En esta ocasión y como consecuencia de la 46 Feria Internacional del Libro TDP, tuvo acceso de realizar crónicas, entrevistas y cubrir dicho evento y hacer un camino al andar.
De esta forma pudimos contactarnos con un escritor muy particular e independiente que presentaba en la Editorial Dunken por primera vez su primer libro llamado: “Testigo de una Revolución Traicionada”
En concreto se trata del Señor Pedro Cornelio von Eyken que es Doctor en Ciencias Políticas de la Universidad Católica Argentina y diplomático de carrera desde 1983 hasta el año 2021.
Asimismo, ha prestado funciones en diversas áreas de la Cancillería Argentina y de esta forma se desempeñó como Cónsul en Hamburgo (1986/1991)
Fue Consejero Político de la Embajada en Alemania (1993/1998) Ministro Plenipotenciario en las embajadas de Cuba (2006/2009), en la Embajada de Finlandia (2009/2012) y finalmente Embajador en Haití (2017/2019.
De esta forma su base y raíz en el mundo de la diplomacia ha marcado su camino profesional en diferentes países y vasta experiencia, para ingresar en esta nueva labor como escritor y en un momento muy particular, después de dos años de pandemia, de aislamiento y presentar su libro en la Feria del Libro que abrió sus puertas –como nunca- para brindar oportunidades y participación de escritores/as y mundo literario.
TDP- ¿Cómo nace la inspiración para escribir su libro Testigo de una Revolución Traicionada?
PvE - Hay unagénesis, es decir que en 2013, al regresar de Finlandia, decidí hacer el doctorado en ciencias políticas en la misma Universidad en la que me había graduado en 1981.
-Quería investigar sobre una de mis experiencias presenciales en el exterior. Había vivido nueve años y medio en Alemania, desde fines de los años 80 hasta fines de los 90 del pasado siglo.
- Estaba allí cuando cayó el Muro de Berlín y se reunificó el país, luego estuve en Cuba y en Finlandia.
Aquí recalca¡Vaya si tenía temas para profundizar lo observado como politólogo!
-Una posibilidad fue comparar los sistemas cubano y finlandés, ya que pasé directamente de La Habana a Helsinki. Veía que en el país nórdico también había comida, salud y educación para todos pero con libertad, sin dirigismo ni opresión.
-Me aconsejaron acotar más la investigación y opté por Cuba”.
- A partir de lo observado en la isla me dediqué, en buena medida, a desmitificar muchas cosas que “mucha gente cree a pies juntillas y repite sin haber pisado nunca la isla o, a lo sumo, luego de un par de semanas entre La Habana y las playas”.
-Por tal motivo, cuando escribía la tesis, un amigo que la iba leyendo y comentando me sugirió que escribiera un libro más breve, con lenguaje ameno y destinado al gran público, sin toda las formalidades propias de la metodología de la investigación que hoy requieren los trabajos en ciencias sociales.
TDP- Su estadía diplomática desde 2006/2009 en Cuba y lo allí vivenciado. ¿Fue el objetivo principal de la temática del libro?
PvE- Si. El libro es una versión resumida de mi tesis doctoral defendida en abril de 2021.
-De las 447 páginas de la tesis pasé a un libro que no llega a 160, actualizado a septiembre de 2021. Ambos están escritos en primera persona para subrayar que parto de una observación testimonial, presencial.
TDP- En su relato¿ incluye antecedentes históricos de la Revolución y/o todo aquello que observo en su estadía en Cuba?.
PvE- Además de los antecedentes históricos de la Revolución, analizo los factores externos e internos de la grave crisis económica y social que observé en Cuba durante mis tres años de estadía, de 2006 a 2009.
“Sostengo que las razones de esa crisis fueron y son más las internas que las externas”
-Por lo tanto, las políticas económicas dirigistas, erráticas e inconsistentes de Fidel Castro y sus sucesores, a lo largo de cinco décadas, fueron más perjudiciales que el bloqueo norteamericano o la caída de la Unión Soviética.
-Entonces, incluyo una comparación con Vietnam, que mantuvo el marxismo-leninismo político pero que desde 1986 abrió su economía al mercado.
-Los resultados de ambos países están a la vista. “Recorrí La Habana y luego el resto de la isla, en auto, avión y ómnibus. En junio de 2007 me fui con mi mujer durante diez días de La Habana a Santiago de Cuba, en auto, pasando por varias provincias”.
-Cuba es mucho más que La Habana Vieja y sus playas. Vi distintos panoramas y escuché relatos de cubanos de a pie, que distaban mucho de los objetivos por los que se hizo la Revolución Cubana.
-Ya había pasado lo peor del Período Especial en Tiempos de Paz, entre 1991 y 1996, cuando cayó el campo socialista y Cuba conoció la peor crisis económica y social de su historia.
-Sin embargo, la situación seguía y sigue siendo muy difícil, cada vez peor. Dos íconos de la revolución, la salud y la educación para todos, tenían y siguen teniendo más marketing que realidad.
Hay dos déficits importantes, el transporte y la vivienda, en los que se avanzó poco y nada en seis décadas.
TDP- ¿A qué conclusión llega Ud., teniendo en consideración todo el recorrido que verificó en primera persona?
PvE- Comencé a razonar que todo eso no podía ser resultado del "bloqueo norteamericano" y que la implosión soviética terminó por derrumbar lo que estaba muy debilitado.
TDP. Previo a este libro, ¿realizó otras publicaciones y/ o trabajos especiales?
PvE- Sí. He publicado artículos sobre los países mencionados, donde he vivido, a los que debería sumar Haití, donde fui embajador de 2017 a 2019. También en el blog Nuevos Papeles, en la revista Criterio y en el diario La Prensa de Buenos Aires desde 2021. También publico en el exterior, en el diario Expreso y la revista Justo Medio de Perú. A raíz de la guerra en Ucrania he sido convocado como analista político en programas especiales de TV.
TDP- ¿Cómo fue toda la preparación y elaboración que tránsito hasta llegar a la publicación del libro?
PvE- Primero, la tesis doctoral, origen del libro, redactada entre 2015 y 2020 con la dirección del reconocido internacionalista, Dr. Juan Gabriel Tokatlian, vicerrector de la Universidad Torcuato Di Tella.
- Hay bastantes fuentes primarias como los discursos de Fidel Castro, el decreto de embargo a Cuba dispuesto por John F. Kennedy en febrero de 1962 y memorandos de colaboradores elevados a Kennedy sobre el embargo.
TDP- En base a la pregunta anterior y su respuesta para ampliar. ¿Tuvo la oportunidad de obtener entrevistas de cubanos ya sea en Cuba o de los cubanos residentes en el exterior?
PvE- Hice algunas entrevistas a cubanos, la mayoría residente en el exterior, ya que es muy difícil hacer un trabajo de campo en Cuba, sobre todo para un diplomático.
-Aclara que pudo recopilar abundante bibliografía cubana y extranjera, a favor y en contra de la Revolución.
-A ello se suma que terminé la tesis en Haití en 2019 y luego vino el proceso de revisión y aprobación por el tribunal, hasta su defensa el 27 de abril de 2021.
-El libro lo escribí el año pasado y lo entregué a la editorial Dunken en diciembre
TDP - ¿En la 46 Feria Internacional del Libro-, logró presentarse y firmar ejemplares?.
PvE Si, pude firmar ejemplares en la última Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.
TDP- ¿Las correcciones y todo el proceso hasta las pruebas galeras las hizo Ud. o contó con una profesional que trabajo a la par?
PvE- Para todo eso tuvo el inestimable apoyo profesional de mí correctora y editora, la señora Stella Roque, que “se ha transformado en un ángel de la guarda literaria. Su ámbito de acción trascendió la mera corrección de textos y pruebas de galera y abarca el seguimiento en redes sociales y otros medios de comunicación”.
En esta respuesta se muestra satisfecho por la labor de la profesional–ut supra mencionada- lo que permite acotar el Señor Pedro von Eycken forma parte del Staff de Escritores de la Sra. Roque, que es Técnica Universitaria en Periodismo y propietaria de su emprendimiento “Librería Libros de papel” de forma online y se encuentra en redes sociales como Facebook e Instagram.
TDP- ¿Quién ha dejado huellas, surcos, vestigios en su camino profesional?
PvE- “Mi madre era profesora de castellano e historia. Escribía muy bien y creo que hay bastante de ella en mis escritos y en mi atrevimiento a decir cosas políticamente incorrectas”.
- La tesis y el libro lo son, al enfrentar puntos de vista muy extendidos sobre Cuba, casi dogmas para muchos. De todos modos, desde abril de 2021, cuando me retiré voluntariamente del servicio exterior activo antes de la edad jubilatoria, todo lo que digo y escribo lo hago a título personal, sin comprometer al gobierno de turno.
- En mi trabajo de Cancillería tuve buenos jefes y si debo señalar a uno en especial, me quedo con el embajador Carlos Keller Sarmiento, embajador de carrera ya fallecido, que fue mi jefe en Alemania entre 1994 y 1998. Fue, sobre todo, un embajador valiente que decía lo que había que decir, sobre todo en sus comunicaciones con la Cancillería.
“Una virtud poco frecuente entre mis colegas de carrera”
Habida cuenta de todo ello y lo expresado por el Señor Pedro Cornelio von Eyken se concluye que su libro “Testigo de una Revolución Traicionada”, de Editorial Dunken, se encuentra listo para transitar caminos y presentaciones variadas a distintos puntos de nuestra Ciudad y de todas las provincias de nuestro país y trascender fronteras internacionales para hacer “Camino al andar”
Toda vez que, es necesario conocer, profundizar, interiorizarse, y visibilizar lo que el escritor –en este caso- comunica y transmite con sus investigaciones, vivencias, experiencias, testimonios y realidades de lo vivido en su paso diplomático en Cuba.
Y recordar: “Somos libres de ser políticamente incorrectos”.
El engaño fue uno de los mayores talentos de Fidel Castro y la credulidad es una de las mayores debilidades del mundo. Sus mentiras eran bellas, y muy seductoras. Según Castro y sus propagandistas, el objetivo de la así llamada revolución no fue crear un estado totalitario represivo y asegurar que él lo gobernara como monarca absoluto, sino eliminar el analfabetismo, la pobreza, el racismo, las diferencias de clase y todos los demás males conocidos por la humanidad. Esta audaz mentira se volvió creíble, gracias, en gran medida, a los incesantes alardes de Castro sobre la escolaridad y la asistencia médica gratuitas, que hicieron que su mito de la benevolente revolución utópica fuera irresistible para muchos desfavorecidos del mundo. Muchos intelectuales, periodistas y gente cultivada del Primer Mundo también creyeron el mito — aunque habrían sido los primeros en ir a la cárcel o ser asesinados por Castro en su propio reino — y sus suposiciones adquirieron una intensidad similar a la de las convicciones religiosas. Señalar a estos creyentes que Castro encarceló, torturó y asesinó a muchas más personas, miles más, que cualquier otro dictador latinoamericano fue, generalmente, en vano. Su crueldad bien documentada, aunque se la reconociera, no cambiaba las cosas, porque se lo juzgaba de acuerdo a un aberrante código ético que escapaba a la lógica. Por ejemplo, en 1998, alrededor del momento en que el gobernante de Chile, Augusto Pinochet, fuera arrestado en Londres por crímenes de lesa humanidad, el auto-ungido ‘líder máximo’ visitó España con bombos y platillos, sin que le causaran problemas, aunque sus abusos de los derechos humanos empequeñecían los de Pinochet. En 1995, cuando fue a Nueva York a dirigir la palabra ante las Naciones Unidas, muchos de los personajes ilustres de esa ciudad maniobraron tan intensamente por tener la oportunidad de conocerlo en el penthouse de tres pisos del magnate mediático Mort Zuckerman, en la Quinta Avenida, que la revista Time declaró “¡Fidel Toma Manhattan!” Para no ser menos, Newsweek tildó a Castro de “La Mayor Atracción de Manhattan.” A ningún miembro de la elite que se codeó con Castro ese día pareció importarle que en 1962 apuntara armas nucleares contra sus cabezas. Si éste fuera un mundo justo, se tallarían 13 hechos en la lápida de Castro y se los destacaría en todas las necrológicas, punto por punto. - Convirtió a Cuba en una colonia de la Unión Soviética y casi causó un holocausto nuclear. - Patrocinó el terrorismo donde pudo y se alió con muchos de los peores dictadores de la tierra. - Fue responsable de tantas ejecuciones y desapariciones en Cuba que es difícil calcular un número preciso. - No toleró discrepancia alguna y construyó campos de concentración, que llenó al máximo, a un ritmo sin precedentes. Encarceló un porcentaje mayor de su propio pueblo que la mayoría de los demás dictadores modernos, entre ellos, Stalin. - Aprobó y promovió la práctica de la tortura y de los asesinatos extrajudiciales. - Obligó al exilio a casi un 20 por ciento de sus compatriotas, muchos de los cuales hallaron la muerte en el mar, sin ser vistos ni contados, mientras se escapaban de él en burdas naves. - Reclamó toda propiedad para sí mismo y para sus secuaces, cortó la producción de alimentos y empobreció a la vasta mayoría de su pueblo. - Prohibió la empresa privada y los sindicatos, eliminó la amplia clase media cubana y convirtió a los cubanos en esclavos del estado. - Persiguió a los homosexuales e intentó erradicar la religión. - Censuró todos los medios de expresión y comunicación. - Estableció un sistema escolar fraudulento que proporcionó adoctrinamiento en lugar de educación y creó un sistema sanitario de dos niveles, con asistencia médica inferior para la mayoría de los cubanos, y superior para sí mismo y su oligarquía. Después, sostuvo que todas sus medidas represivas eran absolutamente necesarias para asegurar la supervivencia de esos proyectos de bienestar social ostensiblemente “gratuitos.” - Convirtió a Cuba en un laberinto de ruinas y estableció una sociedad de apartheid, en que millones de visitantes extranjeros gozaron de derechos y privilegios vedados a su pueblo. - Nunca se disculpó por sus crímenes ni fue procesado por ellos.
el comunismo es neoesclavismo. cuba es una isla llena de esclavos que no se pueden escapar por estar limitados por el mar y los tiburones