El pasado jueves comenzó la campaña del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para vacunar a mayores de 65 años sin cobertura médica con el objetivo de prevenir la gripe.
En ese sentido se abrieron unos 80 centros de vacunación dentro de las 22 Comunas porteñas. Los mismos se adoptaron en escuelas, iglesias y espacios culturales para evitar la aglomeración de personas en los hospitales públicos.
Dicha vacuna también está destinada a personas menores de 65 años que presenten algún factor de riesgo como problemas cardíacos, respiratorios, entre otros.
Sin embargo, según recayó en esta redacción, las quejas por la falta de la vacuna antigripal pediátrica fueron acrecentándose con el paso de las horas durante los dos primeros días de la campaña.
Como no podía ser de otra manera, desde el 147 le confesaron a Tribuna de Periodistas que “a nosotros también nos están llamando constantemente” en relación a la falta de información al respecto.
“Con respecto a vacunas para los niños o las demás personas no tenemos información” supo mencionar la persona en cuestión, agregando que “nosotros estamos manejando el programa de vacunación para adultos mayores de 65 años que no tienen ningún tipo de cobertura médica”.
No obstante, fue el propio jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien aclaró que “los menores de 65 años que estén en otros grupos de riesgo o que por orden médica deban vacunarse contra la gripe estarán incluidos en el cronograma de turnos”.
En diálogo con Tribuna de periodistas, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, manifestó que “hasta donde yo sé no hoy ningún faltante de la vacuna pediátrica. Por favor chequéalo” con el equipo de prensa para que brinden la “información precisa de parte mía”.
Desde el equipo de prensa del Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, simplemente atinaron a decir que “no falta”.
Para que no quepa ninguna duda, quien escribe estas líneas fue presencialmente a uno de los colegios en el cual se realizaba este servicio y la falta de la vacuna fue confirmada por el personal de vacunación: “tenemos para chicos mayores de tres años”.
¿Y si un menor de tres años posee algún problema preexistente por el cual necesite inmunizarse frente a la gripe? Ello ciertamente sucedió.
Esto resulta ser grave, ya que es necesario sacar a los chicos de las casas y romper de esta forma la cuarentena para poder conseguir una de esas vacunas. Luego, al llegar al lugar aseguran que la misma no fue enviada.
Ello, además de dejar a la vista los escuetos argumentos falaces que desde el Gobierno porteño se brindan, echa por tierra la hipótesis sobre la posibilidad del agotamiento de la misma.
Al consultar sobre una posible solución, el personal levantó el teléfono y tras un breve llamado sólo supo responder que “no nos dejan dar la mitad de la dosis”. Por lo que los más pequeños, siendo vulnerables, deben regresar a las casas sin respuesta elocuente
Es necesario destacar que así como resulta obligatorio vacunar a un mayor de 65 años, también lo es para menores de entre 6 meses y dos años.
El gesto de brindarle una solución a los mayores, el grupo más vulnerable en épocas en las cuales el Coronavirus genera estragos en la sociedad, resulta plausible.
Sin embargo, no se puede dejar de lado la falta de profesionalismo a la hora de hablar de otro grupo, también expuesto a las enfermedades, que presenta un sistema inmunológico frágil.
Por otro lado sería grato que el Gobierno porteño se haga cargo de sus errores y busque reforzar esta falta en vez de andar regalando mentiras a quienes consultan por una grave falta.