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Este martes 23 de octubre se cumple un año del segundo mandato presidencial de Cristina Fernández, al cual accedió con más del 54 por ciento de la preferencia popular.
Lo cierto es que los primeros aniversarios de la Presidenta no se han caracterizado por su sencillez. En el primero, de su primer mandato, la crisis del sector agropecuario la enfrentó con la sociedad y desencadenó en una gran movilización en plaza de mayo y varios puntos de país, lo cual desató un conflicto con su entonces vice, Julio Cobos y con el multimedios Clarín.
En esta oportunidad, su segundo-primer cumpleaños, la encuentra enfrentada nuevamente con una amplia porción de la sociedad a causa de una seguidilla de malas decisiones —sobre todo económicas—, con un vice jaqueado por denuncias de corrupción y a la espera de que Clarín se desprenda de sus licencias.
Y hay más “coincidencias”. Según una reciente encuesta de la consultora Poliarquía, el actual descenso en la imagen de la mandataria es semejante a la caída que tuvo en el 2008; sólo que ahora, esa caída se registra desde niveles más altos, siendo que la muerte del expresidente Kirchner en 2010 actuó como un trampolín para su popularidad.
“La imagen de Cristina alcanza los 37 o 38 puntos” —explicó Berensztein en el cierre del Coloquio de Idea— casi la mitad de los 70 que ostentaba en el momento de las últimas elecciones. Sin embargo, en la época del enfrentamiento con el sector agropecuario descendió la misma proporción, pero desde 56 puntos que ostentaba previamente.
En la actualidad, Cristina se encuentra en medio de un debate sobre una eventual re-reelección de cara a 2015, más que nada influida por la militancia kirchnerista y algunos de sus funcionarios, más que por ella misma.
Pocos pueden creer que recién haya pasado un año desde aquel domingo 23 de octubre de 2011 en el que Cristina se mostró exultante junto a Amado Boudou, festejando y bailando de luto ante la militancia. En poco tiempo han ocurrido tragedias provocadas por la corrupción, cambios de gabinete y denuncias por desaguisados varios, llevando al Gobierno a un amplio rechazo popular.
Aún restan tres años más de ejercicio y, si la Constitución Nacional logra ser reformada, tal vez un tercer-primer cumpleaños más.
Eliana Toro
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