El público compró más dólares que cualquier otro día, aprovechando sueldos y el medioaguinaldo. No es casualidad que el monto de negocios en el mercado minorista haya crecido 50%.
    En el último día de actividad normal de la plaza financiera, porque el feriado de hoy de Estados Unidos les quitará movimiento a todos los mercados del mundo, en particular al cambiario, el pequeño ahorrista fue protagonista. Un dato para observar es que el monto de negocios en el MEC, el mercado donde operan los corredores de cambios y abastece una parte de la plaza minorista, fue de u$s 311 millones, u$s 100 millones más que el día anterior y más del doble de lo que se negociaba habitualmente antes del conflicto con el agro. La gente comprando dólares sin respiro, es una señal de desconfianza en la gestión del gobierno.
    En el mercado mayorista, la historia fue distinta. En el Forex-MAE, la plaza donde operan los bancos, se negociaron u$s 489 millones, un volumen habitual. Pero mientras en el MEC no hay un monto mínimo para operar, en el Forex-MAE no se puede empezar a hablar con menos de u$s 100 mil.
    En estas circunstancias, el dólar abrió vendedor a $ 3,018. Parecía otro día de bajas. Pero de a poco empezó a subir con fuertes compradores y superó los $ 3,03. El Banco Central en ese momento, convalidó el alza al vender en el mercado de futuros contratos a precios más altos, rompiendo una tendencia. Enseguida, aparecieron los nervios de los que estaban vendidos a fin de mes a precios más bajos los días anteriores. El Central los volvió a desorientar y enseguida se calmaron porque el dólar contado, que llegó a tocar $ 3,0340 retrocedió a $ 3,0280 al cierre.
    Las preocupaciones por el precio del futuro no las tiene el público. Por eso operan más relajados. Lo que buscan es cobertura y cuanto menos cueste el dólar, mejor.
    Otro sector que estuvo muy activo es el que negocia con bonos en dólares depositados en el exterior y hace operaciones de «contado con liquidación» para sacar divisas del país por el mercado marginal. Ese dólar cotizó a $ 3,1925 y las operaciones se canalizaron a través de los BODEN 2012.
    El Banco Central, por su parte, vendió dólares en el mercado de futuros por más de u$s 50 millones. Su intervención en el mercado de contados fue neutra. Esta vez dejó subir los dólares en los distintos fines de mes, salvo el 31 de julio que quedó igual a $ 3,0302. Fin de agosto aumentó a $ 3,0490 (+0,13%); fin de setiembre a $ 3,070 (+0,16%); fin de octubre a $ 3,098 (+0,42%); fin de noviembre a $ 3,1148 (+0,15%) y fin de año a $ 3,1440 (+0,29%). Estos valores desequilibraron a los que vendieron divisas creyendo que el Central iba a seguir bajando al dólar. Martín Redrado, titular del Central, dejó en claro que la política de bajarlo a $ 2,90 es una alternativa que no sabe si va a utilizar.
    Los bonos subieron pero fue un movimiento reflejo por la fuerte baja de los títulos en los días anteriores. Las Nobac del Banco Central se llevaron casi la mitad de los negocios en el Mercado Abierto Electrónico (MAE). Las que vencen en setiembre y octubre próximo captaron $ 800 millones. No eran grandes jugadores, sino que hubo mucho «trading». Compraban y vendían en el día y le hacían una pequeña ganancia a cada movimiento. Las Nobac ajustan por la Badlar, que es una tasa variable que se forma cada día con el promedio de lo que pagan los bancos por plazo fijo a 30 días de más de un millón de pesos. Es la tasa más alta del mercado y actualmente está cerca de 17% anual. Como los inversores descuentan que por el conflicto del campo la Badlar seguirá en setiembre y octubre tan alta o más que ahora surgieron interesados de todos lados.
    Los bonos de la deuda argentina, por su parte, estuvieron más tranquilos. Hubo muchas compras al contado, algo inusual, por el feriado en Estados Unidos de hoy y por la necesidad de muchos bancos que no renovaron pases, de normalizar sus tenencias de bonos ante el Central.
    Por eso el Discount en pesos negoció a 72 horas apenas $ 100 millones y subió 0,81%.
    Entre los bonos posdefault, se destacó el Bogar que subió 0,90% con ayuda del Banco Central que tiene una particular atracción por este título y está haciendo buenos negocios.
    El BOCON PRE8, en cambio, perdió 0,20% y el resto de los bonos tuvieron subas irrelevantes. Lo que ocurrió con el cupón PBI en pesos es para analizar. El miércoles con escasos negocios, apenas $ 700 mil que no cubren el requisito para formar un precio representativo (el MAE exige que la operación sea de un millón de pesos como mínimo), bajó casi 3%. Ayer, se operó por $ 23 millones, porque el Central fue un activo comprador. Están al nivel del martes.
    Los bonos en dólares, por su parte, tuvieron una leve recuperación en Nueva York que hizo que el riesgo-país bajara 2,51% a 622 puntos. De esta manera, terminó una semana con alta volatilidad y nada indica que la próxima sea diferente. Hay que seguir con atención a los cupones PBI y al dólar. Lo que suceda hoy será intrascendente porque casi no habrá operaciones cambiarias.

Luis Beldi
Ámbito Financiero