La Constitución Nacional, en su Artículo 41, dice: “Todos los
habitantes gozan del derecho a un ambiente sano, equilibrado, apto para el
desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las
necesidades presentes sin comprometer la de las generaciones futuras”. Por
su parte la Ley 12.257, en su Artículo 1º, establece el régimen de protección,
conservación y manejo del recurso hídrico de la provincia de Buenos Aires.
Esta introducción es necesaria para recordársela a
las autoridades nacionales de Minería y a las del gobierno bonaerense, quienes
ignorando (por no utilizar un término escatológico) estas leyes nacionales y
provinciales, están acometiendo ahora contra el sistema de Sierra de la
Ventana, autorizando la prospección y la instalación de empresas extractoras
de minerales en dicho sistema serrano (Ver volante al pie), ya que se habrían detectado yacimientos
de oro, plata y cobre en la zona.
En el mes de julio de 2005, el Ministerio de la
Producción de la provincia declaró “Reservas Mineras” a dos fracciones
ubicadas en los distritos de Tornquist y Saavedra (41.892 hectáreas) y Benito
Juárez y Azul (8.470 hectáreas). En ellas -según la resolución ministerial
impulsada por la Dirección Provincial de Minería- la Autoridad Minera podrá
realizar “tareas de investigación geológico-mineras para lograr el
conocimiento de los recursos minerales que alberga y, en base a ello,
promocionar su desarrollo y aprovechamiento racional” (Boletín Oficial,
17/8/05), resolución que incurre en la omisión de preocuparse por las graves
consecuencias ambientales que acarrea la minería a cielo abierto, que en
realidad termina en un “aprovechamiento irracional”.
Tal parece que dichas autoridades ya estaban en
conocimiento de las riquezas mineras cubiertas por esos suelos antes de emitir
aquella resolución, ya que según vecinos de esas zonas por esa época se habían
escuchado fuertes detonaciones, y además un grupo de antropólogos que residen
en Sierra de la Ventana encontraron rastros de que ya se habían hecho algunas
exploraciones.
Fue así como se recorrió un corto trecho entre
aceptar de buen grado la acometida de las multinacionales mineras para repetir
lo que ya están llevando a cabo en la Cordillera de los Andes, desde Jujuy
hasta Santa Cruz –tal como habíamos señalado en la nota “El saqueo de
las multinacionales mineras-Asalto a la Cordillera”-; abrir paso a la
voracidad de esas empresas y conjugarlas con la propia, ya que no se puede
descartar que todos los corruptos resortes necesarios para lograr esos fines,
sean los funcionarios que sean, ya han sido debidamente “aceitados”; y
emitir los decretos necesarios para allanarles el camino. Falta saber cuál es
la empresa minera que probará el nuevo bocado constituido, esta vez, por el
sistema de Sierra de la Ventana.
Claro que no les resultará sencillo, tanto a los
explotadores mineros como a quienes les permiten el saqueo y la contaminación,
ya que los vecinos autoconvocados de las localidades aledañas, Tornquist y
Saavedra, ya han emprendido la pelea. En tal sentido, y desde que las primeras
noticias sobre el tema llegaron a sus oídos, los habitantes de esas localidades
y de Sierra de la Ventana y de Villa Ventana comenzaron a reunirse, organizarse
y denunciar las intenciones de emprender actividades mineras en las sierras, en
las que se encuentra el Parque Provincial “Ernesto Tornquist”, el cual forma
parte del sistema de áreas protegidas de la provincia de Buenos Aires.
Los “Vecinos Autoconvocados de la Comarca”,
quienes ya cuentan con una casilla de correo electrónico (ambientecomarca@gmail.com)
para recibir adhesiones e intercambiar información, comenzaron por editar y
distribuir una cartilla informativa con la difusión del problema y sus
consecuencias, además de elevar petitorios a las autoridades municipales y
provinciales. Es así como, por ejemplo, le recuerdan al intendente de Tornquist
que ese propio municipio firmó documentos que protegen el ambiente natural,
como la Ordenanza Municipal 713/91 o la Resolución del Honorable Concejo
Deliberante 36/91, por la que se declara a Tornquist “municipio ecológico”
y se prohibe el transporte de sustancias tóxicas.
Cabe recordar las consecuencias de la minería a cielo
abierto: voladura de cerros enteros con dinamita; depósito de productos químicos
en gigantescos basureros al aire libre; utilización de cianuro, arsénico y
otros químicos tóxicos y venenosos para separar los minerales, proceso que
también requiere de enormes volúmenes de agua que se contamina a su vez con
esos químicos y sus sedimentos; destrucción del patrimonio ecológico,
agrario, turístico y de la reserva natural de la zona –paisajes, flora,
fauna, etc.- y otras maravillas por el estilo. Además, si este proyecto se
concreta, se verían gravemente afectados por la contaminación las napas y los
embalses que van hasta el dique “Paso de Piedra”, donde se abastece de agua
potable la ciudad de Bahía Blanca.
Por supuesto que nada de esto afecta a las autoridades
nacionales, provinciales y municipales, que sólo escuchan el ritmo impuesto
desde la actual mansión pingüinera, la otrora Casa Rosada, donde repiten
incesamente que la nueva panacea argentina es la “megaminería”. Los mismos
que miran hacia otro lado cuando las multinacionales del sector halagan sus
bolsillos –algo que viene muy bien frente a un año electoral en el que hay
que financiar muchas campañas, lícitas y de las otras- y evitan escuchar el
clamor de los miles de perjudicados que, de concretarse una explotación minera
con las características apuntadas, verán a su hábitat natural convertido en
un nuevo páramo.
Y ahora que las empresas mineras que se abalanzan
sobre la Argentina acometen contra las escasas zonas serranas de la provincia de
Buenos Aires, ¿cuál será la próxima en la mira?. ¿Tandil?. ¿Sierra de los
Padres?. El tiempo lo dirá.
En tanto, la Asociación Ambientalista Raíces de
Ventania, una subcomisión de los Vecinos Autoconvocados de la Comarca contra la
explotación minera, realizarán el próximo 6 de febrero, a las 21 horas, en la
Escuela Nº 6 “Juan Bautista Alberdi”, de Sierra de la Ventana, una Asamblea
Extraordinaria a la que invitan a autoridades, vecinos y medios periodísticos
en general, en la cual tratarán estas cuestiones y el rumbo a seguir para
oponerse a la explotación minera en ese sistema serrano.
Gracias precisamente a la movilización de sus
vecinos, Esquel hasta ahora lo logró. Ojalá que ello se repita en Sierra de la
Ventana y en cualquier otra zona del país donde las multinacionales mineras
pretendan poner el pie, saqueando y contaminando el suelo.
Carlos Machado
Volante distribuido por los vecinos