De acuerdo a un monitoreo de las páginas
oficiales de la cámaras de diputados y senadores nacionales, complementada con
la lectura de la Guía que produce el Directorio Legislativo, se registra que
sólo 15,5% de los legisladores nacionales disponen de una página propia de
Internet para difundir su labor.
De esta manera, la gran mayoría de los miembros del Congreso
no aprovechan este formidable recurso, tanto para cumplir con la obligación
republicana de rendir cuentas sobre la labor legislativa, cuanto para brindar
información sobre el uso de los recursos públicos. A continuación se ofrece una
guía del contenido que podría brindar un legislador transparente en Internet:
currículum; declaración jurada; nómina de colaboradores, aclarando si se trata
de personal permanente, transitorio, contratado, pasante o voluntario,
incluyendo sus datos personales, tarea asignada, sueldo y dirección personal de
correo electrónico; teléfono directo del despacho del Congreso y su dirección de
correo electrónico; proyectos presentados; comisiones y grupos de amistad
parlamentaria que integra y su labor en las mismas; sus observaciones a
dictámenes de Comisión; discursos y votaciones en el recinto; monto y requisitos
para el otorgamiento de subsidios, becas de estudio y pensiones graciables, con
la identificación de los beneficiarios de las mismas y los criterios por los
cuales fueron seleccionados; viajes oficiales realizados; destino de los pasajes
aéreos y terrestres utilizados, con el nombre del pasajero; fechas de licencia y
vacaciones y registro de audiencias y gestión de intereses, tomando como base
los criterios del decreto 1172/03 del PEN.
En tanto, la mayoría de los 51 legisladores nacionales que
difunden su labor en Internet incluyen sus datos personales, los proyectos
presentados y las menciones de prensa. En varios casos ofrecen una suscripción
gratuita para recibir información por correo electrónico y otros disponen de un
formulario para enviar consultas o propuestas. En algunos otros, los propios
legisladores proponen encuestas, como las diputadas María Araceli Carmona (FPV)
sobre Yacyretá, Susana Genem (FPV) sobre la situación provisional y la senadora
Sonia Escudero (FPV) sobre el nivel de conocimiento de su gestión; mientras que
la diputada Adriana Puiggrós (FPV) dispone de un foro de discusión.
En materia de transparencia se destaca la senadora porteña María Eugenia
Estenssoro (CC), quien brinda un pormenorizado detalle de sus ingresos, tanto el
que tiene como senadora —con la copia del recibo de su sueldo en el Senado— como
del resto de su patrimonio. También ofrece un detalle parcial de los recursos
para colaboradores e incluye los datos y el correo electrónico de cada uno de
ellos. Además, informa sobre cada una de sus votaciones en el recinto.
Por su parte, la diputada Laura Sesma (PS) brinda la
nómina actualizada de los beneficiarios de los subsidios, becas y pensiones
graciables que ha otorgado y el senador Juan Carlos Marino (UCR) detalla el
monto del que dispone para otorgar becas, subsidios y pensiones, con los
respectivos requisitos para solicitarlos. El titular del radicalismo, el senador
jujeño Gerardo Morales, también ofrece los nombres de su equipo de trabajo y en
ayuda a personas y entidades brinda la nómina de beneficiarios de subsidios,
becas y pensiones, mientras que su colega Escudero incluye un listado con los
beneficiarios de los subsidios.
En el caso de los senadores José Pampuro (FPV) y Ernesto Sanz
(UCR), ambos incluyen su declaración jurada, pero el segundo brinda directamente
la copia completa en pdf de su presentación ante la AFIP.
Un pionero en materia de transparencia había sido el diputado
porteño Esteban Bullrich, quien ofrecía un detalle de los ingresos que disponía
como diputado y la nómina de sus colaboradores con la respectiva remuneración de
cada uno de ellos. Sin embargo, toda esta información ya no aparece en su página
personal y el contenido de la misma hoy está concentrado en sus apariciones
mediáticas.
Es evidente que aún los legisladores más transparentes tienen
todavía muchísimo más para informarle a la ciudadanía, lo mismo que el resto del
Club de los 51 que tuvieron la sana decisión de crear su página personal. En
cuanto a los 278 legisladores nacionales que aún no disponen de página de
Internet para difundir su labor, con estos apuntes los mismos ya tienen una guía
bastante completa como para comenzar a hacerlo.
Gabriel Salvia