Quienes siguen esta columna sobre los intereses pesqueros, portuarios y marítimos, han podido observar cómo las autoridades nacionales pesqueras se mantuvieron ausentes desde siempre... causalmente.
    La estrategia de la “no respuesta” es la misma aplicada al campo y a cada entrega de recursos por parte del matrimonio que nos Gobierna como si fueran Monarquía. Una parte de la Justicia —como parte del poder político— garantiza vulneraciones impensadas. La “conclusión” del juez federal Alfredo López es que, si bien la merluza ingresó al peligroso colapso “las autoridades pesqueras deberán elaborar un plan sustentable e integral de preservación”.
    Realmente resulta asombroso que un juez interprete la gravedad de la situación e inste a elaborar un plan sustentable y no gire las actuaciones al fiscal para iniciar actuaciones penales contra las autoridades por su responsabilidad plena, probada por la AGN-SIGEN en dicho colapso.
    Cabe recordar a los magistrados que a este desastre llegamos de la “mano” de funcionarios responsables, que certificaron su irresponsabilidad —valga la redundancia— ante el ex juez Martín Silva Garretón, copia que tiene en su poder el mismo magistrado.
    Aporto el escaneo de la audiencia, para que se brinde la debida difusión de este caso, que es otro icono de corrupción, en la destrucción de un patrimonio nacional de futuras generaciones. Aquí se ve cómo se incoa con medidas absurdas desde años.

 
Memoria

    La causa donde resulto querellante (Nº 15.540) está en la Cámara Federal desde junio de 2007, rebosante de pruebas emanadas de testimonios de inspectores y jefes de fiscalización pesquera y aunque es vinculante a las actuaciones arriba mencionadas, ni se la tuvo en cuenta.
    La otra causa, 15.956, sigue durmiendo la "siesta" sin culpables. Cuando el jefe de fiscalización, Alejandro Moscato, ante mi repregunta en el juzgado admitió que los controles a las descargas en las empresa “son aleatorios”, refrendó parte de la corrupción imperante. Causalmente, la SIGEN tomó fotos del distrito pesca Mar del Plata y constató graves irregularidades, similares a las que denunciara oportunamente.
    Mientras la mafia fiscalizadora compra últimos modelos y viaja en 4x4, los jueces federales penales siguen sin enterarse de que las auditorias nacionales certifican lo mismo que yo en ambas causas.
    Aporto resumen de “las conclusiones del taller Merluza” que casualmente son las mismas que clama la Nación: basta de corrupción.
    Conclusiones del taller para contribuir a revisar normativas para recuperar la pesquería de merluza*

· Problema mayor para la sustentabilidad: corrupción del sistema de control

o Solución primera

    Transparencia para demostrar que la corrupción no es institucional y para comenzar a cambiar: la autoridad de aplicación debe brindar acceso público a la información on line y en tiempo real de:

§ Posición satelital de buques

§ Partes de 72 hs

§ Partes de pesca

§ Actas de descarga

§ Cuenta corriente de cupos

o Solución segunda

Derogar el sistema de inspectores a bordo y reemplazarlo por abordajes sorpresivos de PNA con inspectores y auditores del sector.

o Solución tercera

Incorporar más tecnología a los controles.

· Es indispensable la revisión de la efectividad de las normas como práctica habitual y periódica con participación de los actores. En particular, deben revisarse las siguientes regulaciones:

o Norma que establece el porcentaje permitido de merluza en la pesquería de langostino.

o Norma que establece el porcentaje permitido de merluza juvenil en las descargas de merluza.

o Norma que establece el uso del DEJUPA

o Norma que establece el mallero de 120mm

o Normas que establecen zonas de veda

o El sistema de cupos de captura (¿se puede pensar en un sistema de regulación o cuotas de esfuerzo?)

§ Mejora de la selectividad: Es necesario adaptarse mejor a la variabilidad del ecosistema. En particular deben considerarse:

o Mecanismos de selectividad alternativos

o Aperturas y cierres dinámicos de las áreas de pesca

§ Se reconoce la necesidad imperativa y urgente de establecer una política pesquera nacional que, entre otros, incluya los siguientes puntos:

o Reducción de la sobrecapacidad pesquera en la pesquería de merluza y en las pesquerías relacionadas (por ejemplo, la de langostino). Hace falta:

§ Efectuar una investigación objetiva de la capacidad de pesca de la flota argentina y su evolución general Por buque.

§ Adoptar un plan nacional de reducción de la sobrecapacidad en sintonía con el IPOA respectivo de FAO.

o Promoción de mecanismos coordinados Nación-provincias que regulen la capacidad de procesamiento en tierra.

o Aprobación de un Plan de Manejo que incluya procedimientos para situaciones de crisis.

o Protocolos armonizados para recolección y uso de la información pesquera.

o Normas fundadas, a tiempo, sencillas, consensuadas y acordes con las pautas culturales:

§ Los fundamentos deben incluir la información científica utilizada, los protocolos del cálculo efectuado y toda otra información que haga transparente la norma adoptada.

o Refuerzo de la capacidad de investigación en función de un Plan Nacional de Investigación de los recursos marinos con eje en el INIDEP, pero con participación de otros institutos nacionales e investigadores, así como de los actores de la actividad.

§ Debe explorarse la factibilidad de obtener recursos económicos para lograr una pesca sustentable apoyándose en la documentación internacional que recomienda apoyar a los Estados ribereños y en desarrollo.

§ Determinación de una política de recursos humanos profesionales en la autoridad de aplicación, con personal jerárquico capaz y comprometido:

o Fortalecimiento de la carrera administrativa

o Designaciones mediante concursos públicos de oposición y antecedentes.

§ Creación y consolidación de un espacio institucional para el debate y el consenso, que funcione regularmente para establecer un sistema de manejo que incentive la cooperación y el comportamiento responsable de todos los actores involucrados en la pesquería.

    Mientras esto sucede, la Presidente habla ante el mundo sobre el hambre. Yo la invito muy respetuosamente, junto a su marido —Presidente ad hoc— a ver lo que sucede en Mar del Plata: chicos revolviendo la basura para comer, cuadros de desnutrición ocultos de hospitales locales y cantidad de chicos que no comen si la escuela está de paro. Hay una falta total de política social alimentaría fehaciente en Mar del Plata, cual Somalia y Etiopia. Aquí, donde según usted sobra comida, hay récord nacional de desocupación.
    Reitero —respetuosamente—, Sra. Presidente, venga a Mar del Plata yo la acompaño, verá cómo viven los hijos de fileteros en las villas de Vertiz, barrio Belgrano, Barrio Las Heras. En un país que arroja al agua miles de kilos de pescado por día y usted ni se inmuta.
    La falta de interés y la carencia de la más mínima idea en aplicar políticas nutricionales, en razón de los recursos pesqueros excedentes, está a la vista. Hay kilómetros de ostras en bahía San Blas que son "plaga" y que podrían aportar sobradas proteínas nutricionales a todos los chicos de la Argentina.
    Señora Presidente, respetuosamente me es menester recordarle que, tal como hoy juzgan a los genocidas de ayer que detentaron un poder omnímodo, los Kirchner también podrían emularlos, pues su política pesquera aplicada es otra clase de genocidio.
    "Era preciso corresponder a la confianza del pueblo, y me contraje al desempeño de esta obligación, asegurando, como aseguro, a la faz del universo, que todas mis ideas cambiaron, y ni una sola concedía a un objeto particular, por más que me interesase el bien público estaba a todos instantes ante mi vista". General Manuel Belgrano.

Roberto Maturana
Oficial de Marina Mercante-Investigador

*Ver: www.cedepesca.org.ar