El alto directivo periodístico del diario "La Nación" es llamado al teléfono. Del otro lado la voz del vocero oficial suena cordial. Luego de los conciliábulos de rigor, Miguel Nuñez introduce como al pasar el tema que originó la llamada: ¿Estará en tapa el acto en que participó el Presidente Nestor Kirchner? El directivo intenta contestar con evasivas. No es fácil su situación. El más que centenario diario, que alguna vez fue de los Mitre y Saguier, hoy jaqueado financieramente por dos tradicionales bancos extranjeros, apostó decididamente en favor de Ricardo López Murphy en las elecciones del 27 de abril. Antes que Carlos Menem decidiera perder por abandono en lugar de caer por nocaut técnico tirando la toalla y no concurriendo al ballotage, Claudio Escribano se reunió con el presidente virtual que consagraban las encuestas, que había salido segundo en la primera vuelta y le exhibió un pliego de condiciones, que de ser aceptadas implicaban una rendición incondicional. No hablaba como representante de la vieja oligarquía extinguida de la cual La Nación fue un vocero consecuente. Eran los intereses de los bancos y las privatizadas, el Sr. Manuel Sacerdote escribiendo el libreto que recitaba con entusiasmo Claudio Escribano, el amigo incondicional de la dictadura asesina, el que coincidía con el Council de las Américas de que el actual gobierno no duraría más de un año. Eso llevó a que José Claudio Escribano fuera enviado a una larga vacaciones al extranjero, con eventuales notas para cubrir las apariencias. El objetivo era recomponer la relación del diario con los ganadores electorales.

    La llamada, no obstante, parece describir un modus operandi que, con mayor o menor intensidad, se ha repetido con matices y variantes en estos meses en que el gobierno tiene un apoyo cercano al 80%.


Textual

   La revista TXT publicó en su número 2, del 28 de marzo del 2003 la nota "Crónica de un engaño" que llevaba como copete "Kirchner paga su campaña con fondos públicos" y que en un párrafo decía: "Kirchner abona para que el canal de noticias (Crónica) cubra sus actos y eventos, después los presente como noticias y, finalmente, los facture como 'cobertura de actos' o 'publicidad'. Es una doble trampa. A los contribuyentes de la provincia: el gobernador utiliza fondos públicos para su campaña personal. A los televidentes: Crónica no les informa de que se trata de espacios publicitarios". La nota fotocopiaba las facturas cobradas por los espacios contratados.
   En el libro "Nestor Kirchner Un muchacho peronista y la oportunidad del poder" de las periodistas Valeria Garrone y Laura Rocha, que acaba de aparecer, se dice en la página 175: "Tras varias charlas con sus editores, la revista dejó de acceder a las fuentes gubernamentales".


Escuchas de radios

   Los periodistas de las principales radios reciben habituales llamados del vocero o directamente del funcionario afectado, cuando algún comentario no es del agrado de los involucrados. Aníbal Fernández buscó telefónicamente, en distintos lugares, a un conocido columnista radial y de la prensa escrita con el pretexto que el comentario que había realizado "lo había dejado calentito". Llamativamente o no, las críticas de Elisa Carrió sobre este tema no fueron recogidas por los medios presuntamente progresistas y sólo fueron consignados por Infobae, Ambito Financiero y tardíamente por La Nación. Sostuvo que "en los últimos tiempos, cuando un periodista tiene información que el gobierno no quiere que se publique, el medio es objeto de una llamada telefónica". Agregó: "Esto no sucede con un periodista, sucede con la mayoría, hasta con los movileros, y es mejor advertirlo ahora, porque afecta a la República, no hay un sistema Republicano claro. Presionan para generar autocensura, vos te sentís mirado y escuchado por el poder y te vas callando". Luego insistió en que "es cierto que llaman a periodistas para callarlos". Concluyó afirmando que "en las provincias, con un gobernador exitoso, de esos que ganan las elecciones con el 60 o 70 %, no van a encontrar un sólo medio que pueda decir algo malo, porque le sacan la publicidad".

    La Asociación Periodistas no ha hecho hasta hoy, ningún comentario


Día D

    Con algunas pruebas y mucho apremio periodístico, Jorge Lanata puso en dificultades al interventor del PAMI, Juan González Gaviola. Dispuesto a replicar en terreno más favorable, el cuñado de Bordón fue, 48 horas más tarde al programa de Luis Majul, donde su táctica fue la de separar al ex creador y director de Página/12 del autor del informe Andrés Klipphan. Esto originó la respuesta el domingo siguiente, donde en un trabajo impecable dejaron al Interventor en una posición de mentiras reiteradas que, en un país menos acostumbrado a la impunidad, hubiera derivado en su renuncia. Pero lo llamativo fueron las declaraciones de Lanata y Klipphan sosteniendo que no recordaban haber recibido nunca tantas presiones como en la semana transcurrida entre los dos programas de Día D. Las invitadas Sylvina Walger y Elisa Carrió percibieron las enormes tensiones acumuladas, lo que llevó a la primera a realizar una crítica muy moderada del gobierno y a Elisa Carrió sostener, en el programa de Joaquín Morales Solá, que el viernes anterior había fuertes rumores de levantamiento del programa. Consultado para ésta nota, el periodista Reynaldo Sietecase, del equipo de Día D, relativizó la situación, sosteniendo que si no hubiera Gaviola contestado en el programa de Luis Majul, afirmando que Klipphan había comprado "carne podrida" el tema hubiera quedado concluido. Las productoras Andrea Rodríguez y especialmente Silvina Chaine le confesaron a Silvina Walger: "No sabes lo que ha sido". Gisela Marziotta expresó al aire: "No sabía que me puedo quedar sin trabajo".

    Finalmente fue Andrés Klipphan que describió descarnadamente lo sucedido en la revista XXIII: "El mensaje del Presidente Néstor Kirchner llegó desde un teléfono de la Casa Rosada hasta la más altas autoridades de América T.V y desató una cadena de presiones que el periodista Jorge Lanata expuso con ironía al abrir la edición del domingo 12 de su programa día D: 'Buenas noches, presidente Kirchner. Buenas noches, vocero presidencial Miguel Nuñez. Buenas noches, autoridades del canal'".

    Pero ¿ Que decía el mensaje? "Si ustedes insisten con ese tema ( González Gaviola y el PAMI), nosotros no podemos considerarlos amigos"


Pizza con Champagne

   A pesar de los moderado de sus críticas, Sylvina Walger recibió al día siguiente el llamado de su amigo Julio Bárbaro, que con tono exaltado le recriminó: "Como decís que nosotros apretamos periodistas". La respuesta serena fue: "Seguramente vos no Julio, pero sería bueno que averigües". Tal vez, en ese momento, aumentaron las dudas que ya había dejado reflejadas en el prólogo del libro comentado que llamativamente apareció sin su firma. Ahí decía: "La relación con los medios (tema del capítulo 10), la orden de no hablar en off con la prensa, la concentración en si mismo de todas las decisiones, consecuencia de los dimes y diretes que mantuvo con la prensa durante la campaña, dejan un signo de interrogación abierto sobre los tiempos por venir".

    Entrevistada por el programa El Tren, que se transmite diariamente por AM 740 Radio Cooperativa, la autora del libro que caracterizo con su título una época dijo: "Creo que hay más ensañamiento con los periodistas amigos que los que son enemigos. A esos no les pasan bola, les molesta más que la gente presuntamente amiga haga crítica constructiva que lo que diga Jorge Asís. El turco va a poder pasearse por todos los programas diciendo cuanta cosa se le pase por la cabeza y nadie lo va a llamar ........... Julio Bárbaro se comunicó por teléfono diciéndome: '¿Cómo nos hacés esto de decir que hay presiones sobre los periodistas?' Yo me quedé impresionada, porque era lo que yo llamo 'la orga', era un poco ese criterio."

    Es preciso recordar que a pesar de haber votado el 27 de abril a Ricardo López Murphy, la irónica periodista y socióloga tiene un moderado optimismo sobre el accionar del gobierno.


El Clarín estridente sonó

   El diario Clarín tiene motivos para estarle agradecido al gobierno anterior. La pesificación de las deudas locales fue una parte del negocio. El gobierno de Kirchner acudió en su ayuda a través de la ley 25750 que establece que "a partir de la entrada en vigencia de la presente ley, la propiedad de los medios de comunicación que se definen en el artículo 3° de la misma, deberá ser de empresas nacionales, permitiéndose la participación de empresas extranjeras hasta un máximo del 30% del capital accionario y que otorgue derecho al voto hasta el mismo porcentaje". Andrew Graham - Yool desde el diario The Buenos Aires Herald la llamó ley Clarín. Se evitaba de esta forma que los acreedores titulares de los derechos de las deudas multimillonarias contraídas por el "gran diario argentino" se quedarán con la empresa.

    Una devolución de gentilezas fue la remoción del jefe de la policía federal Roberto Giacomino. El periodista Gerardo Young venía investigando las irregularidades en la licitación del Hospital Churruca. Clarín en lugar de publicarlas se las ofreció al gobierno, con la que Beliz tomó la drástica decisión. Clarín sólo se reservó la exclusividad en el anuncio de la remoción del jefe policial.

    En cambio, en fuentes cercanas al gobierno, se afirma que la investigación de Clarín sólo precipitó la decisión, sin ninguna concesión de parte del diario fundado por Roberto Noble.


La situación de los medios

   Si Clarín, cuya tirada duplica a La Nación, se encuentra en una situación de endeudamiento de extrema gravedad, puede imaginarse el cuadro que padece "La tribuna de doctrina". Fuertemente endeudada con el City y el Boston, los manejos societarios carecen de la mínima transparencia. La propietaria del diario en una empresa off shore MNMS Holding con domicilio legal en Aruba. Está integrada por la familia Saguier y Barton Corp. Esta última nació en las Islas Caimán y se desconoce a quien pertenece.

    Si se tiene en cuenta que el precio del diario no cubre los costos de su edición, la publicidad, y en especial la gubernamental es fundamental. Es el oxígeno que permite seguir existiendo y hacer negocios colaterales que son los verdaderos objetivos de los grandes medios.

    En la larga recesión iniciada en el segundo semestre de 1998, la torta publicitaria total representa menos del 10% del total del endeudamiento de los medios.

    En el Santa Cruz gobernado por Nestor Kirchner, como en las provincias y en el gobierno nacional, quienes deciden mantener una visión independiente respecto al accionar del gobierno, quedan fuera de la pauta publicitaria estatal.

    Y en el caso del acuerdo de Kirchner con Crónica Noticias, el convenio excluyó a los opositores políticos de la pantalla del canal. Dice TXT: "Un periodista de Crónica acreditado en el Congreso visitó el despacho del diputado frepasista y principal denunciante de Kirchner, Rafael Flores, y le avisó: 'Rafa, lo siento, a mi me encanta hacerte notas, pero vos y Ricardo Paterson (legislador radical) ya no pueden salir más'".


Cuando todo suena a Perón, es porque suena Perón

   Nestor Kirchner, como avezado lector del fundador de su partido debería recordar algunas viejas , remanidas y certeras anécdotas.

    Es conocida aquella expresión de Perón: "Cuando teníamos todos los medios en contra ganamos en 1946. Cuando los tuvimos todos a favor en 1955, fuimos derrotados"

    Arturo Jauretche lo definió con precisión pocos meses antes del 16 de septiembre: "Cuando todo suena a Perón, es porque suena Perón".

    Se cuenta que cuando Eduardo Duhalde afirmó resignado: "Que sea lo que Dios quiera", cuando superado por las circunstancias había decidido no leer los diarios para evitar volverse loco. Su único material de lectura eran las encuestas. En cambio Néstor Kirchner ,según La Nación del 12 de octubre: "Puede llegar a enfurecerse en la soledad de Olivos con algunas notas y transmitirles ese malestar a los hombres que integran su círculo íntimo. Le importa tanto que durante su gira europea, en París y antes de la entrevistarse con Jacques Chirac, llamaba a Buenos Aires porque estaba muy mal por una nota de uno de los diarios. Además de la rutina de la mañana, el Presidente recibe todo el día información por medio de su vocero y de su equipo de comunicación".

    El gobierno tiene todo el derecho de salir a cruzar a los periodistas y a los medios, que en su opinión suministran información equivocada o tendenciosa. Pero se debe hacer a la luz pública, propiciando el debate y de frente a la audiencia. Todo lo que se haga en las sombras y en privado, más allá del tono campechano o autoritario que se utilice, se asemeja o es a un apriete.

    Un encumbrado periodista y autor de un libro exitoso, le aconsejó al gobierno "Olvídense de los medios. Dedíquense a gobernar".

 Hugo Presman