Pasaron las elecciones generales con sorpresas. Unión por la Patria (UxP) sacó el 36,6 % de los votos y La Libertad Avanza (LLA) sacó casi el 30 % y entró al balotaje. Juntos por el Cambio (JxC) quedó fuera de carrera. Se equivocaron las encuestas, una vez más.
Eso sucedió el domingo 22/10. Sólo unas horas después, en la casa de Mauricio Macri, se reunieron Santilli, Ritondo, D’Andreiss, Patricia Bullrich y Luis Petri. También estaban Javier Milei y su hermana Karina, Guillermo Francos el posible ministro del interior de LLA y el jefe de campaña, Santiago Caputo.
El resultado de esa reunión fue un pedido de perdón de Milei a Bullrich y de Patricia a Javier por las ofensas pasadas. Hay que rescatar el gesto de grandeza de Patricia acusada de poner bombas en jardines de infantes. Se perdonaron. Y llegaron a un acuerdo ¿? Bullrich y Petri como ex fórmula presidencial decidieron públicamente apoyar a Javier Milei el 19/11/2023.
Esa decisión se tomó y se hizo pública sin comentarla con los jefes de los partidos que conforman la coalición de JxC. El radicalismo se enfureció, lo mismo que Lilita Carrió. Nadie recordó que cuando Horacio Rodríguez Larreta pretendió sumar a Juan Schiaretti a JxC tampoco avisó a nadie.
Y Rodríguez Larreta lo hizo justo una semana antes de la votación para gobernador de la provincia de Córdoba. El candidato de JxC, Luis Juez, perdió. Y no se acusó a Horacio de haberle dejado ganar la provincia al schiatretismo. ¿Lo hizo? ¿Cómo saberlo?.
Tampoco se recordó que en el 2003, ante las elecciones del balotaje fallido entre Carlos Menem y Néstor Kirchner, Lilita Carrió pidió “voten por Néstor es el mal menor”. Después, es cierto que las primeras denuncias contra los K fueron de Lilita, pero nunca recordó su mensaje.
La reacción de la UCR, en particular de su presidente, el gobernador Gerardo Morales y el senador Martín Lousteau, pareció sobreactuada. O realmente el odio era visceral y profundo hacia todo lo que tuviera olor a macrismo. Macri fue acusado de perpetrar el acuerdo.
O los radicales que no pusieron ni siquiera un candidato a presidente para las PASO y se conformaron con las vicepresidencias, demostraron una visible inclinación hacia…Massa. Dicen que Massa le ofreció a Morales el ministerio del interior y a Emiliano Yacobetti (con Lousteau formaron Evolución) dejarle nombrar al ministro de educación.
Pero ya se sabe, son rumores. Decidieron ser neutrales, ni Massa ni Milei. Se supone que el Gen de Margarita Stolbizer, la CC de Lilita, el Frente Republicano Federal de Pichetto y Confianza Popular de Graciela Ocaña seguirán el mismo camino. ¿Y el PRO? Larreta habló casi de noche y se expresó con una pasión desconocida en él. Voto en blanco, neutralidad.
Los gobernadores opositores también se inclinaron por la neutralidad entre Massa y Milei. La neutralidad de los gobernadores se entiende, sea quien fuere el presidente van a depender de él para la coparticipación. Pero en una coalición política la neutralidad es inexplicable y cobarde.
El radicalismo, partido mayoritario de JxC tiene una dirigencia que simpatiza con Massa, algunos son amigos personales del ministro- candidato. Piensa en echar a Luis Petri del partido por aclarar que votará a MIlei. No piensan echar a la vicepresidente de la UCR, María Luisa Storani que dijo públicamente que votará a Massa. Varas distintas.
¿Cómo queda JxC después de este batacazo? Las tensiones entre la UCR y el resto con el PRO, eran evidentes. No con el PRO que responde a Rodríguez Larreta, muy cercano a la UCR y al resto de los partidos que conforman a JxC. De un lado los macristas del PRO, y del otro los larretistas del PRO con el resto de los partidos. Y juran que no se rompe. Patricia sigue siendo la presidente del PRO. ¿Hasta cuándo? ¿Y de qué PRO?
La ley electoral establece que el voto es universal, obligatorio y SECRETO.
Todo este “cabaret” se parece mucho al famoso “voto cantado”. Y los acuerdos de cúpula no influyen sobre el voto de los ciudadanos. No es necesario dejarlos en libertad, son libres sin que se les dé permiso y votan a quien mejor les parece.
El 19/11/2023, Argentina decide entre la continuidad del kirchnerismo (la mayoría de los diputados y senadores de UxP son K), o se arriesga a un cambio profundo e imprescindible para tener un futuro. Final abierto.