"Es empezar otra etapa del Gobierno", resumió el presidente Alberto Fernández al reingresar a la Casa Rosada, luego realizar un mensaje de arenga en una Plaza de Mayo colmada por militantes peronistas.
Con una disfonía notoria, tras un eufórico discurso de casi 20 minutos, el Presidente se detuvo a dialogar unos minutos con los medios acreditados en Casa Rosada, entre ellos agencia Noticias Argentinas, y precisó que el nuevo periodo de gestión apuntará a "terminar de recuperar la economía, que ya se está recuperando mucho".
Al ingresar a la Casa de Gobierno por la entrada de Balcarce 50, Fernández puntualizó: "Garantizar que el empleo genuino se cree, ir terminando con los planes para que empiece la gente a tener empleo genuino".
"No olvidarnos de la importancia que tiene en el tiempo que vivimos la educación, la salud pública, la ciencia y la tecnología", enfatizó Fernández.
En la previa del acto por el Día de la Militancia, el jefe de Estado se dirigió hacia la terraza de la sede de Gobierno para observar el clima de La Plaza de Mayo junto al canciller, Santiago Cafiero, y el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello.
Luego, Fernández transitó los metros que lo separaban del escenario montado en la mítica plaza junto a sus dos hombres de extrema confianza, Cafiero y Vitobello, además del secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Julio Vitobello.
Una vez de regreso a su lugar de trabajo, el jefe de Estado afirmó que la próximo etapa del gobierno "tiene mucho de frentetodismo".
Ante la consulta respecto de cómo será la convocatoria a dialogar con la oposición, respondió: "Ya los invité a hablar, los invité a opinar y hay una mesa. Las leyes se resuelven en el Congreso".
"Hay cinco leyes que para mí son muy importantes y que tiene que ver con el futuro de la Argentina: la ley de hidrocarburos, la ley agroindustrial, la ley de compre argentino, la ley de electro movilidad, la ley de industria automotriz", detalló Fernández.
En ese sentido, el Presidente afirmó que son leyes que el Ejecutivo nacional está "esperando para poder movilizar la economía mucho más".
Al cierre del diálogo con los periodistas, el Presidente se refirió a las múltiples críticas que recibió el acto por parte de la oposición: "No es vencedor el que gana, es vencedor el que no baja los brazos".
Con Alberto Fernández como protagonista absoluto de la movilización que organizaron sindicalistas, movimientos sociales y miembros del Ejecutivo, el Ejecutivo nacional buscará dar vuelta la página y poner en marcha una nueva etapa.
La mística peronista se adueñó esta tarde de las inmediaciones de la Casa Rosada, donde los militantes asistieron con sus banderas para escuchar un encendido discurso que comienzo puntualmente a las 17:00 y se extendió por casi 20 minutos.
En la espera del cierre de la movilización, los militantes disfrutaron de un show en vivo de la mano del grupo de cumbia "Ráfaga", que puso música y clima de festejo con sus clásicas canciones.
El Presidente ingresó a la plaza minutos antes de las 17:00, donde fue recibido en medio cánticos y la euforia de cientos de miles de personas que concurrieron a la actividad.
Si bien en un principio estaba previsto que los convocantes e integrantes del Gabinete nacional siguieran el discurso, de quien fue el único orador, sentados en primera fila, a último momento se decidió que permanecieran parados para que los militantes pudieran acercarse más al escenario principal.
Entre los primeros ministros en llegar a la plaza se encuentran Matías Kulfas (Desarrollo Productivo), Martín Soria (Justicia y Derechos Humanos), Martín Guzmán (Economía) y Juan Cabandié (Ambiente y Desarrollo Sostenible), mientras que el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, se sumó cuando el Presidente ya llevaba unos minutos de discurso.
También dijeron presente el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; la titular de AySA, Malena Galmarini; el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti; entre otros.
Al concluir la actividad, retumbó en la mítica plaza la melodía de la marcha peronista, cuya letra fue entonada por los militantes que asistieron a conmemorar el 49 aniversario del regreso del ex presidente Juan Domingo Perón a la Argentina, tras su largo exilio luego de haber sido derrocado en 1955.