La coalición Juntos por el Cambio apura el armado de las listas de candidatos a senadores y diputados en la segunda provincia de mayor peso electoral del país, Córdoba, donde tanto el PRO como la UCR son optimistas respecto de la ventaja que pueden tener sobre un peronismo hasta ahora dividido, incluso en un escenario de internas.
Con más de 2,7 millones de votantes, la provincia de Córdoba representa al 8,6% del padrón nacional, detrás de Buenos Aires, que concentra el 37% con más de 11,8 millones ciudadanos registrados para votar, lo que la convierte siempre en "la madre de todas las batallas" electorales.
En la alianza opositora miran encuestas de imagen y de intención de voto que le dan ventaja sobre el peronismo cordobés que representa el gobernador Juan Schiaretti, con el Frente de Todos en tercer o cuarto lugar, según deslizaron a la agencia Noticias Argentinas fuentes del espacio.
En ese contexto, los principales dirigentes provinciales de Juntos por el Cambio confían en que esa ventaja se mantendría incluso si las listas tuvieran que definirse en las elecciones primarias (PASO), por lo que continúan las negociaciones entre la UCR y el PRO pero ninguno de los dos le huye a la interna.
"Hay conversaciones con todos, que las está manteniendo (Gustavo) Santos", señaló a NA un dirigente del PRO cordobés, en referencia al ex secretario de Turismo de la Nación, que cuenta con el apoyo público del ex presidente Mauricio Macri y que aspira a encabezar la lista de diputados con el ex embajador Luis Juez como candidato a senador.
Las fuentes consultadas señalaron que esa fórmula "es una posibilidad" pero que por estás horas "están tratando de que el radicalismo se sume", algo que parece difícil debido a la decisión del radicalismo de pelear por el liderazgo de las listas.
En los últimos días, frente al acuerdo entre Santos y Juez, la UCR cordobesa empezó a cerrar filas y a motorizar una lista pura radical encabezada por el actual jefe del interbloque de diputados de Juntos por el Cambio, Mario Negri, como candidato a senador, y el concejal Rodrigo de Loredo como diputado.
En el PRO, según supo este medio, hay quienes consideran la disputa se resolvería si Santos fuera en el tercer lugar de la lista de diputados y le permitiera encabezar a un radical, pero al mismo tiempo creen que Negri está decidido a dar pelea por la cabeza de la lista de senadores.
En tanto, en la UCR de Córdoba que preside Marcos Carasso, apadrinado por Negri, afirman que el actual jefe del interbloque opositor del Congreso tiene predisposición a pasar al Senado pero solo si el radicalismo va unido a la pelea con el PRO, algo que aún no está claro.
El radicalismo cordobés atravesó varias pujas internas en los últimos años que incluso lo llevaron a perder en 2019 la intendencia de la Ciudad de Córdoba por la ruptura que sufrió el partido durante una puja entre Negri y el entonces jefe comunal Ramón Mestre.
"Negri no quiere a repetir lo de 2019, si no hay unidad, se queda donde está", indicaron fuentes radicales a Noticias Argentinas, al tiempo que subrayaron que, por otro lado, si el dirigente saltara al Senado la UCR podría perder la presidencia de la principal bancada opositora de Diputados.
A pesar de las diferencias que se mantienen, Juntos por el Cambio empieza a darle forma a sus listas con la confianza que le insuflaron las últimas encuestas y que muestran una consolidación del voto "anti kirchnerista" que ya se había manifestado en compulsas anteriores y que en 2015 le dio la Presidencia a Mauricio Macri.
Además, el peronismo cordobés se mantiene por ahora dividido: Schiaretti apuesta por la candidatura para el Senado de su esposa, Alejandra Vigo, y el Frente de Todos tiene por el momento como único representante al actual senador Carlos Caserio.
En la alianza oficialista algunos se entusiasmaron con la posibilidad de un acuerdo electoral tras el último acto oficial que compartió el presidente Alberto Fernández con Schiaretti, quienes intercambiaron elogios.
Sin embargo, en la oposición observan que tanto Negri como Juez tienen un nivel de conocimiento mayor que el de los potenciales candidatos de Schiaretti y del Frente de Todos y confían en que, en cualquier escenario, estarán en ventaja.