De acuerdo a un relevamiento que realizó la abogada Silvina Martínez sobre las Declaraciones Juradas de Máximo Kirchner, como sabemos hoy diputado por provincia de Buenos Aires, la fortuna del hijo de la vicepresidente en el año 2020 y en dólares, ascendería a U$S 3.399.169,74, con lo cual, de aprobarse el impuesto a la riqueza que tanto promueve él y su madre, la medida lo alcanzaría.
El análisis efectuado por la Dra Martínez a la última Declaración Jurada, indica que el patrimonio de Máximo Kirchner se compone de:
Unos 36.923.549 pesos en propiedades, equivalentes a U$S 551.097. Estos valores son a “Valor fiscal”, algo realmente irrisorio si se compara con el valor de plaza de las propiedades que posee.
Posee 34.576.824 pesos equivalentes a los dólares registrados en su caja de ahorro, equivalente a U$S 516.072,46.
También registra 156.244.000 pesos equivalentes a los dólares que tenia en plazo fijo, totalizando U$S 2.332.000
Es decir, de acuerdo a lo blanqueado por el diputado bonaerense, su fortuna asciende a $ 227.744.373 al año 2020 o su equivalente en dólares, constituyendo un nada despreciable “patrimonio declarado” de U$S 3.399.169,74, tomado con un dólar a $ 67.
Paradójicamente, si se aprueba el impuesto a la riqueza que pregona la madre y el hijo, esta fortuna tributaría y también la de su hermana Florencia, la joven a la cual le encontraron U$S 4.664.000 en “ladrillo termosellados” en una caja de seguridad del banco, transferidos (dijo la propia tenedora) desde la sucesión de su padre. Una posesión tan oscura como oscura fue la construcción del patrimonio de Néstor y Cristina y también la de su hermano que hoy es poseedor de más de 350 millones de pesos (actualizando el dólar blue que actualmente roza los 100 pesos y los valores inmobiliarios lejos de ser los que el a DDJJ se indican) sin haber trabajado un solo día ni haber pasado por un claustro universitario, al menos para justificar el estatus que pretende tener, con alguna profesión ganada por esfuerzo propio.
Más allá de que esta fortuna esté embargada debido a las investigaciones de corrupción, lavado de dinero y toda clase de delitos en los que están incursos los Kirchner, no hay forma de explicar por vía de la lógica, la fortuna del diputado; aunque antes que explicar la de él, la justicia no ha logrado que la familia explique la que amasaron los progenitores, quienes jamás tuvieron actividad comercial, industrial y ni siquiera privada en los últimos 40 años, excepto aquellos cobros usurarios de NK en la década del `70 y la carrera de “exitosa abogada” de Cristina Fernández, de quien no se tiene el mínimo registro de que en Santa Cruz que haya firmado un expediente judicial y mucho menos que haya atendido una demanda, al menos de un consorcio. (Agencia OPI Santa Cruz)