El titular de la la Asociación de
Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) señaló que la presión de la AFIP
sobre las empresas periodísticas es una "espada de Damocles que el Gobierno
utiliza con astucia" y que la misma, "que no es casual, que no es ingenua,
tiende a sofocar a la prensa libre".
La alocución de Laiño abordó la difícil situación económica
financiera de la mayoría de los medios periodísticos del país, agravada por una
"presión fiscal abusiva" que forzaría el cierre de muchas empresas del sector.
El titular de la entidad reseñó en su discurso ante la Junta
de Editores las numerosas reuniones celebradas con el jefe de Gabinete y con
otras autoridades nacionales para que el Estado asuma el compromiso —previsto en
el Decreto 746/2003— de dar solución al desequilibrio fiscal que amenaza a los
medios.
ADEPA publicó una Solicitada titulada "Presión
Confiscatoria" en la que señaló históricamente cuáles fueron los pasos
impositivos y legales dados por las empresas periodísticas, hasta que la
AFIP "desde hace tres meses" comenzó a "intimar, de manera abusiva, a centenares
de medios de prensa de todo el país a través de cartas-documento, inspecciones
integrales, determinaciones de deuda cuya existencia está en debate y otras
herramientas de presión".
Al respecto, Laiño agregó que "tanto el jefe de Gabinete como
otros funcionarios de la Casa Rosada habían asegurado que 'era voluntad
política' del Gobierno dar una solución definitiva al problema" y que la
Presidenta "firmaría un Decreto para que los medios periodísticos gráficos y
audiovisuales salden sus deudas impositivas mediante la difusión de publicidad
oficial".
El presidente de ADEPA explicó que "todo parecía
encaminarse hacia una solución definitiva y que la firma del Decreto era
inminente".
"Pero inexplicablemente o, tal vez explicablemente, la
firma de ese Decreto se fue dilatando. Ayer (miércoles) mantuve comunicaciones
telefónicas con dos subsecretarios de la Jefatura de Gabinete que me informaron
que la Presidenta no firmó ese Decreto. Es decir, que todas las promesas de dar
solución al problema se desvanecieron en una mañana de Olivos", añadió.
Laiño señaló también que, ante las promesas incumplidas del
Ejecutivo, se resolvió la publicación de la Solicitada, cuya difusión estaba
prevista para principios de marzo pasado, pero se postergó atendiendo los
"pedidos insistentes" del jefe de Gabinete.
La situación fiscal que afecta a los medios periodísticos
constituye una "espada de Damocles que el Gobierno utiliza con astucia",
reafirmó Laiño.
La libertad de prensa, resaltó, "requiere de un sostén
económico que posibilite la independencia editorial y esta presión del Gobierno,
que no es casual, que no es ingenua, tiende a sofocar a la prensa libre".
También dijo que "hay cerca de 40 diarios en grave
situación económica" y que la presión fiscal "los puede conducir al cierre,
por lo que en muchas ocasiones le hemos dicho al Gobierno que uno sólo de
nuestros asociados que caiga será una herida para el conjunto difícil de
cicatrizar”, explicó.
Por último, el presidente de ADEPA exhortó a los medios
asociados a continuar "unidos, a mantener la misma vocación de lucha y empeño
institucional" para "evitar que la prensa libre, de la cual el país se ha
enorgullecido a lo largo de más de un siglo, no ceda a los embates
circunstanciales de una política agresiva".
En el cierre, el periodista Jorge Brinsek (Primera Edición,
de Posadas) relató que “todas las semanas, como una maniobra de hostigamiento”
tiene inspecciones de la AFIP en el medio que dirige, situación que también
soportan otros medios del país, tras lo cual el ex titular de ADEPA, Gustavo
Víttori (El Litoral, de Santa Fe) advirtió que "no sólo está en riesgo la
libertad de prensa, sino que el Estado de Derecho ha sido vulnerado por los
hechos".
Hugo Grimaldi