El llamado “continente negro” es una muestra acabada del fracaso de sociedades que cuentan con enormes recursos naturales pero viven en la pobreza generalizada.
Con excepción de contados barrios y pequeñas ciudades de Egipto, Sudáfrica, Argelia y Nigeria, se trata de conglomerados fallidos.
El éxodo masivo que practican cada año sus pobladores hacia Europa, Estados Unidos, Asia y la propia Latinoamérica así lo demuestran ¿Por qué les va tan mal?
Principalmente, por su inveterada corrupción y por sus interminables disputas internas, a menudo tribales.
En Argentina, estamos asistiendo a un fenómeno similar, a pesar de vivir en un sistema que se supone democrático.
¿Por qué nos va tan mal y nos parecemos a estas poblaciones fracasadas?
Porque la clase gobernante se ha puesto de acuerdo en un saqueo sistemático y sin parangones.
Se trata de una mesa de cuatro patas compuesta por:
-Políticos venales
-Sindicalistas traidores a su clase
-Fiscales y jueces cómplices
-Empresarios prebendarios (incluidos los dueños de los grandes medios de comunicación)
Todos ellos se han puesto de acuerdo para enriquecerse de manera inversamente proporcional a los ingresos de una ciudadanía que se resigna o abandona el país, como sucede en Venezuela, Cuba y Nicaragua.
¿Cómo funciona este perverso sistema?
Muy sencillo, entre ellos jamás se disparan “debajo del cinturón”, nunca se agraden “bajo la línea de flotación”.
Representan un sketch diario, una mise en scene que han perfeccionado a lo largo de las últimas cuatro décadas.
Veamos apenas cinco claros ejemplos:
1-El Estado mira cómo empresarios chinos, norteamericanos, japoneses y australianos se llevan el litio pagando apenas el dos por ciento de lo que ellos mismo declaran. El “oro blanco” o “petróleo del siglo XXI” se marcha de manera impune desde Catamarca y Jujuy hacia puertos chilenos. Allí, en el país trasandino, las cosas son distintas. Los holdings deben abonarle al gobierno de Santiago hasta un 40 % de las ganancias logradas.
2-El Estado no ve cómo las grandes petroleras evaden los caudalímetros y se llevan los hidrocarburos a “declaración jurada”. Se llega al colmo de que el “mago” Miguel Galuccio, ex presidente de YPF, con su empresa Vista Oil, sea hoy el dueño de los pozos más productivos de Vaca Muerta. Su “firma de portafolio” ya vale más que la petrolera estatal, una empresa fundida con un pasivo cuatro veces más voluminoso que sus activos. YPF es un zombie que solamente se sostiene por los aportes del tesoro. Quebró mientras quienes la dirigieron, los miembros del clan Eskenazi y Galuccio, se han vuelto mega millonarios.
3-Las mineras auríferas pagan por el oro apenas el tres por ciento en boca de pozo. Luego, tienen todo tipo de exenciones. Además, si exportaran desde puertos patagónicos sería la Casa Rosada la que debería pagarles para que se lleven tan preciado metal. Aquí tampoco hay labor de verdadera inspección. Se confía en las declaraciones juradas.
4-En materia de pesca pasa algo similar. Un completo escándalo para un país con más de la mitad de los niños pobres. Las pesqueras chinas y europeas se llevan el recurso “a declaración jurada” porque no existen cámaras online que muestren lo que ocurre a bordo durante travesías absolutamente depredadoras. Los enjambres de grandes aves que rodean a las embarcaciones son la demostración más cabal de la desaprensión. Las grabadoras audiovisuales no trabajan en tiempo real y por ello sus tomas pueden ser fácilmente editadas.
5-El creciente fenómeno del juego está en mano de distintas mafias provinciales, barones del conurbano y ex convictos como Cristóbal López. Se controlan a sí mismos porque los backups que existen en sitios como Nevada o Barcelona (donde se fabrican los slots) jamás son consultados. Configuran usinas de lavado de dinero inéditas en el mundo.
Resumiendo, no controlamos prácticamente nada y, además, evitamos cualquier medida de modernización. Jamás quisimos imitar a los más transparentes.
-Chilecompras es un sistema que cuenta con 100 mil oferentes y de esa forma quedan pulverizados los Lázaros Báez,
-Es ejemplar el sistema que custodia lo público-privado online en Estonia. Toda operación con dinero que desembolsa el Estado se sube a Internet.
-Sistema de ingreso por “oposiciones” como en España, donde hay que rendir examen para ingresar al Estado. Terminaron con el clientelismo y los ñoquis.
-Métodos de atención temprana de la corrupción como el SATAN de Valencia o el de boxes que utiliza Cataluña.
-Modelos de delación premiada como el que utilizó Gran Bretaña para desarticular a las principales redes de narcos.
-“Muerte civil” de firmas corruptas, como ocurre en Perú. Ya no pueden interactuar con las oficinas públicas.
En síntesis, peronistas, radicales y el Pro solamente usan la tecnología para joder al contribuyente con drones para vigilar nuevas construcciones, cámaras de seguridad para cobrar fotomultas o una AFIP ultra informatizada para perseguir a los que “no son del palo”.
¿Qué medidas de transparencia ofrecen como novedad de campaña? Absolutamente ninguna.
Gerardo Morales se muestra como el político anticorrupción pero tiene fronteras abiertas al crimen organizado y avala un festival depredatorio con el litio.
Horacio Rodríguez Larreta informatizó todo menos su cartelizado sistema de compras de bienes y servicios. La droga se vende como caramelos en cada esquina de la Reina del Plata. Las mafias de venta ambulante reinan en Retiro, Constitución, Once y Flores.
Los peronistas no han tomado ni tomarán una sola medida para combatir en serio la corrupción generalizada que imperó durante sus distintos gobiernos.
Patricia Bullrich ya fue ministra de seguridad y jamás compró aviones de intercepción para la frontera, radares 3D para frenar las trazas ilegales, scanners que puedan discernir orgánico de inorgánico. Tampoco creó un FBI, una DEA ni hizo una puta campaña de prevención de drogas.
En conclusión, Argentina será pronto África, con tasas de pobreza que superen el 60, 70 o bien 80 por ciento del total de la población.
La clase gobernante está dispuesta a todos y cuentan con la anuencia de los medios informativos.
En cada tanda comercial de los “opositores” LN+ o TN aparecen los avisos oficiales de Balcarce 50 y la provincia de Buenos Aires,
Lo mismo ocurre con los asquerosos C5N, Crónica o A24 donde CABA es uno de los grandes anunciantes.
Los subsidios están “cruzados” para que sus “megaplaneros” periodistas vivan en barrios cerrados, manejen autos alemanes y viajen de vacaciones a Estados Unidos y Europa con total impunidad
Jamás hablarán de los robos estructurales, del crimen organizado por la “casta”.
“En el mismo lodo, todos manoseaos” decía Discepolín.
Nadie puede tirar la primera piedra.
“Crisis: ¿qué crisis?” se preguntaba Supertramp hace medio siglo.