Debo decir que estoy sorprendido, ya que nunca antes me habían llegado tantas cartas de queja por un artículo periodístico publicado en Tribuna de Periodistas.
Se trata de la nota “Carrió es Karrió: Caballo de Troya o quinta columna”, firmada por Enrique Piragini. Una de las tantas misivas que llegó a mi casilla de correo es la de Alejandro Reyes, quien manifiesta:
Soy un asiduo lector del portal. En este caso me resulta casi obligatorio escribirle ya que no encuentro sentido a la nota a la que hago referencia más abajo.
Si bien no comparto la opinión del autor de la nota, debo decir que pareciera faltarle algún párrafo a la misma. No encuentro ningún argumento explícito que justifique su opinión.
Ni siquiera hay algún hecho resonante en los medios que acuse de justificativo. No es el estilo de Tribuna subir notas que solo manifiesten una opinión, del tono político que sea, sin estar basados en información tangible o actual.
Creo que mi opinión es similar al resto de los foristas que dejaron sus comentarios pero de manera poco clara y agresiva en el foro. Como bien exprese al principio, no comparto la visión del autor pero soy abierto a escuchar y leer las distintas opiniones que cada uno ofrece y me parece que al hacerlo en un medio amplio y conocido como este portal, hay que hacerlo con claridad y de manera completa para no generar el malhumor y rechazo de los demás lectores.
Luego de leer el artículo cuestionado, no puedo menos que decir que comparto lo dicho por Alejandro. Es más, yo no podría haberlo dicho mejor.
La nota de Piragini está adjetivada por demás, tiene un nivel de agresividad que pocas veces he visto en este portal.
Desde ya que se trata de una columna que viola varios tramos del Manual de Estilo de este sitio. Por empezar, el punto 1.7 de la sección “Principios éticos”. Allí dice claramente que:
Tribuna de Periodistas propugna el respeto a la vida privada de los ciudadanos, a las instituciones que conforman la sociedad, a la moral social y a la integridad del territorio nacional. En tal virtud, en sus artículos que produzca y emita no acepta frases que puedan constituir ofensas o insultos deliberados a los particulares ni a las autoridades constitucionales.
A su vez, el punto 2.1, del apartado “Tópicos periodísticos” del mismo manual, aclara:
El periodista nunca debe olvidar que trabaja para el lector, destinatario final de la información, porque ello le señala la responsabilidad que asume de ser depositario del derecho que tiene todo ciudadano a ser informado veraz y oportunamente.
Finalmente, cito el punto 3.7 del apartado “Criterios editoriales”:
Prudencia y sentido estético. Los artículos que publique Tribuna de Periodistas deben evitar el sensacionalismo y la exageración en el tratamiento y divulgación de la información.
Lo antedicho pone de manifiesto que se ha violado el Manual de Estilo de este portal en varios de sus tramos. Esto configura un llamado de atención para los editores del sitio.
Si se quiere publicar una columna como la de Piragini, debe crearse una nueva sección se sea “Opinión”; de lo contrario, debe ir a la ya existente “Carta de lectores”, prevista en el mismo manual.
Agradezco a los lectores que me escriben con tanto cariño —a todos y cada uno seguiré respondiéndoles en privado— y los invito a seguir haciéndolo a mi mail personal: ombudsman@periodicotribuna.com.ar.