Es interesante poder visibilizar, interiorizarnos sobre el mundo boxeo como deporte competitivo, que también fue alcanzado por los efectos de la pandemia, protocolos de bioseguridad, etc. por Covid-19 durante dos años, que implicó un antes y después; esencialmente volver a empezar.
En tal contexto, dialogamos con un joven boxeador profesional que vive en la Ciudad de Maipú, Provincia de Mendoza; Fabián Leiva de 36 años, 3 hijos, además de Técnico en boxeo, Pre Universitarios Trainer, Profesor de boxeo y fundador de la Escuela Boxeo Zurdo.
Ganador de varios torneos locales amateur como el Histórico Guantes de Oro Mendocino y Torneo Vendimia, como amateur realizó 35 peleas. Como profesional logró pelear en 8 de las cuales ganó 6 por knock-out, empató una por puntos y cero perdidas, forma parte de la categoría peso welter 67k. Pertenece a la Federación Mendocina del boxeo para ayudar a chicos/as afederados a cumplir sus sueños.
TDP- ¿Cómo nace tu vocación, pasión y decisión de ingresar al mundo del boxeo?
FL- Arranqué con el boxeo, a los 14 años, vi una pelea de Nicolino Loche y…. me emocione…. Al día siguiente ya estaba buscando gimnasio de box para meterme de lleno; competí hasta hacerme profesional y 12 años después logré hacer varias peleas en el campo rentado. Pero decidí paralelo a eso, volcar lo que sabía hasta ese momento en enseñarle a los chicos y a grandes.
TDP- En vista de esa decisión que te motiva ¿cuando plasmas o haces realidad esa necesidad de enseñar?
FL- Abrí mi primer gimnasio justo el día después que debute como profesional, de ahí hasta la fecha siempre ligado al deporte de los puños como técnico. Pertenezco a la Federación Mendocina de boxeo, con más de 10 chicos afederados para ayudarlos a concretar sus sueños.
TDP- Entonces, ¿hace cuánto decidís abrir tu gimnasio para ubicarnos en el tiempo?
FL- Actualmente y desde hace 7 años que arranque con este proyecto de hacer deportistas; han pasado más de 1500 alumnos por mi escuela y cuento con más de 100 alumnos de todas las edades y género. En lo que va del año 2023, pude inaugurar mi gimnasio propio hace menos de 3 meses,, porque siempre estuve en lugares prestados. Además estoy tramitando licencias profesionales de boxeo a aquellos chicos que están en la elite y participando de todo evento, que se va haciendo viernes tras viernes.
TDP- ¿Con el transcurso de los años, ¿cambio de alguna manera la mirada sobre el boxeo en cuanto a considerarlo como un deporte de puños, brusco y /o violento?
FL- Son interpretaciones, porque hay gente que se quedó en el tiempo respecto a que el boxeo es brusco y violento. Entonces voy aclarar un poco, para mí violento no es, porque la violencia es forzar al otro a hacer algo. En este caso no forzamos a nadie -y repito- “violento para mí no es”, agresivo sí puede ser en cuanto a una agresividad implícita”. Está arreglado todo.
-Para mí es la máxima exponencial en golpear y no ser golpeado, o sea que gana el que menos recibe golpes. Hay otras circunstancias que el juez vio ganador a tal o cual boxeador por otras cuestiones o porque terminó antes del límite de la pelea; pero el fin es golpear y que no te peguen. No es arrancarse la cabeza uno al otro.
-Es un deporte de apreciación, pero además existe el boxeo recreativo, educativo, el boxeo sin contacto, el boxeo des estresante, el masculino infantil femenino, boxeo para adultos mayores. Hay posibilidades para todos, todos pueden practicarlo y de distintas formas.
TDP- De acuerdo a lo que explicas sobre las distintas alternativas de boxeo, ¿qué beneficios aporta?
FL Trae muchísimos beneficios psicológicos porque te fortalece mental y corporalmente, es un deporte que te sentís tan apretado “fuerte”, y terminas liberando hormonas como la dopamina, que te va regular el equilibrio emocional y te mantiene siempre despierto y atento.
-Con el tema de las depresiones, de chicos que andan mal y que está muy de moda, te ayuda a poner un pie en la tierra y salir de esas fantasías mentales que hay. Te enseña valores como la constancia, la paciencia, la perseverancia, te saca de malos hábitos, te enseña sacrificios. “Tiene motivación y disciplina”.
-En lo personal a mí me enseño muchísimo el boxeo:” me enseño más un reloj que marca tres minutos de trabajo y uno de descanso, que todos los años de colegio y de crianza de mis padres”. Tenés pertenencia de grupo porque necesitas de otro para que te aliente, te digan “..seguí adelante para aguantar un round más..”.
-Entonces, “como no voy a querer mi deporte que es el boxeo”.
TDP- Que pasa con el boxeador, boxeadora hay un límite de edad y pienso en algunos boxeadores como Maravilla Martínez, la Tigresa Acuña y sí volverías a pelar profesionalmente.
FL- El límite se lo pone cada uno. En el caso de Maravilla Martínez está rondando los cincuenta años, tiene 48 años y en marzo pelea en el Luna Park. La Tigresa Acuña, también, tiene algo de cuarenta y seis años. Yo tengo 36 años y entiendo que estoy joven, me siento bien. Pero me dedique a enseñar a los pibes/as. En la Argentina es muy difícil ser boxeador por el tema económico que no te pagan la bolsa que tiene que ser, los promotores te roban mucho; entonces decidí largar los guantes, pero siempre están las ganas de seguir boxeando obviamente.
TDP- Que pasa con las mujeres boxeadoras en cuanto a oportunidades, pago y/o igualdad de condiciones en cuanto a las peleas
FL- Lo que ha surgido con las mujeres en el boxeo, es que han logrado igualar el pago en las bolsas, antes el hombre ganaba más que las mujer; y gracias a un evento que realizó “Locomotora Oliveras” hace 3 años, por la igualdad de round, de tiempo en el round y de igualdad en la bolsa, creo, “que eso fue el puntapié para que ahora las mujeres ganen lo mismo que gana un hombre boxeador”.
TDP- ¿Cómo viviste el Aislamiento por la pandemia y toda la actividad?
FL- Con el tema de la pandemia como nos pasó a todos, tuvimos que parar y me quede sin gimnasio; porque “la gente del salón que me alquilaban, querían seguir cobrando el alquiler y me fue imposible”. Yo trabajo con la cuota de los chicos. Así es, como dejé esos dos años de pandemia el boxeo y empecé de vuelta.
-Cómo te contaba-, recién ahora puedo tener mi gimnasio propio, pero cuesta muchísimo, porque “es un deporte muy humilde, y a los chicos no podes cobrarles una cuota cara”. Aparte a los pibes que compiten, les paso por alto la cuota y me pone contento que ellos elijan boxear a federados; entonces no les cobro.
-Se me hace muy difícil pagar el alquiler de mi casa, “bueno… prácticamente vivo en el gimnasio, así que imposible pagar un alquiler de una casa y me han pasado muchas cosas….”.
TDP- Cuando entrenas chicos/chicas para que ingresen al mundo del boxeo ¿cómo los motivas y/ o preparas?
FL- Les doy confianza, que crean en ellos, en el trabajo que hacemos. Es decir, les cambio la cabeza, pero con la verdad y trabajo. Les digo que el miedo va estar siempre, pero también hace que nos estanquemos en un lugar donde no vamos a llegar nada. Entonces, al miedo hay que vencerlo y trabajar para traspasar esa pared que se llama miedo, luchar, trabajar para vencer ese miedo que nos para de tantas cosas.
TDP- Relacionado con tus hijos, ¿buscan inclinarse por el boxeo, les gusta lo que haces en el gimnasio?
FL- No, ellos son libres de elegir lo que quieran, y simplemente los llevó al gimnasio, para que vean como se trabaja, la disciplina que hay y demás; pero en ese caso los dejo que elijan lo que les guste.
TDP- ¿Quién ha dejado huellas y referente en tu camino profesional y de la vida?
FL- Me impulsó mucho en el boxeo cuando vi una pelea con mi vieja de Nicolino Loche justo que pasaban un documental y al otro día ya – como te mencione – fui a buscar un gimnasio y después la vida te va motivando a no dejar y te aferras a ese deporte por situaciones que uno va pasando, por eso es que estuve tan prendido.
“Todo el mundo quiere ser alguien. Lo que has de hacer es darles toda la confianza que puedas. Darle al niño un sueño”. George Foreman.