Como publicó Tribuna de Periodistas, este domingo Mauricio Macri fue escrachado en Suiza en el marco de la recepción del premio Living Football Award.
El presidente estaba siendo esperado por un grupo de participantes que le pidieron sacarse una foto. Pero, cuando el presidente bajó los cristales y accedió al saludo de las personas están le expresaron: “No sos bienvenido en ningún lado. Te queda muy poco tiempo porque vuelve Cristina”.
Quienes hicieron el escrache son los hermanos Iván y Sebastián Hossly, junto a una mujer llamada Paula Goitia que en Facebook aparece como Pau Leen.
Ante tal situación, Macri solo sonrió y siguió su camino, como si nada hubiera ocurrido. Las redes sociales se encargaron luego de aleccionar a los hermanos Hossly.
No obstante, muchos se preguntaron: ¿Qué hubiera ocurrido si ello mismo hubiera sucedido con Cristina, durante su gobierno?
No es difícil imaginarlo: la entonces presidenta habría impulsado una cadena nacional, habría escrachado públicamente a los escrachadores —lo hizo con el dueño de la inmobiliaria Toselli que la había criticado superficialmente— y le habría enviado inspecciones de todo tipo, principalmente de la AFIP, como hizo con muchos de los que la criticaban.
A su vez, los “emboscadores” habrían sido destrozados por los medios K, que los difamarían con mentiras incomprobables, como sabía hacer el kirchnerismo (nosotros sabemos bastante de ello).
No especularé respecto de la posibilidad de que alguno de los escrachadores sufriera algún accidente, siempre oportuno. Eso queda librado a la imaginación de los lectores.
El macrismo tiene muchos defectos, muchísimos, pero los medios podemos agradecer la tranquilidad de poder trabajar en paz, sin aprietes ni escraches. De ninguna índole.