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La grieta que divide a buena parte de los argentinos dificulta los análisis desapasionados. No se trata de igualar la conducta de todos los políticos. Por caso, frente a la corrupción, el atropello a las instituciones o las violaciones a los derechos humanos no debe haber posiciones ambiguas. Pero la polarización no tendría que hacernos perder de vista que el quehacer político no se resume a estar cerca de uno de los polos, sino que exige tener una mirada de conjunto, más allá de las facciones.
El señalamiento viene a cuento del reciente nombramiento por parte del Papa Francisco del ministro de Economía, Martín Guzmán, como miembro de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales, un organismo muy prestigioso del Vaticano que, junto con la Pontificia Academia de Ciencias, congrega a más de medio centenar de premios Nobel, como parte de personalidades de diversas disciplinas y entre las que se contaron en sus inicios figuras como Galileo Galilei.
Es que no faltaron quienes al conocerse la designación -que sin duda implica un espaldarazo para el funcionario- lo interpretaron con un respaldo al gobierno. En particular, a un gobierno peronista y, específicamente, kirchnerista. Lo cual confirmaría -siguiendo ese razonamiento- la simpatía del pontífice con la fracción gobernante. En definitiva, con este nombramiento “cerraría” todo: un “Papa peronista” que apoya a un gobierno peronista.
¿Es así? Por lo pronto, hagamos algo de historia. A poco de asumir la presidencia Alberto Fernández viajó a Roma para entrevistarse con Francisco. En esa ocasión le pidió ayuda, especialmente ante la renegociación de la deuda con el FMI. Colaboración que nunca pidió su antecesor, Mauricio Macri, en ninguna cuestión. El pontífice accedió y allanó encuentros con la titular del organismo financiero, Kristalina Giorgieva.
Pero, sobre todo, Francisco enarboló las banderas de una consideración ética del endeudamiento de los países pobres, siguiendo la línea trazada por Juan Pablo II, quien sostenía que las deudas no deben pagarse sobre la base de sacrificios insoportables para los pueblos. Es verdad que la Argentina no puede considerarse una nación pobre, pero sí en graves dificultades, profundizadas por la pandemia.
En ese marco, el Papa tuvo varios gestos de respaldo hacia Guzmán, a quien había conocido antes de que llegara al ministerio, cuando acompañó a su mentor académico, el premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, a una visita al pontífice. En aquel entonces, Stiglitz, le transmitió a Francisco su deseo de colaborar en una iniciativa papal para formar economistas con una visión humanista.
Pero tanto apoyo al ministro no tiene que ver con el hecho de que el gobierno que integra sea de signo peronista o kirchnerista, sino con el propósito de ayudar al país a que resuelva el problema de la deuda para -a partir de allí- empezar a ordenar su economía. Porque -salvo la izquierda dura- todo el arco político dice que un acuerdo es el punto de partida para comenzar a sortear la crisis.
Por supuesto que no se trata de aceptar cualquier acuerdo. Aunque no exento de sacrificios, debe ser soportable para los sectores más desfavorecidos. Pero un no acuerdo tendría consecuencias muy malas. Por eso, en las cercanías de Francisco son contundentes: “El Papa está pensando en el destino de todos los argentinos, especialmente en el de los pobres, no en un gobierno”.
En el espaldarazo a Guzmán hay también una clarísima señal para La Cámpora y el Instituto Patria que hace rato que les gustaría ver rodar la cabeza del ministro. La propia Cristina Kirchner también lo anhelaba, aunque ahora -pasadas las elecciones- considera que los beneficios de un eventual acuerdo con el FMI serán mayores que el costo político entre sus filas.
A partir de este nombramiento, los ultra del cristinismo deberán tomar nota de que Guzmán cuenta con el respaldo del Papa. Dirigentes sociales como el mismísimo Juan Grabois, que se declara gran admirador de Francisco, deberá pensar más de una vez antes de hacer declaraciones incendiarias acerca de la renegociación con el Fondo Monetario.
Mientras tanto, Francisco no se librará de las críticas desde un lado de la grieta. No se trata de optar por “Corea del Centro”, sino de abrazar las legítimas posiciones que cada uno tiene y de criticar con fuerza todo lo mucho que hay para criticar. Pero también de pensar que por encima de todo está el país con todos sus ciudadanos.
Como de costumbre lo de Bergoglio, lamentable. Cuando será el día que se dedique exclusivamente a hablar de Cristo y la virgen y se deje de romper las pelotas con su enfermiza ideología. Ideología que en momentos de Cristo faltaban casi 19 siglos para que se conozca.
Joseph Stiglitz, ganó el premio nobel con otros economistas, presentando la teoría de " la asimetría en las licitaciones " es decir, nada en cuanto a conducir la economía de un País. En cuanto a la economía propiamente dicha, tanto Stiglitz como su edecán el sr. Guzmán, son anti-mercado, es decir descreen del capitalismo, y son keynesianos a ultranza. En cuanto al mercado, Stiglitz lo dice a cuanta persona lo quiera oír, " la mano invisible de Adam Smith " en la riqueza de las naciones, no funciona, ya que no existe. Y Guzman lo repite, diciendo además que no piensa en bajar el gasto publico. Cuando vino al País, J.S.-, y cuando presentó su libro, Cristina estaba fascinada. Y cuando no, el sr. Bergoglio, jesuita, ya que son los seminaristas, quienes reciben cuando estudian, una terrible vacuna anti capitalista, anti liberal, está con esta gente, y como el vulgo repite, es un Papa peronista. Ya se rodeó de Grabois, y hoy de Guzmán. Tendrá algún elixir infalible para nuestra economía? Ya lo avisó el Obispo Novak, en EEUU quien se dedicó al estudio de la economía, apenas recibido sacerdote, ya que le resultaba difícil entender como el capitalismo, que había sido el que sacó al mundo de la pobreza, fuera tan castigado por los jesuitas?? Y descubrió que el Capitalismo, o su sinónimo perfecto el Liberalismo, son las vías correctas para una economía sana. Lamentablemente el Papa Francisco, descree, y sigue con las consecuencias de la vacuna recibida en su juventud, y a pesar de estar noblemente influenciado y que desea lo mejor para el planeta, se equivoca de cabo a rabo imponiéndonos políticas colectivistas, o socialistas, que han fracasado rotundamente en el mundo. Me recuerda ese Papa que amenazó a Galileo con la excomulgación sino se desdecía, ya que Galileo explicaba que: La tierra gira y se traslada alrededor del sol, contrariando la creencia de que el mundo y el sol giraban a nuestro alrededor. Galileo hizo caso, pero repetía, ma que se move, se move....... Y aquel Papa repetía, estaríamos todos esparcidos por el espacia si fuera como dices.... Y bueno la ciencia no perdona, esta comprobado que el Papa estaba equivocada y que Galileo Galilei tenia razón. Por lo tanto que Bergoglio se ocupe de las almas y los economistas de la economía es la mejor de las soluciones. Ya hay resoluciones del Vaticano donde desconocen la autoridad de algunos clérigos o teólogos para meterse con problemas sociales que no estan capitados per se.
Por todo ello es que cuando se emiten documentos y se pronuncian discursos es de interés recordar el texto de la Comisión Teológica Internacional de la Santa Sede en su Declaración sobre la promoción humana y la salvación cristiana que ha consignado el 30 de junio de 1977 que “De por sí, la teología es incapaz de deducir de sus principios específicos normas concretas de acción política; del mismo modo, el teólogo no está habilitado para resolver con sus propias luces los debates fundamentales en materia social […] Las teorías sociológicas se reducen de hecho a simples conjeturas y no es raro que contengan elementos ideológicos, explícitos o implícitos, fundados sobre presupuestos filosóficos discutibles o sobre una errónea concepción antropológica. Tal es el caso, por ejemplo, de una notable parte de los análisis inspirados por el marxismo y leninismo […] Si se recurre a análisis de este género, ellos no adquieren suplemento alguno de certeza por el hecho de que una teología los inserte en la trama de sus enunciados”
Sr. Rubin yo entiendo que Ud. tiene su mirada en el Vaticano, pero los que no la tenemos y vemos las intromisiones constantes del papa en temas que NO SON de su competencia,nos sentimos decepcionados. Y hablando de ambigüedades y derechos humanos, le recuerdo que pancho se ha manejado con insultante vaguedad sobre la violación de los derechos humanos en Venezuela.......... ohhhh habrá sido un desliz. Si MM nunca le pidió ayuda, TODOS sabemos porqué. Lástima que antes que ser peronista el papa no sea argentino. Y que antes de querer imponer o forzar las situaciones que él considera correctas no sea más democrático y permita que el pueblo en su conjunto decida cuáles son las que considere necesarias. Y si el grupo de economistas "humanistas" fueron los "iluminadores" del Banco Ambrosiano o de la logia Propaganda Due de Gelli............ mejor me quedo con Galileo Galilei. El vaticano no tiene las manos limpias, no le puede dar cátedra a NADIE. Posiblemente la apostasía es la mejor opción para los decepcionados.
El llamado Premio Nobel de Economia es una de las mayores, y mas vergonsozas, mentiras de la historia. Nobel, en su testamento, nunca mencionó a la Economia entre las ciencias a premiar. El llamado Premio Nobel de Economia fue un premio instaurado por la Asociacion de Banqueros de Suecia y nada tuvo que ver con la Fundacion Nobel ni, menos aún, con la Academia Sueca de Ciencias, la institución que califica los trabajos de los científicos y decide realmente a quienes de ellos se debe premiar. Para confundir a lagente, los banqueros recurrieron a una picardía: daban SUS FALSOS PREMIOS NOBEL EL MISMO DIA EN QUE la Academia Sueca de Ciencias hacia publicas sus decisiones con respecto a quienes habia elegido para ser premiados. Adicionalmente " convencio" (¿$$$$?) a la prensa de que dijera que se habían entregado tambien los Nobel de Economia. El premio Nobel de los banqueros tenia un unico fin:premiar , exclusivamente a seudo cientificos de la Economia que con sus teorias justificaban, " cientificamente", las politicas economicas, de capitalismo salvaje y neoliberales a ultranza. Es por eso, y nada más, por lo que todos los premiados fueron los sionistas inventores de la " Economica", de Reagan, Tatcher y Pinochet, entre otros. Aquí entre esos fanaticos de la Economica tenemos a Martínez de Hoz, el "economista" de Videla, Cavallo y Menem. Esos tres liquidaron a la Argentina como pais. Por otra parte, los nobelistas sionistas son: Stiglitz, Samuelson, Frieman, von Mises, von Hayecks, Hicks y otros. Stiglitz antes de renunciar al neoliberalismo, fue Gerente del FMI y, partidario fanatico de Thatcher, Reagan y el sapo Pinochet. Seguro que ése Stiglitz ( y los otros sionisto- nobelistas), tiene en su haber la muerte, por hambre, sed y enfermedades, de cientos de miles de niños en el Tercer Mundo, y aquí tambien. Después, los banqueros lograron "convencer", " aceitandolos" bien, seguro, a los de la Academia Sueca de Ciencias a que sean ellos quienes entreguen los malditos premios Nobel de Economia. Resultado? Toda la UE cayó en manos del FMI