El mexicano Rodrigo Iturbe, sospechado de
haber sido integrante de la banda de narcos que hacía negocios con la efedrina,
desmintió hoy ante el juez del caso tener vinculación con la droga y pidió un
careo con el imputado Sergio Ricardo "Ricky" Martínez, que lo había vinculado
con una supuesta reunión clave en el marco de ese affaire.
El mexicano no sólo reclamó enfrentarse cara a cara con el
padre del actor Mariano Martínez —ahora en libertad— para refutar sus dichos,
sino que la defensa además pidió la nulidad del reconocimiento que se hizo sobre
su cliente.
Es que, según dijeron a Agencia DyN fuentes del caso,
Rodrigo fue reconocido en rueda de presos como la persona que habría estado
en una reunión clave.
Pero —en rigor— el mexicano fue trasladado desde la cárcel en
el mismo celular del Servicio Penitenciario en el que llevaban otros detenidos
que iban a reconocerlo —entre ellos "Ricky" Martínez—: "En las dos horas de
viaje ya se habían presentado y hablado del caso", dijeron a DyN las fuentes
judiciales.
Al mismo tiempo, el juez de Zárate—Campana Federico
Faggionato Márquez, a cargo de la causa, escuchó una vez más al testigo Gustavo
Ricchiuto, el cirujano plástico que apareció en la causa para unir a varios de
los sospechosos en la causa de narcotráfico con el triple crimen de Sebastián
Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina.
Así lo revelaron a DyN fuentes judiciales, que precisaron que
frente a la nueva convocatoria de Ricchiuto varias de las partes del caso
reclamaron que no declarara bajo juramento de decir verdad sino como un
sospechoso más en la causa.
La investigación por la ruta de la efedrina, iniciada el 18
de julio último, está íntimamente ligada a los secuestros y homicidios de los
empresarios Forza, Bina y Ferrón: los tres fueron secuestrados el 7 de agosto
cuando estaban por cerrar un negocio que, se sospecha, tenía vinculación con la
efedrina y fueron hallados fusilados en un descampado del partido bonaerense de
General Rodríguez el 13 de agosto.
Faggionato Márquez, por ahora, decidió seguir considerando
a Ricchiuto como testigo, más allá de los reclamos de las defensas.
Simultáneamente, el juez también aceptó la ampliación de
la indagatoria de Rodrigo Iturbe, el mexicano detenido el 22 de octubre pasado
en su casa de Barrio Parque, en vísperas de tener que resolver si lo procesa, le
dicta la falta de mérito o lo sobresee en la causa por el comercio ilegal de
efedrina.
Las fuentes dijeron que el mexicano pidió hoy ampliar su
indagatoria para ratificar que no conocía a ninguno de los personajes de la
causa, salvo a Bina, a quien —explicó— se cruzaba eventualmente en un boliche
nocturno que ambos frecuentaban.
Según la causa por el triple crimen, Rodrigo y Bina
hablaron numerosas veces a lo largo de julio y se sospecha que la víctima
trabajaba para el mexicano.
Precisamente, Rodrigo Iturbe negó rotundamente los dichos
de "Ricky" Martínez —liberado el viernes pasado tras ser procesado como
partícipe secundario en la causa—, y pidió un careo con el padre del actor.
Es que, según la teoría del mexicano, "Ricky" Martínez lo
habría mencionado como el participante de una reunión que se habría hecho en una
estación de servicio de Barrio Parque con vistas a mejorar su situación
procesal.
Rodrigo Iturbe, de 35 años, que vivía en la Argentina hacia
dos años, fue detenido en la noche de 22 de noviembre en su casa de Sevilla
2990, de Barrio Parque, sospechado de haber participado en reuniones con Forza.
De acuerdo a esa versión, Forza habría empezado vendiéndole
efedrina a Iturbe, pero en determinado momento habría intentado quedarse con el
lucrativo negocio de la efedrina exportada ilegalmente a México.
"Ricky" Martínez, que declaró en la causa horas después de la
detención de Iturbe, también vinculó al mexicano en una reunión con Luis Marcelo
Tarzia (supuesto nexo entre la banda mexicana y las víctimas del triple crimen)
y Jesús Martínez Espinoza (el mexicano arrestado en Paraguay).
Además, de acuerdo a la causa, Ricchiuto contó que el 25 de
julio, dos semanas antes del triple crimen, Rodrigo estuvo reunido con Ferrón,
Forza y Bina en el Open Bar de Pilar en donde se había negociado la provisión de
400 kilos de efedrina semanales.
Luis Tarullo