
“Preparen, apunten y…” Azules marcando rojos, pero yo no fui
El Gran Hermano del Régimen Libertario ajusta la mira en Morón, zona Oeste del Gran Buenos Aires. El sábado 15 de marzo, cuando organismos de Derechos Humanos, víctimas del terrorismo de Estado y vecinos participaban de la decimosexta caravana por memoria, verdad y justicia en el oeste, como previa al 24 de marzo, así llegaron al predio Gorki Grana de Castelar, donde funcionaba la CCD Mansión Seré. El Subcomisario Marcos de la Cruz, de la Comisaría tercera, vestido de uniforme y dentro de un auto civil Renault Sandero, patente M52368 ¡Que sólo tenía chapa delantera! Filmaba y fotografiaba a los manifestantes.
Cuando algunos notaron esto y se acercaron, el efectivo, muy suelto de cuerpo, les dijo que los filmaba “por órdenes del Municipio”. Este grave hecho de la policía filmando a organismos de DDHH requiere urgentes medidas desde el Gobierno Nacional y el Provincial: ¿Quién impartió la orden? ¿Lo sabía de antemano el Secretario de Seguridad Damián Cardoso’ ¿Lo sabía el Intendente Lucas Ghi?
Doble reacción oficialista y el resto mirando para otro lado
El Intendente de Morón, Lucas Ghi, envió un comunicado al Jefe de la Estación Policial solicitándole explicaciones por este incidente. La ofuscación no basta. Se necesita el descabezamiento de la cúpula policial, infectada de servicios y espías del gobierno nacional. El Subcomisario dijo que lo envió el Municipio. ¿Quién miente, al final?
Por su parte, el Concejal Diego Spina, Presidente del Bloque Nuevo Encuentro, denunció este espionaje y lo vinculó a las declaraciones incendiarias de Milei, que aseguró “que los buenos son los azules y los demás somos unos zurdos hijos de mil puta. Así que así empieza el fascismo, uno a uno, usando esa información para los Servicios de Inteligencia.” Spina también reclamó que los policías involucrados sean separados de la fuerza.
El resto de los partidos políticos, tanto el PRO como La Libertad Avanza y la Coalición Cívica, etc., hicieron mutis por el foro, negándose a repudiar este hecho. Indiferencia o desidia que habla muy mal de sus dirigentes locales. ¿Dónde está el Concejo Deliberante? ¿Por qué no se expide como cuerpo? ¿No habrá comunicados institucionales de ningún sector? ¿Por qué la mayoría de los medios locales callan? Muchas preguntas, ninguna respuesta.
Fingiendo demencia: un funcionario que “no la ve” cuando todos ven
El Secretario de Seguridad, Damián Cardoso, es responsable por este hecho de espionaje. ¿Por qué no emitió siquiera un comunicado? ¿Por qué no descabeza la cúpula de la tercera? ¿Por qué no realiza una denuncia penal? ¿Por qué no da la cara? ¿Sabía esto antes? Su silencio es atronador.
En una nota anterior, https://periodicotribuna.com.ar/37572-seguridad-sa.html, advertí que el Secretario, con su corte de policías, jueces, abogados y diversos leguleyos, respondían a una derecha rancia y no a un gobierno progresista como el de la administración local. Se nombraron personajes como Alejandro Alvarito, espía de profesión, furibundo antiderechos y activista libertario, y otros que trabajaban en gendarmería y hasta funcionarios del Banco Provincia, que tuvieron que ser despedidos u obligados a renunciar apenas asumieron, por el escándalo de sus curriculums reaccionarios. Todo muy turbio.
La reestructuración que trajo Cardoso en las dependencias de Haedo, Castelar Sur, Morón Sur y Villa Sarmiento, no dan señales de transparencia, sino de diseños de vigilancia y espionaje sobre los vecinos.
Además de jactarse de correr a los vendedores ambulantes y manteros de la plaza de la cultura, y desactivar con promesas, las marchas por seguridad y justicia de familiares de víctimas, sólo se incrementaron los delitos y homicidios desde su asunción. ¿De qué lado está el Secretario de Seguridad?
Mis fuentes sospechan que Cardoso trabaja con los servicios y que fue puesto allí para tareas de espionaje ilegal, todo lo ocurrido hasta ahora muestra indicios preocupantes.
Se impone el desplazamiento urgente de Cardoso ante la gravedad inusitada de este espionaje.
Dispositivo de Gran Hermano con formato setentista
En el Conurbano particularmente, se está instalando un andamiaje hipertecnológico de espionaje ilegal, avalado por el Presidente Javier Milei y la Ministra Patricia Bullrich, coordinando SIDE, policía y gendarmería, con el propósito de identificar y reprimir militantes de derechos humanos y activistas sociales, como lo vimos en las marchas de los jubilados frente al Congreso.
Una cantidad importante de agentes de inteligencia inorgánicos están ya infiltrados en cada institución clave, partidos políticos, sindicatos y asociaciones barriales comunitarias de este partido.
En Morón existe un programa de seguridad con inteligencia artificial en el centro de monitoreo municipal, cuyo propósito es prevenir el delito, pero perfectamente puede estar infiltrado por agente del gobierno nacional, operando en consonancia con organismos de inteligencia policial.
El espionaje ilegal es fascismo declarado. Vienen tiempos oscuros para este distrito. Sus habitantes están indefensos y a estas evidencias me remito.