Ibarra. En el colmo del sinsentido, pidió la recusación de 5 diputados de la comisión de juicio político y la incorporación por escrito del testimonio del ministro del Interior Aníbal Fernández, como parte de una estrategia defensiva de pantalones caídos frente a la indignación de los familiares de las 195 víctimas de la masacre de Once. Es que dentro de la lógica pingüinera de “a mí me la pusieron”, el cadáver político intentó lavarse las manos mediante un descargo de 224 páginas en el que le endilgaba a sus acusadores de “falso testimonio” y de “manipulación y armado de pruebas”. A pesar de que se acallaron por ahora los rumores de intervención del distrito metropolitano, Ibarra de cara al 23 de octubre es un peso muerto que flota insólitamente como un corcho a causa de su propia necedad.
   Pero esto no fue lo único saliente de esta semana política. Luego de una lucha sostenida de un año y dos meses, finalmente fueron libe rados el miércoles 7 los 15 detenidos injustamente por los incidentes de la Legislatura porteña, dos de los cuales (Gerez y Amitrano) se encontraban internados a causa de sostener una huelga de hambre. En otro orden, Hilda Chiche de Duhalde utilizó el marco del Foro Internacional de Mujeres (el lunes 5) para revelar que el justicialismo fracasó mientras fue gobierno como garante de justicia social para todos. El viernes 9, el radical devenido pingüinero Jorge Colazo fue suspendido de su cargo de gobernador de Tierra del Fuego en medio de una crisis que alcanzó insospechados ribetes de tensión. Hacia el final de la tarde de ese mismo día, por segunda vez la marcha de partidos de izquierda y piqueteros en repudio de la presencia de Bush no pudo alcanzar la Plaza de Mayo, a pesar de la promesa gubernamental. Sin bien se registraron incidentes menores, a cargo de los inefables todo servicio de Quebracho, la cuestión no pasó a mayores y el citado Fernández siguió con su contienda verbal: “Si los manifestantes insistieron en pasar por Avenida de Mayo, fue porque se encapricharon”. Un par de días atrás, ante el otorgamiento del permiso que luego no fue, el dirigente piquetero Néstor Pitrola había considerado que “el ministro retrocedió en chancletas”.
   Lejos de amedrentarse, las 173 organizaciones convocantes anunciaron que el viernes 16 repetirán la operación e intentarán nuevamente arribar al histórico paseo. Mientras tanto, el ministro de los elocuentes mostachos se relame contando los días.
   Durante el menemismo, la identificación de la política con la farándula provocó que varios miembros destacados de esa élite trucha incursionaran dentro de esa área pantanosa. Así tuvieron su lugar Scioli, Palito Ortega, Scioli y Reutemann. Actualmente, esta moda parece haberse recobrado con los nuevos nombres de Ethel Rojo, Zulma Faiad y Moria Casán. Si bien para algunos esto constituye una cargada de calibre Everest, para otros es una clara imagen de la renovación de una actividad desprestigiada que busca adquirir otra credibilidad luego de la debacle de diciembre de 2001y principios de 2002.
    Pero a pesar de esto y de las engañosas encuestas, el grueso de la gente mira sin entender semejante parafernalia, pensando que a pesar de tanta alharaca sus necesidades inmediatas quedarán en octubre nuevamente relegadas.


Lo que viene

    Luego de ver el resultado de algunas encuestas privadas, que demuestran que la confrontación contra Duhalde genera temor en los electores (y los aleja), el presidente Kirchner ha optado por bajar los decibeles de su disputa. En las últimas horas aseguró que "ante cada golpe pongo la otra mejilla", dejando a un lado sus habituales ataques. Por si no hubiera quedado claro, juró una y otra vez que estaba encabezando una visita de trabajo y que no quería agredir a nadie: "Vengo en otra jornada de trabajo. No vengo contra nadie".
    El mandatario quiere aparentar una situación de diálogo pero, por lo bajo, pide a algunos de sus colaboradores que rastreen y encuentren pruebas judiciales concretas no sólo contra Duhalde sino contra sus hombres más cercanos para utilizar en caso de ser necesario. En tal sentido, hay en estos días una incesante búsqueda de pruebas documentales y "auditivas" en torno a una causa en Mar del Plata (nº 2.860), que vincula al caudillo de Lomas de Zamora con varios grupos de traficantes de drogas. El oscuro piquetero Luis D'elía estuvo esta semana en esa ciudad balnearia detrás de las nombradas pruebas.
    Lo antedicho, sumado a una batería de medidas nacidas en Casa de Gobierno, otorgan enorme tranquilidad al Presidente, quien ha comenzado a planificar demagógicas acciones a futuro para subir aún más en las encuestas. Por caso, podemos nombrar el aumento de las jubilaciones a $390. Es una suba de 40 pesos para los haberes más bajos y beneficia a 2,5 millones de personas.
    Según comentarios de funcionarios de segunda y tercera línea de la mismísima Casa Rosada, el oficialismo estaría muy cerca de los resultados que busca, encuestas varias mediante. Según cuenta diario La Nación "Si las elecciones del próximo 23 de octubre se realizasen hoy, Cristina Kirchner ganaría ampliamente en la provincia de Buenos Aires, con más de 23 puntos de ventaja sobre su principal rival, Hilda Duhalde, mientras que en la Capital Federal se registraría un virtual empate entre Mauricio Macri y Elisa Carrió, quedando relegado a un lejano tercer puesto el candidato oficialista, Rafael Bielsa.
    Estas son las principales conclusiones de un sondeo realizado por Poliarquía Consultores especialmente para LA NACION, el primero de una serie que el diario publicará durante este tiempo de campaña electoral".
    Duhalde, por su parte, ha confirmado a sus más íntimos que no hablará sino hasta después del 23 de octubre. Luego de esa fecha prometió responder a lo que considera "agravios recibidos desde la Casa de Gobierno". Sabe el caudillo que, por más que gane el oficialismo, necesitarán de él y sus hombres luego de las elecciones para gobernar con cierta tranquilidad.
    La apuesta de Duhalde apunta al 2007 más que a las legislativas del mes que viene. En la mente del caudillo bonaerense aparece Roberto Lavagna como el gran presidenciable, mientras Mauricio Macri sería el candidato a jefe de Gobierno porteño, Chiche se postularía como Gobernadora en la provincia y Daniel Scioli aparecería como refuerzo de esta última.
    Según el sitio Urgente24.info "El 'duhaldismo' conocía desde el martes la encuesta de Poliarquía Consultores para el diario 'La Nación' que otorga amplia ventaja a Cristina de Kirchner por sobre Hilda de Duhalde en la Provincia de Buenos Aires. ¿Por qué el 'duhaldismo' no intentó contrarrestar ese mensaje del 'kirchnerismo' que intenta socavar la confianza de los intendentes que sigan firmes junto a Duhalde? ¿Error de campaña o estrategia? La Casa Rosada ha logrado instalar en la opinión pública los 20 puntos de ventaja de Cristina sobre Hilda, que es el Plan B luego que no pudo impedir que el 'duhaldismo' instalara que sacaría más de 20%. Néstor Kirchner dice que con el triunfo bonaerense asegurado, va por la Ciudad de Buenos Aires, ¿tan 'redondito' transcurre el proselitismo para el Presidente? Buena pregunta para especular durante la semana que viene".  
    Lo cierto es que ya nada es como era y la política parece haberse aggiornado a los tiempos que corren. Los concurrentes a los actos de campaña no parecen demostrar interés personal por lo partidario y los "incentivos monetarios" están a la orden del día. Ya nadie pinta paredes si no le dan dinero a cambio y los debates políticos son inexistentes. Todo parece estar desvirtuado y a nadie parece interesarle.
    No es menor el hecho de que los últimos actos de Cristina y Chiche no sean masivos, sino en estadios cerrados, con transmisión por TV. Pareciera interesar lo cuantitativo por sobre lo cualitativo. Es una real postal de los tiempos que corren.
    Mientras tanto, como decimos cada semana, el país sigue parado.
    Y es lo que hay...