La semana pasada, el Conicet hizo circular un comunicado entre sus investigadores para “aclarar algunas cuestiones referidas a la relación de nuestro personal con los medios de comunicación”, afirma hoy diario Clarín en un artículo de Leonardo Mindez. Es que en los últimos días se instaló una nueva polémica en la comunidad científica.
La carta, dirigida a los investigadores y firmada por el Vicepresidente de Asuntos Tecnológicos,Faustino Siñeriz, entre otras cosas advierte que “sólo la Presidente del Conicet, o la persona en quien ésta expresamente delegue tal facultad, puede expresar de modo válido la opinión institucional del Consejo”.
El texto afirma que es necesaria una “unidad de discurso” en la comunicación institucional de ese organismo y solicita que cualquier opinión que emitan alguno de los 6.500 investigadores sobre sus investigaciones lo haga “aclarando cuidadosamente que tales resultados u opiniones no representan necesariamente la opinión del organismo sobre el tema”.
“La idea de ‘unidad de discurso’ puede ser entendible en determinadas organizaciones jerárquicas (desde las fuerzas armadas a una empresa), pero es más riesgosa en una institución conformada por investigadores”, indicó el filósofo y jurista Roberto Gargarella.
Ante la consulta de ese matutino, el director de Comunicación del Conicet, Ignacio Duelo, explicó que sólo se trató de recordar la “diferencia” entre las opiniones personales y las del Instituto y subrayó que “para el Conicet, el pluralismo es un valor” y que los investigadores “no tienen que tener ningún temor”.
De esta manera se suma un organismo estatal más a la unidad de discurso promovida por el Gobierno a todas aquellas instituciones financiadas con dinero público. Página/12 primero, la propia agencia de noticias del Estado, Télam, y ahora parece ser el turno los científicos argentinos.
Equipo de Actualidad de Tribuna de Periodistas