¡Recién Publicado!
cerrar [X]

Tecnópolis, inundaciones y mentiras descaradas

32
EL GOBIERNO NACIONAL NIEGA RESPONSABILIDADES, PERO LAS ADMITE
EL GOBIERNO NACIONAL NIEGA RESPONSABILIDADES, PERO LAS ADMITE

Las terribles inundaciones comenzaron dejando la friolera de seis muertos, luego algunos indicaron que ocho, y por estas horas se habla de más. Prometía el fenómeno climático desde temprano que, al menos en la corta semana que comienza, se iba a disputar un nuevo round entre Cristina Fernández y Mauricio Macri.

 

Aún no se puede determinar con certeza si los fallecidos responden a la inundación o a factores colaterales. No es la cuestión, en definitiva, en términos de poder, la muerte “paga” para algunos, y cobra víctimas políticas (para otros).

El primer damnificado serio es el habitante del Gran Buenos Aires, parece que ni “ella” ni los medios los van a ver en las desgracias, no hay “guardia de auxilio”, ni guardias periodísticas en el GBA, sus habitantes son kelpers de la política y de los grandes intereses, ciudadanos de segunda, por lo visto.

La cobertura de las inundaciones, salvo excepciones, debió ser 3 x1 por los cientos de lugares anegados en La Plata, La Matanza, Lanús, San Martín, Morón, Haedo, etc. Pero, como ya pasaba en 2001, tiene que haber algún homicidio grande o un secuestro importante para que los “barones de la información” se trasladen extra muros.

El tiempo, inclemente, se descargó duro sobre una ciudad que parece tener vida, una ciudad cada vez mas de cemento, sobreconstruida, enroscada en forma fetal hacia su interior desde las individualidades de quienes se quieren proteger de la inseguridad “de afuera”, una ciudad que cree que es más insegura en las periferias, periferias a las cuales parece haberle dado la espalda definitivamente.

Ya no solo hay un Gran Buenos Aires, es un territorio al cual ya ni siquiera van los noteros cuando se inunda, por miedo a perder el equipo, la billetera, el saco o hasta la vida misma, sino que existe un “contorno” en la misma Ciudad. La “periférica” Avenida General Paz vuelve a aparece como una frontera, y sus partes exteriores (las de la ciudad) vuelven a ser estudiadas como no comprendidas en la idea progre de Ciudad Museo: Villa Real no es la calle Caminito, Mataderos no es San Telmo, Lugano no es Caballito.

Si bien la obra del Arroyo Maldonado se veía como prioritaria, tiene algo de centralidad, esa centralidad que ahoga desde hace 200 y pico de años a los argentinos. Resulta que, los no conocedores (la mayoría de ignorantes, o “noteros” que hablan, algunos en vivo y sin editar) descubrieron que no solo el Maldonado y el Vega son “arroyos” de la Ciudad de Buenos Aires.

No solo eso, a los lugares que aún no han sido beneficiados con obras —como Palermo Villa Crespo y la cuenca del Maldonado— en referencia al arroyo Vega en Belgrano, hubo de sumarse otras inundaciones que sorprendieron por su furia, esto es en toda la zona de Saavedra, Núñez y Av. General Paz.

Desde estas páginas siempre se ha criticado la falta de coordinación en las políticas públicas en el área metropolitana (comúnmente conocida como AMBA) que guardan motivos históricos. Cuando en 1880 se proyecto esa avenida limítrofe “de 100 metros de ancho que a norte, sur y sur oeste formarán el límite” de la planeada Ciudad Capital de los argentinos, la zona era todo campo.

 

Así, se ha notado en muchos análisis el desmadre de tránsito, el descoordinado trasporte, cuyo (des)control se encuentra a cargo del organismo CNRT, un verdadero “vale todo” típicamente argentino, garantía del nunca hacer nada, nunca sancionar a nadie.

Hoy se suman los problemas de abastecimiento, de traslado de personas y mercaderías (lo que se sigue haciendo anárquicamente) el ingreso indiscriminado de autos y otros vehículos, por autopistas que “ingresan” autos sin saber donde estos van a estacionar, provocando los caos acostumbrados, el mismo caos que, esos millones de autos, probarán, indefectiblemente, a su regreso. Todo esto ocurre mientras siguen sin ser arreglados los trenes y sin ser regulados las combis; en fin, siempre la anarquía, el vale todo, la ley del más fuerte.

 

Nace la “guerra de la lluvia”

 

Como no puede ser de otro modo, ahora quedó inaugurada la “guerra de la lluvia”. ¿Por qué? Muy simple, se ha incorporado el caos hídrico a los enfrentamientos que ya tienen acostumbrados a los argentinos.

Es sabido que el Arroyo Vega inundará, indefectiblemente, Coghlan y Belgrano, por lo menos hasta que el Gobierno Federal autorice lo aprobado por la Legislatura Porteña, las obras sobre el Arroyo Vega.

No existe una controversia orográfica o geográfica, en un 99% las aguas del Vega nacen dentro del territorio capitalino y desembocan (luego de arrasar con todo lo que hay a su paso, sobre la calle Blanco Encalada) en el Rio de la Plata, pero el Arroyo White y el Medrano colectan, en parte, aguas del Conurbano.

Resulta que, desde San Martín y Vicente López entran arroyos a la zona norte de la ciudad. La orografía es antojadiza, no sigue patrones políticos ni internas partidarias.

Como el mayor desastre lo viene produciendo el siempre inundado Técnopolís —que terminó siendo una especie de parque de diversiones, mezclado con museo, en el cual se exhiben productos tecnológicos de la década del 50— indefectiblemente, cada vez que caen cuatro gotas el Gobierno emite aclaraciones sobre su responsabilidad en el agravamiento de las inundaciones en la zona de San Martín. Mediante un comunicado, aseguró que son "falsas e infundadas las versiones que adjudican algún tipo de responsabilidad a Tecnópolis por las inundaciones producidas en la zona luego de la tormenta de esta madrugada, diciendo que no “existen compuertas” para evitar que el agua excedente de las lluvias”.

Lo que pasó es que San Martín (su localidad, Villa Maipú, más precisamente) es una zona baja, altamente inundable. Debajo de la denominada “Avenida Central” de punta a punta, corre un arroyo entubado, que al llegar al borde limítrofe se choca con los terrenos del ex Regimiento de Martelli, esto es llegando a Avenida de los Constituyentes (límite entre San Martín y Vicente López). Antiguamente, existía un canal abierto en los terrenos del Regimiento. Cuando llovía, se inundaba todo Villa Maipú (por mal mantenido el canal) y se anegaba el campo inmenso que ocupaba el Regimiento.

Hoy, se emite un comunicado la feria Tecnópolis diciendo: “El canal Medrano pasaba sin entubar por las tierras del Batallón de Villa Martelli y toda el agua que corría desde el municipio de San Martin llegaba a un canal abierto que podía desagotar 80 mm /seg.”

Lo que ocurrió es que el Estado Nacional, a través de Tecnópolis, llenó de cemento un enrome terreno, abrió calles y contribuyó a que las aguas corrieran, que no drenaran ni filtraran. Además, cortó cientos de árboles, esos que no les importa en Villa Martelli, y por los que se rasgan las vestiduras en la Av. 9 de Julio.

No se tuvo mejor idea que abrir la calle desde que permanece cerrada permanentemente, solo se accede a Tecnópolis, y que dicen se hizo para que los funcionarios pudieran salir por una entrada diferente a la del público masivo que acostumbra a ser llevado en micros naranjas, esos que algunos días encaran para Plaza de Mayo o a algún acto cristinista, y que cuando Tecnópolis funciona, hacen el “City Tour” para dicho predio.

A esa apertura de calle, los vecinos de San Martín le llaman “dique” o “compuerta”, pero en realidad su inundación se debe al excesiva agua caída, sumado a la falta de mantenimiento del arroyo que corre por Avenida Central, cosa que ya fue estudiada y remediada en otros tiempos y con otros intendentes. Dichas aguas, antes, también se drenaba inundando los cuarteles de Martelli, y hoy no pueden drenar y se tapona.

Paradojalmente, Tecnópolis funciona como una palangana gigante que canaliza, desde que se hicieron sus obras, desde Villa Martellí y hacia adelante, porque se hizo un ducto mayor al que se debería haber realizado, inundando el barrio de Saavedra. O sea, Tecnópolis no se quiere inundar (hizo una palangana de cemento, y aumentó el ducto) y no le importa mucho como sigue” las aguas que antes permanecían afianzadas en el terreno, hoy gran mancha de cemento.

Así lo reconoce el comunicado: “En 2011 se entubaron los 800 metros del Medrano que atravesaban el predio de Tecnópolis con un conducto cuya capacidad es de 120 mm/seg. Esa obra en sí ya sirve como contenedor del excedente y mejora la recepción de las aguas desde San Martín”. Esto  es mentira, lo que asegura que San Martín no se inunde es el mantenimiento limpio del canal que corre debajo de Avenida Central, el ex Intendente Ivoscus lo de mostró manteniéndolo cuando fue intendente de San Martín. 

Como la Ciudad de Buenos Aires sólo tiene un entubamiento del Medrano de 79mm/seg. —aún no se comenzaron las obras de ampliación, ya existe una Ley y un presupuesto de la Legislatura, no se puede empezar  y ya se cayó una licitación, ya que el gobierno nacional no autoriza el endeudamiento de la Ciudad— Tecnópolis hizo un reservorio, que evidentemente es insuficiente.

El exceso de cemento del complejo, un estanque exiguo, el talado de varias hectáreas de árboles y pérdida de terrenos vivos (piso de tierra) impiden que la lluvia drene naturalmente. ¿Qué pasó con el diluvio? Muy simple, no hay que ser un ingeniero para darse cuenta que las aguas subieron a la superficie, inundaron el barrio de Saavedra, parte de la Zona de Vicente López, Gral. Paz y de ahí su imparable curso.

Como dice el adagio legal “a confesión de parte, relevo de pruebas”. Tendremos guerra política, en el futuro, hasta por el curso de las aguas.

 

José Terenzio

 

 
 

32 comentarios Dejá tu comentario

  1. Quiero explicarle a los lectores, como autor de la nota, que la referencia de milímetros x segundo en la nota es tal cual el comunicado emitido por Presidencia de la Nación. No soy Ingeniero. En consecuencia, no siendo técnico, derivo la observación de procedencia/improcedencia del dato a los técnicos que hicieron dicha nota, supongo, habrán repetido lo que los constructores de Tecnópolis les trasmitieron; Sin perjuicio de ello, estimo que el concepto se entiende, Tecnópolis funcionó como una gran EMBUDO, PRUEBEN PONER UN EMBUDO EN EL PICO DE UNA BOTELLA, ÉCHENLE MUCHO LÍQUIDO Y VERAN DOS FENÓMENOS: 1.- PARTE DEL LÍQUIDO ENTRARÁ ACELERADAMENTE A LA BOTELLA 2.- EL RESTO DEL LÍQUIDO SE DESBORDARÁ POR DONDE ENCUENTRE LUGAR EN SU CARRERA En consecuencia, la "excusa" de Presidencia nos demustra la maldad y la inoperancia (por odio político) de la construcción de Tecnópolis, simplemente, no les importó funcionar como un embudo, una gran palangana colectora de aguas que cayó cual pico de surtidor sobre Saavedra; Respecto de Villa Maipú, la construcción de la calle para ingresar a Tecnópolis, por sobre el arroyo, frente a avenida central (una especie de continuación falsa) funcionó involuntariamente como UN TAPÓN... Y TODO PARA QUE LA "SEÑORA" Y LOS FUNCIONARIOS ENTRARAN A LOS ACTOS OFICIALISTAS PUDIERAN ENTRAR Y SALIR POR LA PUERTA "DEL COSTADO", ergo, la calle que les refiero. Párese el interesado en el boliche "Pancho del 46" (esquina de Av de los Constituyentes y Av Central, para quien no es ducho o Salmanticense) y compruébelo de manera visual

  2. al tocayo Terenzio, coincido con ud. en el comentario. cuando la voluntad y prepotencia politica se expone en su más alto grado de actuación. ¿se hizo un estudio de impacto ambiental cuando de ejecutó Tecnopolis? ¿no son los árboles "sagrados"? en el afán de destruir al enemigo no se escatiman recursos de amparo, protestas y piquetes remunerados con planes sociales, etc. mientras tanto hacen exactamente lo mismo, o peor que los actos que dicen que está mal.. saludos

  3. EXCELENTE. asì con mayìsculas. No solo marca responsabilidad al Intendente Macri, sino tambièn al panqueque Scioli ....claro...Ivoskis hizo cosas bien y otras no tanto...los q somos de San martìn lo sabemos...pero eso està bien. TOTALMENTE ENTENDIBLE la redacciòn, me parece bien redactado, con lenguaje llano y sin rodeos como debe ser. Aquellos q prefieren lo màs florido de la lengua castiza, deberìan profundizar la lectura en otros idiomas para apreciar lo escrito en español. Felicitaciones.!

  4. La desventaja de internet: cualquier gil escribe lo que le pinta y parece tener entidad y saber. "No hay que ser un ingeniero para darse cuenta que las aguas subieron a la superficie", pone... Se nota que no sos ingeniero o ya no tendrías matrícula. ¡El agua no subió de ningún lado, bajó del cielo, capo! Seguí con los juicios que eso es lo tuyo. Se nota que de lo que escribiste no tenés ni idea. Ejemplos. La palabra orografía alude a montañas y montes, inexistentes en Buenos Aires. Me pregunto si habrás querido poner "topografía" y tu desconocimiento del tema tratado te hizo confundir. El arroyo White no colecta aguas del conurbano, nace en la CABA (¡¡con sólo googlear "arroyo White" hubieses chequeado esto!!). Decís que antes no se inundaba por la erogación a través de un canal pero ahora sí, que hay un canal mayor y un reservorio. Insólito. Y podría seguir... Tema aparte la escritura, ¿no? Claro: ¡si esto es periodismo, vos podés ser ingeniero!Lo "de mostrás" cuando ponés "Ivoscus lo de mostró" y tantas otras veces. Para finalizar, unas preguntas. ¿Sólo el cemento de Tecnópolis te parece responsable de impedir la infiltración? El que usaron en el DOT será una esponja para vos. Y última. ¿El color de las fotos es porque son todos re PRO? ¿O sos vos sólo? Mamita...

  5. Vivo en Villa Maipú San Martín. En el año 85 el barrio sufrió 2 inundaciones importantes. Luego de eso los vecinos hicieron reclamos y lograron que se haga un cuenco aliviador, el cual se hizo en Villa Martelli partido de Vicente Lopez. Con esa obra las inundaciones pararon. En el 2001 se sufre una nueva inundación causada por falta de mantenimiento del cuenco aliviador, bocas de tormenta entre otras cosas. Se pone en condiciones todo eso y vuelven a parar las inundaciones. Hace aproximadamente 3 años hacen Av, Constituyentes a nuevo, muchos vecinos vieron y denunciaron en la Municipalidad de San Martín que había caños para el desagote del agua que estaban tapados con basura, barro y cemento, dejando libre menos de 1/4 de su capacidad total. Dichas denuncias no fueron atendidas. Meses después comienzan las obras para la construcción de Tecnópolis, las cuales incluyen la reducción del cuenco aliviador a menos de 1/4 de su tamaño original. Se entuba el arroyo Medrano, lo cual también quita capacidad de desagote. Los terrenos donde hoy está Tecnópolis antes eran tierra y árboles por lo cual eran un drenaje natural, hoy eso es cemento, el agua no escurre. Sumado a falta de mantenimiento en bocas de tormenta y demás. El resultado: reiteradas inundaciones en Villa Maipú y alrededores. Hubo zonas del barrio con más de 1,70 m de agua adentro de las casas. Los vecinos estamos pidiendo que se realicen obras que devuelvan el tamaño original del cuenco aliviador, que el arroyo vuelva a estar a cielo abierto y todo lo que sea necesario para que no se vuelvan a producir inundaciones como las del pasado 2 de Abril. Nuestro reclamo no lleva ninguna bandera política.

Dejá tu comentario

El comentario no se pudo enviar:
Haga click aquí para intentar nuevamente
El comentario se ha enviado con éxito
Tu Comentario
(*) Nombre:

Seguinos también en

Facebook
Twitter
Youtube
Instagram
LinkedIn
Pinterest
Whatsapp
Telegram
Tik-Tok
Cómo funciona el servicio de RSS en Tribuna

Recibí diariamente un resumen de noticias en tu email. Lo más destacado de TDP, aquello que tenés que saber sí o sí

Suscribirme Desuscribirme

Notas Relacionadas

Cristina, Macri y Scioli, los responsables de la tragedia

Nadie tiene la culpa y todos tienen la culpa. La inundación que produjo la feroz tormenta de ayer dejó como saldo casi 50 muertos e infinidad de desaparecidos y evacuados.  ¿De quién es la culpa? ¿De Macri, de Scioli o de Cristina? ¿Fue...