Apelando a la sensibilidad en la sociedad que la inseguridad genera y su vínculo entre delito y drogas, el gobierno nacional y provincial, apelan a la manipulación de la información sobre el combate al narcotráfico otorgando el mote de “desbaratan banda narco” cuando en el relato de la noticia suelen ser detenidos el chofer, dos o tres que estaban en un domicilio o un “tranza” adicto al que se le secuestran algunas dosis de paco (la basura de la producción de cocaína) hechos que no le hacen mella al narcotráfico real.
Para esto, los políticos apelan a otorgar pautas mensuales a periodistas reconocidos y otros que se presentan como “periodista de policiales” pero que suelen prestarse a confundir y desinformar al ciudadano, el poco interés de los ciudadanos colabora a que la mentira sea bien vendida y así se crea una falsa realidad de que se está combatiendo el narcotráfico y en realidad solo se agrava el tema de la inseguridad y se aceita la corrupción entre los verdaderos narcos y los políticos de turno que a la hora de recibir aportes de campaña no les importa quién sea el aportante.
Para que se entienda un poco, una breve definición de narcotráfico, es el comercio de sustancias tóxicas, que engloba la fabricación, distribución, venta, control de mercados y reciclaje de estupefacientes, adictivos o no, potencialmente dañinos para la salud (conocidos comúnmente como drogas).
Los mejores políticos son los que no tienen escrúpulos y por ende “arman” una imagen en base a abrazos, llantos, sonrisas y promesas que sean un acting convincente capaz de atrapar al incauto que desesperado por una respuesta, por justicia o necesidad cree en ese crápula como muchos creen en curanderos o falsos profetas, las técnicas son similares, por eso se ha visto en las últimas elecciones como se ha dado una importante participación política a pastores que saltaron del testimonio a asegurar que Dios les pidió que hagan política.
Ni la ministro Patricia Bullrich, ni el ministro Cristian Ritondo han podido mostrar haber desbaratado una organización narco, el secuestro de algún cargamento no implica desbaratar, así como las empresas tienen un margen de pérdida, las organizaciones narcos lo tienen más fácil para que se entienda.
Ejemplos sobran, los últimos procedimientos al respecto, como el del Golf Country de zona norte es un ejemplo donde no se detuvo a nadie importante y hay más dudas que certezas respecto a poder acreditar el delito de narcotráfico a los prófugos, la totalidad de los procedimientos han terminado en el acto del decomiso, pero en ninguno se investigó la procedencia, de la droga, mucho menos donde se produce.
Lo más cercano que se estuvo de ir por un cartel fue el procedimiento en el Bar Los Angelitos, donde vincularon a empresarios colombianos, pero al avanzar la investigación y encontrar vínculos de inversiones con políticos oficialistas no se habló más del tema, raro en un gobierno que por el secuestro de 5 ladrillos o menos de marihuana monta un espectáculo.
Necesitada de buena prensa, María Eugenia Vidal, desoye los reclamos de vecinos que le solicitan audiencia por temas de seguridad y apela a algo que los gobierno anteriores han hecho antes y es atraer a referentes de ONG a los que promete apoyar en sus reclamos y nada mejor que una foto de una madre contra el paco, para vendernos su lucha contra el narcotráfico, con esto la gobernadora nos toma a todos por tarados, matando las hormigas dispersas no se termina con el hormiguero, es solo marketing que no soluciona nada, sirve para el aplauso corto.
El último derrumbe de un supuesto “búnker narco” en la localidad de Longchamps, es otro muestra clara e irrefutable de manipulación, foto con madres a los martillazos contra una pared sin revocar, donde los supuestos narcos viven en la máxima pobreza, a los que se les secuestro según informa el propio ministerio 2400 dosis de paco, nos demuestran que en la lucha se gasta más dinero en la investigación que en el daño económico que se le causa a los narcos, un chiste de mal gusto, ya que si bien parece mucho 2400 dosis, seguramente en otras propiedades de la zona exista el doble de esa cantidad y mañana nada haya cambiado, ¿de qué investigación seria se habla? Sobre una propiedad precaria, un rancho, donde no hay nada oculto.
Es preocupante que a la fecha desde el ministerio de seguridad y la gobernadora se conformen con el trabajo de la Delegación de drogas Lomas de Zamora, que por los resultados negativos son una dependencia muy cara y con una estadística de chinchón -10, por el caudal de droga circulante en Lomas de Zamora y que no es paco, es decir, arrestan al adicto dealer que no puede “colaborar”, mostramos el circo y por detrás pasan toneladas de cocaína un negocio más redituable para todos.
Alguna vez hace muchos años tuve contactos con algunas madres de la ONG Madres Contra el Paco, las mismas compartían esto que describo y se quejaban de la falta de apoyo de los gobiernos en su lucha, desconozco qué ocurrió en el medio y no escribo de lo que no sé, para que hoy estas madres apoyen a un gobierno que ha destruido todo lo que existía para atender adicciones, tal vez, es muy seductor que el gobierno haya expropiado un coqueto chalet al que denominaron mansión a un pequeño narco, donde tampoco se investigó para seguir la ruta de la droga.
Fundo mi nota y opinión en las estadísticas criminales, en el 98% de los hechos delictivos los aprehendidos poseen alguna droga, la más común marihuana, cocaína, paco y le siguen las drogas como LSD, Metanfetaminas y algún medicamento veterinario muy común.
El desconocimiento del común de la ciudadanía, hace que se pierda el foco del combate contra la droga, los vecinos acostumbran a ver en los barrios “kioscos” donde un adicto vende para poder sostener su adicción y cuando lo allanan y detienen creen que ahora habrá un lugar menos de venta de drogas, NO señores, esos adictos que compraban irán a la vuelta y el barrio, la zona seguirá igual.
Lo que los medios no te informan, menos el gobierno, es que las organizaciones narcos no están dirigidas por dealers perdidos como el tranza del barrio, funcionan como verdaderas empresas, con gente que trabaja para que sus ingresos crezcan, así, los lugares más seguros para la venta de drogas son los prostíbulos y privados, donde los clientes pasaron de buscar estímulos para sus adicciones y el sexo en segundo plano y esto por dar un ejemplo, hay muchos lugares donde se vende más droga que en las villas o barrios humildes, pero claro no hay sospechosos haciendo cola.
Esta mentira política, esta práctica habitual del ciudadano de creer con fe lo que le informan grandes medios que para sostenerse su fuente principal es la paua oficial, debería llevar a reflexionar a quien consume la verdad de esos medios.
Para concluir, si la estadística de los aprehendidos ha llegado a que un 98% tienen en su poder alguna droga, es evidente que la “lucha contra la droga” es simplemente retórica.
No estoy en contra del gobierno, quiero sí que cumplan sus promesas, pero con compromiso real, que no acepten dinero de dudosa procedencia para los aportes, que no dejen las investigaciones sin seguir la ruta de la droga, del dinero y los contactos, quiero un gobierno que le reclame a las divisiones específicas de drogas que dejen de vender humo y trabajen de verdad.
Obvio que para que esto funcione es muy importante el rol de la justicia federal, porque no cierra la forma de trabajo de fiscales y jueces federales, que parece que solo pueden ver lo que los está por aplastar y entonces se acuerdan de hacer su trabajo, eso también es un trabajo de los gobiernos que deben promover leyes y los mecanismos que sancionen y remuevan a los funcionarios judiciales que por corrupción o pereza no trabajan (El Sindical).