Otra vez sopa. Finalmente, la reunión
que el gobierno había convocado para hoy a la tarde con los productores
agropecuarios fue "cancelada", tras el enojo que provocó el acto masivo
realizado en Rosario por el sector. Así lo informó la oficina de prensa de la
Jefatura de Gabinete.
El incombustible jefe de Gabinete, Alberto Fernández, en
declaraciones radiales había criticado el tono opositor del acto realizado ayer
en Rosario y afirmó que "hablando así, es imposible" el diálogo.
Antes, ya había dicho, no sin gran malhumor que "yo no hago
un buen resumen" del acto realizado ayer por los productores en Rosario, y
sostuvo que allí vio "una clara actitud de no dialogar y de seguir poniendo
imposiciones".
"Dialogar así, es imposible", afirmó Fernández, con lo que
quedó abierta la posibilidad de que finalmente esta tarde no se concrete el
anunciado encuentro entre él y los productores.
En diálogo con Radio10 —una de los pocos medios con los que
habla— el jefe de Gabinete añadió que "me parece que no fue feliz" el contenido
de los discursos y agregó: "Lamentablemente pensé que iba a ser un acto donde
obviamente iban a plantear sus posiciones, pero no que iba a tener un contenido
de frases tremendas, de llamados al paro y de amenazas".
Con estas palabras, todas las expectativas que se habían
acumulado por parte de la población, vuelven a caer en saco roto. Cabe
preguntarse ¿Quién se perjudica con esta nueva suspensión de diálogo?
Evidentemente el kirchnerismo, el cual —de acuerdo a las
últimas encuestas que se han conocido en las últimas horas— ya no representa los
reclamos de la sociedad.
Esta desinteligencia se da en el peor de los
escenarios, con depósitos que han caído en casi 2 mil millones de pesos e
ignoradas tasas de interés para plazos fijos por encima del 14 y 12% para
grandes depositantes y minoristas respectivamente.
Según diario Ámbito Financiero, "la presión alcista
sobre el dólar, suba de las tasas de interés y abrupta caída del precio de los
bonos son los principales síntomas del actual clima de incertidumbre, que se
desató desde el 11 de marzo cuando el gobierno implementó las retenciones
móviles para las exportaciones agropecuarias. Los mismos fenómenos se habían
vivido en la última zozobra financiera".
Sólo resta cruzar los dedos...
Ana Grillo