Ada Maza, la actual senadora nacional por La Rioja, estaría por renunciar a su banca para facilitar la asunción de quien fuera suplente de su candidatura en las elecciones del 2001, es decir, el actualmente asilado en Chile Carlos Menem.

    Las tratativas entre Maza y el ex Presidente se vienen llevando adelante desde hace meses, pero en las últimas semanas abundaron los “chasquis” entre Santiago de Chile y La Rioja y en varias comunicaciones telefónicas mantenidas desde teléfonos supuestamente limpios de intercepciones telefónicas se habló sobre la renuncia de la mujer.

    No por reiterativa esta información deja de causar sorpresa. “Menem sabe que mi banca está a su disposición”, repite la senadora desde que fue electa hace tres años y el 14 de mayo del 2003 decidió –en conjunto con su jefe- no machacar mas con el tema públicamente por temor a que la administración de Néstor Kirchner ideara una táctica para impedir la asunción del ex Presidente.

    El autor de este informe se comunicó con la oficina de la senadora y la respuesta de los voceros (por algo Ada Maza decidió respondernos por medio de allegados y no en forma personal..!) no deja lugar a mayores interrogantes. Se nos dijo que la representante de La Rioja no visitó nunca a Carlos Menem en Chile. Pero si bien fueron contundentes al negar viajes solapados al país trasandino, en cambio hubo demasiada ambigüedad respecto a la posible renuncia a su banca. Si Ada Maza no pensase renunciar, lo hubiera mandado decir con todas las letras; o lo hubiera hecho vía mail –como fue nuestra solicitud-, para dejar en claro su postura que se podría haber registrado a partir del envio de un correo electrónico que negase esa posibilidad.
   La estrategia del ex Presidente de regresar a la Argentina revestido de sus fueros Parlamentarios tampoco es tan sencilla de realizar como se supone en el entorno de Menem.
   Pero la confianza que tenían los menemistas puros a mediados de la semana pasada se borró repentinamente cuando supieron que alguna negociación judicial encarada en el mayor de los secretos por el abogado Oscar Salvi había fracasado. En verdad, hasta se habla de acuerdos non sanctos con los jueces que tienen a su cargo las causas por las cuales el ex Presidente podría ser detenido ni bien arribe a la Argentina.
   “Yo lo voy a buscar a Ezeiza, conmigo no se jode”, habría sido la expresión del fiscal  Stornelli cuando supo de las versiones que daban cuenta del regreso al país de Menem.
   El sábado pasado, cuando Menem hizo declaraciones desde su apoltronamiento chileno señalando su regreso próximo al país y su reinserción en la política argentina, barnizó sus dichos con una expresión bíblica (“Lo demás vendrá por añadidura..”) que pone de manifiesto la jugada en ciernes descripta en estas líneas.
   Dicen las voces indiscretas de siempre que hubo un dinero –se habla de casi un cuarto de millón de dólares- destinado a la operación regreso pero ese dinero, o parte de él, no habría llegado a sus destinatarios finales.
   Si Carlos Menem llegase a apartar al estudio Salvi de su defensa, quizás podría ahondarse más en estas versiones que por ahora conviene dejar en “stand by”.


El cupo maldito…

   En un hipotético escenario parlamentario en el cuál renuncie la senadora Ada Maza, la asunción de Carlos Menem como su reemplazante no se vería tan fácil de realizar. En la Comisión de Asuntos Institucionales de la Cámara Alta se sostiene que para mantener el cupo femenino, de renunciar Ada Maza a su banca la misma debería serle asignada a una mujer para asá mantener el tan mentado cupo femenino.
   La punta de lanza para defender esta postura en representación del kirchnerismo (bah, más de Alberto Fernández) e impedir la asunción del ex primer mandatario, es la senadora Vilma Ibarra, la gran picapedrera de los dirigentes masculinos.
   Hay un antecedente que nunca se resolvió en la Camara Alta: Cuando la legisladora correntina Isabel Viudes renunció para que asumiera Raúl Romero Feris, los debates internos en la Comisión de Asuntos Constitucionales fueron casi feroces pero nunca se arribó a una decisión que pudiera sentar precedente para el caso Carlos Menem-Ada Maza.
   Vilma Ibarra dijo el año pasado respecto a esa posibilidad: “Si Maza renuncia, su banca debe ser ocupada por la senadora suplente mujer.”.
   A principios de esta semana, hombres allegados a Eduardo Duhalde sabían de este intento de retorno legislativo de Carlos Menem, y hasta mencionaban el nombre del operador político que estaba encargado de la maniobra: El ex Interventor en ATC Horacio Frega, quien lleva registrados algunos periplos a tierra trasandina en los últimos meses. La SIDE  mantiene una poco discreta vigilancia en Chile y conoce los movimientos de Frega en la residencia del matrimonio Menem-Bolocco.
   La gente de Duhalde opina que, si Menem no puede reemplazar a Maza aunque ésta renuncie, de todas formas enturbiará el panorama político pues argumentará nacional e internacionalmente su presunta condición de perseguido político.
   En esta fanfárrea de "dimes y diretes" el dato cierto es que la senadora Ada Maza no dijo que "no" ante nuestro requerimiento acerca de su presunta renuncia. Y no negarla es afirmarla, sin dejos de duda.

 Jorge D. Boimvaser