Todo se ha dicho ya sobre la desaparición de Santiago Maldonado, el joven que desapareció el 1º de agosto último y que fue hallado en el Rio Chubut el 17 de octubre, 78 días más tarde.
Mientras el joven artesano se encontraba “desaparecido” se formuló una desmesurada cantidad de hipótesis, que lo había matado gendarmería, que se había exiliado a Chile, que lo hizo desaparecer el gobierno, de todo.
Una vez encontrado el cuerpo, los forenses que dieron las primeras noticias detallaban ciertos hechos que hacían dudar que Maldonado hubiese estado 78 días bajo el agua.
Las primicias contaban que en menos de una semana bajo el agua se caen las uñas y los cabellos, cosa que el cadáver tenía intactos y la duda mayor refiere al lugar donde se encontró el cuerpo, lo que me lleva a preguntar, si realmente se ahogó como se dice en estos últimos días ¿Cómo es que apareció 300 metros rio arriba?
El criminalista Enrique Pruger advirtió que “ningún cadáver sube rio arriba” y menos “en un rio de cordillera que baja desde los 700 metros sobre el nivel de mar a cero y tiene una pendiente pronunciada”.
Hoy, todos los medios de información, hablan de que el análisis de diatomeas realizado en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA señaló que “el plancton (formado por organismos vegetales o animales de pequeñas dimensiones que se encuentran en suspensión en el agua del mar o de los ríos) que se encontró en la medula ósea de Santiago Maldonado, corresponde al que habita en el Rio Chubut”, y en cuanto a la permanencia en el agua, las fuentes señalaron que los resultados abonan la teoría de que el cuerpo “estuvo más de dos meses en el Rio Chubut”.
Lo que me lleva a otra pregunta significativa ¿existe un encubrimiento en este caso?
Persisten dudas y hechos que colisionan entre sí, por lo que hay que ver las dos caras de la moneda y “tomar con una pinza” todo lo que se informa.