Nada que no fuera realmente esperado. El psicólogo Jorge Corsi negó hoy ante la
Justicia haber participado de una red dedicada a la pederastia, admitió conocer
al resto de los imputados a los que definió como un "grupo de amigos" y calificó
como "raro" al joven que lo acusó de haberlo violado.
Así lo confirmaron a la agencia DyN fuentes allegadas a la
investigación, quienes precisaron que el psicólogo declaró cerca de una hora
ante la jueza de instrucción María Fontbona de Pombo.
A la magistrada se le cumple mañana el plazo para resolver la
situación procesal de los cuatro detenidos en esta investigación, por lo que
Corsi había pedido dar su propia versión de los hechos antes del dictado de la
resolución.
No obstante, los investigadores confían en que las pruebas y
testimonios colectados hasta hoy serían suficientes para el dictado del
procesamiento con prisión preventiva de los implicadas.
Respecto de las acusaciones en su contra, Corsi reconoció
mantener una amistad con los detenidos Marcelo Rocca Clement, Agustín López
Vidal y Augusto Correal, pero sostuvo que el grupo "no tenía ningún objetivo
ilícito".
Sobre el joven que declaró en la causa haber sido víctima de
un abuso sexual por parte de los acusados, Corsi admitió que lo conocía y que
había frecuentado su casa, pero dijo que nunca hablo con él.
Además, sostuvo que se trataba de un "chico raro" que "tenía
problemas e inventaba historias".
Al término de la indagatoria el abogado defensor, Roberto
Casco, dijo a la prensa que el imputado se declaró "inocente"· "No sólo ha
negado los hechos, sino que ha dado explicaciones coherentes y creíbles sobre
cuál fue la participación en el caso en el cual fue involucrado", manifestó.
El letrado dijo que Corsi negó también que alguno de sus
amigos "fueran delincuentes". Sobre el estado de ánimo del imputado, el letrado
aseguro que está "totalmente entero", aunque en estado de "shock" por todo "lo
que le ha representado esta situación".
Corsi había sido indagado en esta investigación tras quedar
detenido el 24 de julio, pero en ese momento se negó a declarar y no respondió
las preguntas de los investigadores.
La investigación dejó al descubierto una presunta red que
captaba a menores de edad en cibercafés porteños y mediante un mecanismo
de exhibición de material pornográfico terminaba involucrándolos en fiestas
sexuales en las que eran violados.
Las relaciones sexuales que los menores de edad mantenían con
la supuesta red de pederastas eran, según la hipótesis que maneja la Justicia,
subidas a Internet y distribuidas en un mercado especifico.
Corsi era reconocido como una de las máximas autoridades
académicas en violencia doméstica, además de ser profesor de la UBA y autor de
media docena de libros de texto.
Sólo resta una pregunta: ¿Cómo influye lo sucedido en este
tema en el marco de las falsas denuncias de violencia familiar y abuso sexual
que Corsi ha sabido avalar?
Preguntas sin respuesta.
Ana Grillo
Fuente DyN